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Norte del Cauca. Grupos armados ilegales imponen una especie de toque de queda en municipios como Toribío, Corinto, Miranda, Caloto, Santander de Quilichao, Caldono, Jambaló, El Tambo, Silvia y Suárez. | Foto: Archivo El País

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El Cauca sigue bajo amenaza de los grupos armados ilegales

En municipios del norte de la región se impone una especie de toque de queda que acata la comunidad e incluso varios funcionarios públicos.

21 de mayo de 2020 Por: Redacción de El País

“Desde hoy hay toque de queda indefinido en los municipios de Toribío, Corinto, Miranda, Caloto, Santander de Quilichao, Caldono, Jambaló, El Tambo, Silvia, Suárez, todo es por la salud de la comunidad, no dejaremos ni entrar ni salir civiles en estos municipios por el bien de todos, estar en las casas, el que no acate las normas, nuestros hombres les impondrán un castigo y una multa”.

Ese es un aparte de un panfleto que empezó a circular en los municipios del norte del Cauca desde inicios de la cuarentena obligatoria decretada por el Gobierno Nacional por la emergencia sanitaria de la pandemia del Covid-19.

Y aunque nadie sabe bien de dónde provienen los mensajes y las amenazas, pese a que en los panfletos hay logos o nombres de las disidencias de las Farc y de la guerrilla del ELN, lo cierto es que esto ya ha cobrado algunas vidas y tiene a esta parte de la región en una zozobra permanente.

Solo la semana pasada, en el barrio Gustavo Mejía, ubicado a la salida de Corinto hacia Padilla, fueron asesinadas tres personas que departían en un vivienda. Algunos comuneros dijeron que la masacre habría sido por desobedecer la orden de permanecer cada uno en sus respectivas casas.

Por esos días, un hombre y sus dos hijas menores fallecieron tras un ataque armado registrado en el barrio El Diamante de Suárez. Al parecer, el hombre incumplió el toque de queda de las disidencias, y salió de su vivienda entre las 2:00 p.m. y las 8:00 a.m.

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Y los casos se han repetido en varios municipios. Incluso, el defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret, alertó del incremento de las acciones armadas de grupos al margen de la ley como el ELN y las disidencias de las Farc en el departamento del Cauca, en medio del aislamiento social.

“Están instrumentalizando a los líderes comunitarios, obligándolos a transmitir las órdenes de ellos, y ese escenario es muy peligroso porque ponen en riesgo la vida de los representantes de las comunidades, más ahora en medio de la cuarentena, por eso ya alertamos de la situación para que las instituciones tomen las correspondientes acciones”, dijo Negret.

Pero el tema es tan delicado, que hasta algunos funcionarios públicos están acatando las presuntas órdenes de toque de queda, por seguridad de ellos mismos, sus familiares y por no exponer a sus comunidades.

Un concejal de Suárez, por ejemplo, sale hasta las 2:00 p.m., de ahí se va para su casa hasta el otro día. Varios de sus colegas están haciendo lo mismo.

“A la zona han llegado varios panfletos con amenazas y mostrando un supuesto desacuerdo con la administración local por las medidas tomadas para evitar la propagación del Covid-19. Incluso a varias personas las están extorsionando. La angustia es permanente”, dijo alguien que vive en el municipio.

A toda esta situación se le sumó esta semana las denuncias de Lucy Amparo Guzmán, alcaldesa de Santander de Quilichao, y cuatro mujeres de su gabinete, quienes fueron amenazadas a través de Facebook y WhatsApp, al parecer para que levanten la medida de Pico y Cédula que hay en ese municipio.

“Desafortunadamente estamos recibiendo amenazas de grueso calibre por medio de perfiles falsos en redes sociales y números desconocidos. Con un agravante, estas amenazas tienen una connotación misógina, de violencia machista y discriminatoria”, señaló la Alcaldesa.

Las autoridades ya tienen el material y la denuncia y trabajan para esclarecer el hecho y determinar si estas amenazas hacen parte o no de las otras que atemorizan al norte del departamento

Santander de Quilichao, Cauca, cuenta con más de 113 mil habitantes y tiene líos de seguridad como presencia de grupos armados ilegales, minería ilegal, entre otros.

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