“Este es mi segundo Gobierno, nunca antes había tenido tantos servidores públicos que se quieren retirar para trabajar durante un año y aproximarse al proceso electoral. He pensado: les debo caer yo muy mal para que tantos se quieran retirar”.

Las palabras fueron pronunciadas por el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, el pasado jueves en el barrio Berlín, durante una sesión del programa ‘Gobierno al barrio’, y se podría pensar que eran proféticas, salvo porque, según fuentes cercanas al Mandatario, él estuvo reunido la noche del miércoles, con esa legión de funcionarios que desde ayer empezaron a oficializar su salida del CAM.

Como lo dijo el Gobernante caleño, se trata de aquellos a quienes la ley obliga a renunciar antes del próximo viernes, si no quieren inhabilitarse para acceder a cargos de elección popular en los comicios de octubre del 2023.

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La primera en salir al ruedo fue Miyerlandi Torres, quien el pasado viernes ya se había despedido de sus colaboradores de la Secretaría de Salud Municipal, dejándoles sus “deseos más grandes de que sigan cultivando como personas, como individuos, como profesionales, en su parte laboral, en la parte emocional, con sus familias”.

Y ya ayer, en la carta de dimisión aseguró que se va “por asuntos personales y profesionales” y aprovechó la oportunidad para manifestarle a Ospina “mi más sincera e inmensa gratitud por la oportunidad y la confianza que me brindó, al designarme en el cargo que me permitió trabajar por el bienestar de la ciudadanía”.

En efecto, la ahora exsecretaria de Salud de Cali no ha admitido públicamente lo que para muchos es un secreto a voces y es su deseo de regresar al CAM, pero a ocupar el despacho del Alcalde. Lo que dijo ayer a los medios de comunicación es que se va a tomar un tiempo para reflexionar sobre su futuro político y a prepararse para él.

No obstante, versiones del propio Partido de la U, al que pertenece, indican que su candidatura a la Alcaldía se hará por firmas y que ya está buscando el apoyo de varios concejales.

Pero si el viernes hubo muchos aplausos en la despedida de quien llegó a la Secretaría de Salud siendo la prima de la exgobernadora del Valle del Cauca Dilian Francisca Toro y salió siendo la que enfrentó la lucha contra la pandemia del Covid-19 en Cali, las lágrimas estuvieron presentes ayer en el adiós de Roy Alejandro Barreras.

El saliente director del Departamento Administrativo de Planeación Municipal convocó a los periodistas para que escucharan “el balance final de su gestión, exponiendo los logros, metas y proyección del trabajo realizado” y luego, mientras lloraba, se quitó el chaleco de la Alcaldía y le pidió a su equipo que “no abandonen los proyectos que tanto necesitamos para transformar la ciudad”.

“A Jorge Iván Ospina, gratitud por permitirme servirle a mi ciudad. Hemos trabajado sin descanso 1026 días por hacer de Cali una ciudad más ordenada, equitativa, competitiva y sostenible. Servirles ha sido el mayor privilegio y la mayor alegría de mi vida”, escribió casi a continuación en su cuenta de Twitter y en cinco mensajes se refirió a los “retos monumentales” que enfrenta la capital del Valle.

“Frente a estos retos que tiene la ciudad tenemos la responsabilidad de liderar un gran acuerdo ciudadano que convoque a todos los sectores: movimientos sociales, actores comunitarios, academia, gremios, para que construyamos una hoja de ruta amplia y participativa, Cali sí tiene futuro”, fue el último tuit, con el que, para algunos, dejó la puerta abierta a una eventual aspiración política.

Sin embargo, lo que se dice en los mentideros políticos es que es Barreras hijo fue nominado por el Gobierno de Gustavo Petro como representante de Colombia ante el Banco Interamericano de Desarrollo, BID, a partir del 2023 y se da por seguro que ese nombramiento se oficializaría antes de que termine noviembre.

Menos pomposa sería la salida de James Agudelo, secretario de Desarrollo Territorial y Participación Ciudadana, quien dejará su cargo este jueves para aspirar al Concejo de Cali, en nombre del Partido Liberal, después de haber pasado la carta de dimisión hace dos semanas atrás.

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Cuando llegó al Gobierno de Jorge Iván Ospina era considerado cuota de la exsecretaria de Gobierno Noralba García, pero ahora, se dice, aspiraría de la mano del exgobernador del Valle Juan Carlos Abadía.
Y la lista de renuncias del primer nivel del actual gabinete municipal la completaría Carlos Salazar, director de la Unidad Administrativa de Bienes y Servicios del Municipio, quien también trabajaría hasta hoy, después de manifestarle esa intención al Gobernante caleño en días pasados.

Solo que en su caso el que aspirará no será él sino su hermano, Rodrigo Salazar, quien se venía desempeñando como asesor del Alcalde y también dijo adiós para buscar una curul en el Cabildo local.

Rodrigo, uno de los ‘gatos’ de Ospina, como se conoce en el argot político a los alfiles de la campaña del hoy mandatario, fue jefe jurídico de Metrocali, en donde resultó involucrado en un escándalo alrededor de la Estación Calima.

Carlos, a su vez, seguiría vinculado a las denuncias que se han hecho por los contratos para la adecuación de los separadores viales y algunos alquileres en la Plazoleta Jairo Varela.

A los funcionarios ya nombrados se sumarían las renuncias de Carlos Patiño, subdirector de Territorios de Inclusión, y Fernando Muñoz Cerón, subdirector de Gestión Estratégica del Talento Humano, quienes quieren llegar igualmente al Cabildo caleño.

Pero todavía hay suspenso frente al secretario de Cultura Municipal Ronald Mayorga, quien tendría aspiraciones de postularse a la Alcaldía de Yumbo.

Según se ha indicado, hace dos semanas el funcionario le presentó su dimisión al Mandatario caleño, pero este se la habría negado, pidiéndole que se ocupe “de organizar todo el sector de la cultura en la ciudad”.
Sin embargo, hay quienes aseguran que habrá que esperar hasta el próximo viernes para saber si definitivamente continuará en el Gobierno local o no.

De renunciar, serían al menos cuatro los miembros del gabinete de Jorge Iván Ospina que estarían buscando sucederlo en el cargo, ya que meses atrás Danis Rentería dejó la Secretaría de Paz del Municipio con ese objetivo.

En la Gobernación

Pero si en el CAM se asegura que serían catorce las personas dimitidas para aspirar a alguno de los cargos de elección popular que se votarán en octubre de 2023, en el Palacio de San Francisco la situación no es muy distinta.

Allí, la principal protagonista es Lorena Sofía Velasco, quien, se afirma, dejará el Departamento Administrativo de Planeación Departamental el próximo 31 de octubre para acompañar el futuro político de su esposo, Roy Alejandro Barreras.

Semanas atrás también se despidió de la Gerencia de Indervalle Carlos Felipe López, quien aspiraría a hacerse a un escaño en la Asamblea del Valle del Cauca, recogiendo los votos del hoy senador por el Partido de la U Juan Carlos Garcés. Incluso, hay quienes no descartan que López pueda ser un plan B para la Gobernación por parte de la colectividad que dirige la exmandataria regional Dilian Francisca Toro.

Lo propio hizo Rigoberto Lasso Balanta, integrante del mismo partido, y quien dejó la Secretaría de Asuntos Étnicos del Departamento y se estaría alistando para disputar la Alcaldía de Jamundí por esa colectividad.

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En tanto, Jonathan Velásquez Alzate, director de Inciva hasta el pasado 15 de septiembre, también le estaría apostando a llegar a la Asamblea del Valle.

“Un lastre difícil de superar”

”Esta es una administración que desde el primer momento ha sido cuestionada no solo por la ‘chapa’ de polarización que hay detrás de los proyectos populistas y de izquierda, sino por los malos manejos.
Entonces, a todo aquel funcionario que no renunció antes del primer año, le va a quedar muy difícil superar ese lastre de una Administración ineficiente”, asegura el consultor político Álvaro Benedetti con respecto a quienes están renunciando por estos días a sus funciones en la Alcaldía de Cali para aspirar a algún cargo de elección popular en octubre del próximo año.

En su opinión, no se sabe “con qué suerte vayan a correr Miyerlandi Torres o Roy Alejandro Barreras, que con certeza no quiere inhabilitarse”, pero que podría no tener intención de ocupar la principal oficina del CAM, “aunque tenga una buena opción de competir”.

Sin embargo, el analista considera que no habrá muchos candidatos a suceder en el cargo a Jorge Iván Ospina, debido también en parte a lo polémica que ha sido la gestión del actual mandatario de la capital del Valle del Cauca.

Lo que dice la ley

Según el Departamento Administrativo de la Función Pública, todos los empleados públicos interesados en “participar en política deberán renunciar a su cargo y su renuncia deberá ser aceptada antes de la inscripción como candidato (doce meses antes a la fecha de elección)”.

Y la Resolución del 28542 de la Registraduría Nacional del Estado Civil, que reglamenta el trámite para la inscripción de ciudadanos colombianos y extranjeros residentes en Colombia para las Elecciones de Autoridades Territoriales (gobernadores, alcaldes, diputados, concejales, ediles o miembros de Juntas Administradoras Locales), dispone que estas se realizarán el 29 de octubre de 2023.

Dicho trámite se iniciará el 29 de octubre de 2022 y se extenderá hasta el 29 de agosto de 2023.