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Víctor Hugo Vidal, alcalde de Buenaventura. | Foto: Alcaldía de Buenaventura

BUENAVENTURA

Cuatro años después del paro cívico, ¿cómo va Buenaventura? Responde el alcalde Víctor Vidal

Víctor Hugo Vidal, alcalde de Buenaventura, habla del impacto de la pandemia y los problemas de seguridad. Dice que los ciudadanos no son violentos ‘per se’.

10 de octubre de 2021 Por: Francy Elena Chagüendo / Editora de Cali

En 2017, Víctor Hugo Vidal Piedrahita fue uno de los principales actores del paro cívico en Buenaventura, el cual tuvo como resultado la firma de una serie de acuerdos con el Gobierno Nacional.

El trabajo realizado durante esa movilización, con diferentes sectores de la población, le llevó a ser reconocido y ser elegido en el 2019 como alcalde de ese municipio.

Han pasado cuatro años del paro cívico y, aunque considera que hay un poco más de articulación en el trabajo con el Gobierno Nacional, todavía no hay grandes avances en la solución de los problemas críticos del Distrito.

En entrevista con El País, el Alcalde Vidal dice que los acuerdos firmados apenas se han cumplido entre un 15% y 20%, “eso depende de quién haga el análisis”, afirma.

Sin embargo, reconoce que hoy Buenaventura está siendo tenida en cuenta en los ministerios y ‘suena’ más con cosas positivas.
Sobre la situación de seguridad, afirma el Mandatario que el origen de los problemas no es Buenaventura, que allá no nace la violencia del país, pero esta sí pasa por este territorio estratégico para los negocios legales e ilegales.

¿Cómo está hoy Buenaventura?
Sigue con los problemas críticos que hemos tenido tradicionalmente, pero al mismo tiempo tenemos avances importantes en su transformación y cada día se gana más en convencimiento de que podemos salir adelante. En medio de las dificultades y carencias vamos avanzando con ganas y positivismo.

¿Qué está pasando en términos de seguridad, se escucha de muchos delitos que se cometen en el Valle que tienen relación con este municipio?
Hay señalamientos injustos. Es injusto decir que los problemas del Valle nacen en Buenaventura. Por el contrario, Buenaventura no tiene bandas criminales, aquí hacen presencia las bandas de Colombia, ninguna nace acá, no nacen carteles de droga en este Distrito, hacen presencia porque esta región tiene una importancia estratégica y quien controla Buenaventura, controla los negocios ilegales que se dan en Colombia.
Eso es lo que pasa, el problema es que este es el territorio más estratégico de Colombia, cualquier negocio de nivel internacional pasa por acá, sea legal o ilegal, recordemos que aún el 60% del comercio internacional pasa por esta región.

Pero es indudable que hay una problemática…
Como ya lo comenté, los problemas de Buenaventura en materia de seguridad no nacen en Buenaventura, eso está claro, creo que es injusto señalar lo contrario.

En los últimos tiempos se ha venido involucrando a la gente del Distrito a esa dinámica, eso sí es cierto, pero tenemos es un corredor que nos liga a todo lo que pasa en el país. Por ejemplo, hay un caso de asesinato en Cali, ¿qué tiene que ver con lo que pasa en Buenaventura?, pues todo, ¿Qué tiene que ver lo que pasa en Tuluá con esta región? Todo porque estamos en un solo país que desafortunadamente no supera la violencia.

Aquí no somos violentos ‘per se’, hay una realidad de violencia y lo que está pasando hoy no es nuevo. Cada vez que hay una disputa por el control territorial de las bandas se eleva la criminalidad. Es toda una cadena organizada y Buenaventura, para bien o para mal, es el centro donde pasan los negocios, legales o ilegales y eso hace que tengamos esos picos de violencia.

En Buenaventura operan 4 grandes terminales marítimas que mueven al año unas 17 millones de toneladas de carga. Transitan, en promedio, 2000 camiones diarios.

En ese sentido ¿no sé requiere más presencia del Estado?
Se requiere ante una crisis de violencia que la Fuerza Pública tenga mayor capacidad de actuación. Este año hemos venido trabajando con el Gobierno Nacional y tenemos 400 unidades de policía adicionales y, en un esfuerzo extraordinario de la administración, hemos podido sostenerlos.

Pero teniendo en cuenta la particularidad de esta población se necesita no solo aumentar la Fuerza Pública, sino un plan estratégico integral en materia seguridad y de convivencia. Estamos trabajando con la Nación en este plan y estamos a la espera de que los Ministerios de Defensa y Justicia le den el visto bueno para implementarlo.

Hay que recuperar el tejido social que se ha visto resquebrajado. La guerra daña el tejido social, a los jóvenes, a las familias porque rompe los lazos. Si no se recupera ese tejido social, será muy difícil parar la violencia. Por ejemplo, a fecha de hoy estamos superando los 300 capturados vinculados a disputas del territorio, ese número es muy alto, y el problema continúa y eso significa que hay una estructura que puede suplir a los jefes que se capturan.

Hay un cartel en Buenaventura de los más buscados, este tiene 12 personas y de esas 7 ya están capturadas, más de la mitad, pero el problema no se resuelve, hay algo de fondo que hay que tratar y ese es el llamado que se le hace al Gobierno Nacional. Debemos profundizar en las causas reales de la violencia, no quedarnos solos en el dato de aumento o baja de los muertos. Estamos mal porque no vivimos en paz, porque hay actores que no permiten la libre movilidad en Buenaventura y en Colombia, que amenazan la juventud y vinculan a la niñez a la violencia, eso hay que transformarlo.

En 2017, después del paro cívico, se hicieron unos acuerdos que permitirían mejorar precisamente la calidad de vida en la ciudad, ¿se han cumplido?
El balance general es bajo en el cumplimiento, entre 15% y 20%, eso dependiendo de quién lo evalúe. Sin embargo, hay algunas cosas positivas, por ejemplo, pese a que se registró un cambio de Gobierno, se reconocieron los acuerdos y se viene trabajando con la Alcaldía.
Un punto a favor es que hemos avanzando en la estructuración del Fondo Autónomo, que es el que manejará los recursos para la inversión en los proyectos, eso creo que es un logro extraordinario. Ya tenemos la estructura, la gerencia ejecutiva y tiene todo para empezar a funcionar, un fondo como este, con una representación amplia de la comunidad, no existe en el país. Ahora nos toca trabajar para que en el presupuesto del 2022 se consignen los recursos.

¿Es decir que ese fondo no tiene recursos?
Falta el traslado de los recursos, ha sido muy difícil que se cumplan parte de los acuerdos porque decían que una vez que el fondo existiera, los dineros pasarían a este. Precisamente el fondo se creó para evitarse la tramitología que representa un proyecto en un Ministerio. La esperanza es que en el presupuesto del 2022 queden los recursos y pueda despegar.

¿Cuánto dinero esperan?
Hoy tiene unos recursos pequeños con los que se está trabajando en el estadio Marino Klinger y en el mejoramiento del polideportivo. Pero siempre se habló de tener un billón de pesos por año para los proyectos que quedaron en los acuerdos de 2017, 2018 y 2019. Estamos formulando el plan integral de Buenaventura para proyectar inversiones hacia los próximos 20 años.

La tasa de desempleo en el municipio de Buenaventura pasó del 20%, según datos del Dane, al 30% durante la pandemia, de acuerdo con estimaciones de la Alcaldía.

¿En qué se ha incumplido?
Hay muchas cosas, pero una de ellas es la Ciudadela Hospitalaria del Pacífico, que fue una de las banderas de los acuerdos del paro, tener un sitio que atienda a la gente de todo el Pacífico. Se habló también de la construcción de 10.000 viviendas rurales, en esto aún no se avanza y otros más sencillos como la Casa de la Ccultura, que está en construcción, pero está muy retrasada.

También estamos muy atrasados en el plan maestro de alcantarillado, no se ha podido llegar acuerdo en temas esenciales. En lo que sí se ha avanzado es en la construcción del acueducto, aquí tenemos un panorama más claro, aunque aún no tenemos agua 24 horas.

¿Cómo le ha ido al municipio en esta pandemia?
Como a todos, esto ha impacto la vida social y productiva y ahora apenas estamos reactivándonos. Hace un mes reactivamos los negocios nocturnos que era lo que nos faltaba, lo mismo el turismo articulados con diferentes sectores.

El comercio pequeño e informal estuvo muy afectado, muchos no tenían capital para reiniciar. El gran comercio también porque sostuvieron sus nóminas pese a la crisis que generó la pandemia. Según datos de la Cámara de Comercio, este año 706 negocios cancelaron la matrícula.
En mi caso tuve covid agresivo y afortunadamente lo superamos, pero tenemos 500 fallecidos por esta enfermedad, en especial adultos. Creo que el balance general ha sido mejor a lo esperado. Lamentamos cada muerte, pero hemos podido atender a todos y superamos la gran falencia que teníamos en salud y era que solo había una cama de UCI, en una clínica privada. Con el trabajo de Alcaldía y los gerentes de hospitales logramos habilitar 25 camas de UCI y los privados también habilitaron un número similar, es decir que llegamos a contar con 54 camas y eso fue fundamental, incluso le servimos de apoyo a todo el departamento en momentos de crisis.

“Estamos haciendo el esfuerzo por llegar a más personas, estamos por debajo de promedio nacional en vacunación con un 39%, pero seguimos trabajando”.

Sobre el alcalde

  • Víctor Hugo Vidal Piedrahita nació en Buenaventura, estudió en colegio público y es Administrador de Empresas de la Universidad del Valle.

  • Fue Concejal del Polo Democrático en el período 2012 – 2015 y en 2017 fue uno de los voceros más destacados del paro cívico.

  • Precisamente ese evento y esa protesta fue uno de los hechos que marcó y cambió la vida de este líder que fue seleccionado por unas 164 organizaciones sociales que hicieron parte del comité central del paro cívico para representar el movimiento en las urnas.

Pero recientemente hubo ‘jalón de orejas’ a Buenaventura por baja vacunación..
Estamos haciendo de todo, todo lo que está en nuestras manos, saliendo casa por casa a vacunar, más los centros de vacunación, vamos a la zona rural, en la calle, en el parque principal, coliseos. Pasamos ya de 100.000 dosis, pero nuestra meta es llegar a 226.000 personas. Hay que reconocer que en Buenaventura, por tradición, conocimientos ancestrales o creencias de la gente, se usan otras soluciones para la enfermedad y eso impacta la vacunación. Por ejemplo, tenemos muchos maestros que desistieron de vacunarse. Estamos haciendo el esfuerzo, estamos por debajo de promedio nacional con un 39%, pero seguimos trabajando.

¿El empleo se ha recuperado, una de las mayores problemáticas del municipio?
Siempre hemos tenido un problema grande de desempleo, la dinámica laboral se caracteriza por tener un nivel de informalidad muy alto. Antes de pandemia era del 20% la tasa de desempleo, ahora estamos en 30%, se perdieron puestos de trabajo de las pymes que se quedaron sin capital. Por eso nosotros con el Banco Agrario, Sena y la Gobernación estamos generando propuestas de emprendimiento para facilitar capital y acompañamiento técnico a los comerciantes y emprendedores.

¿Desde su administración qué se ha hecho para mejorar el panorama social?
Lo primero que hicimos fue organizar la casa. Las cosas estaban muy complicadas y hemos dado pasos importantes en lo administrativo, crear una institucionalidad más fuerte, blindado el quehacer administrativo, eso tiene costos y los estamos pagando. Era necesario crear relaciones de respeto y transparencia, hemos logrado el crecimiento de la confianza y la imagen de Buenaventura. Por ejemplo, hemos superado el tema de las suspensiones de giros de regalías, estamos en una agenda nacional desde el punto de vista positivo. Tenemos problemas nuevos o heredados, pero la imagen hacia Buenaventura es distinta.

Hasta el 8 de octubre Buenaventura reportó 10.061 personas contagiadas de covid y 518 fallecidos. El pasado viernes fue uno de los municipios que no tuvo nuevos casos.

¿En materia financiera cuál es la situación?
Llevamos dos años en la Alcaldía con pandemia, paro y pese a que hemos tenido una baja en el ingreso predial por un problema jurídico que hay entre Invías y la Sociedad Portuaria, hemos salido a flote.
Tenemos un presupuesto de $600.000 millones, con el cual atendemos las necesidades y con la gestión que hacemos tratamos de conseguir otros recursos.

Hasta el 2017 el Invías pagaba el predial del terreno donde está el puerto, pese a que esa zona está concesionada a la Sociedad Portuaria de Buenaventura, pero luego se dijo que era el privado el que debía ocuparse de este tributo. Entonces, desde el 2019 no se hace el respectivo pago y eso ya representa $140.000 millones que le han dejado de entrar al municipio, que cuando llegamos tenía un déficit de $200.000 millones.

Nosotros queremos dejar una administración más organizada, con una mejor imagen en el nivel nacional e internacional. Por ejemplo, este fin de semana nos visitan los embajadores de la Unión Europea, Bélgica, Finlandia, Chile y Australia que vienen a conocer los atractivos de Buenaventura. Acabamos de participar en un evento de cruceros y se abre la posibilidad de que la bahía sea un sitio de parada de estos.

¿Cree que es viable que lleguen cruceros a Buenaventura?
Lo veo cerca, estuvimos en una feria global de cruceros y estando allá nos decían por qué no llegan si es el primer puerto en el Pacífico saliendo de Panamá, y es el segundo terminal marítimo más importante en Suramérica.

Tenemos cosas exóticas e innovadoras que le pueden interesar a cualquier persona en el mundo. El turismo no solo anda buscando sol y playa, que lo tenemos, sino también ríos, diversidad, ballenas, folclor, gastronomía, que es la mejor del mundo, y contamos con una buena oferta hotelera. Creo que tenemos con qué hacerlo, nos toca organizar algunas cosas de temas logísticos.

Creo que más temprano que tarde vamos a tener la llegada de cruceros, lo que cambiaría la lógica del turismo en la región y de Colombia.

De acuerdo con datos de la Cámara de Comercio de Buenaventura, en lo corrido de este año un poco más de 700 negocios cancelaron su matrícula mercantil ante esa entidad.

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