Con vacunación de jóvenes se alcanzaría inmunidad contra covid-19 a fin de año en Cali

Esta semana trascendió a los medios de comunicación un concepto técnico del Ministerio de Salud, en el que, “según análisis recientes”, se plantea que no sea posible alcanzar la inmunidad de rebaño para el Sars Cov2 o que, de alcanzarse, no se requiera el 70 % de inmunización de la población como inicialmente se había estipulado, sino el 90 % o más.

Entres las razones que esboza el MinSalud está que no se tiene la certeza de que todas las vacunas prevengan el covid-19 en el mismo grado. Que se ha demostrado que varias de las vacunas aplicadas en Colombia reducen la transmisión a nivel comunitario, aunque esta efectividad podría verse afectada por la aparición de nuevos linajes como la variante Delta. “Evidencia preliminar sugiere que esta variante afecta la efectividad para reducir el contagio y la transmisión comunitaria”, se aduce en el comunicado.

Así que con este replanteamiento, las cuentas sobre la inmunidad de rebaño son otras. Los tiempos se alargan y las estrategias para lograrla deben ser mucho más rápidas y eficaces, para que la supercontagiosa Delta (un enfermo puede infectar a 6 o 9 personas más) no colapse nuestro sistema de salud ya que,  de acuerdo con expertos, dentro de dos meses podría ser la variante predominante en el país.

Lea además: Colombia firmó acuerdo con Sinovac para producir vacunas en el país

Para la doctora María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del Valle, “la inmunidad de rebaño se alcanza cuando vacunemos el 90 % de la población, es decir, alrededor de 4.050.000 personas (cifras que incluyen Cali, que tiene el 52 % del total de la población)”.

El departamento, agrega la funcionaria, tiene la capacidad de vacunar 40.000 personas diarias. Si tuviéramos la suficiente disponibilidad de biológico, podríamos alcanzar la inmunidad en tres meses. Por lo pronto, hoy se están enfocando en las gestantes, “grupo que no ha sido muy receptivo”, comenta; en los mayores de 12 años con comorbilidades y mayores de 25 años.

En Cali, los adultos de 30 a 34 años (39%) están empezando a quedarse rezagados en primeras dosis de vacunación comparados con los adultos de 25 a 29 años (42 %).

Si se mantienen las condiciones adecuadas de disponibilidad de biológicos, plan operativo de vacunación y acogida de la ciudadanía para acudir a centros de inmunización, la inmunidad de rebaño en Cali se conseguiría en tres o cuatro meses, coinciden en señalar el médico infectólogo José Millán Oñate y el estadístico con maestría en epidemiología Rodolfo Herrera. “Se podría lograr a fin de año”, resalta este último.

Precisamente Herrera, docente de la Universidad Libre, recomienda que, para este fin, se debe acelerar el proceso de vacunación, llegar rápidamente siquiera al 70 % que era la meta inicial y esto se logra aperturando otros grupos de edad, “con eso alcanzaríamos a proteger la población”.

Hay que vacunar rápidamente a la gente más joven que está circulando en la ciudad por distintas razones: académicas, de orden laboral, deportivas, acota Herrera. “Ellos son los que tienen mayor contacto y mayor riesgo de contagiarse. Son los que han demostrado a través de la historia que son los más asintomáticos. Pueden contagiar y ni siquiera saber que están enfermos, que llevan la enfermedad a la casa y ahí está el peligro para los mayores de 50 años”.

El Gobierno autorizó vacunar a jóvenes de 20 a 24 años desde ayer. Universitarios como Angélica María Granja, de 20 años, están dispuestos a decir sí al biológico, “porque me puede proteger de esa enfermedad mortal”. Lo mismo que Andrés Correa*, de 21. “Así aceleramos el proceso de vacunación, con lo que se podría lograr alcanzar la inmunidad de rebaño antes de lo esperado”, comenta.

De otra parte, la secretaria de Salud de Cali, Miyerlandi Torres, prefiere resaltar otro de los mensajes del comunicado del Ministerio de Salud y “es que ya no estamos hablando de inmunidad de rebaño, sino de enfocarnos en vacunar, al ciento por ciento, a las personas mayores de 50, 60 años y a las de alto riesgo, que son las que tienen comorbilidades”.

Teniendo en cuenta por fecha de apertura la inmunización de las poblaciones, destaca, por ejemplo, que los adultos de 60 a 79 años presentan una cobertura con primera dosis (75 %) menor a los de 55 a 59 años (82 %) y de 50-54 años (94 %). Y así hay otras poblaciones rezagadas.

Por eso, entre las estrategias para convencer a la población mayor de 60 años que aun no accede a la vacuna se está pensando en proponer que además de la contactabilidad que puedan realizar las EAPB (toma de comunas) y sus prestadores, se deben visitar en los hogares y dirigir los esfuerzos para convencer a los familiares más jóvenes y cuidadores, ya que son estos quienes en gran parte pueden movilizarlos hacia su IPS o punto de vacunación específico.

La Secretaria de Salud Municipal también está de acuerdo, como lo solicitó la alcaldesa de Bogotá al Gobierno central, con abrir pronto la vacunación sin barreras. “Nosotros se lo habíamos manifestado desde antes al Ministerio, de hecho, ya tenemos la estrategia de vacunar en las universidades”. Además, que MinSalud permita comprar vacunas a las Alcaldías para ampliar cobertura.

“El señor Alcalde ha reiterado que está dispuesto a comprar vacunas si nos lo permite el Ministerio”, resalta Torres, quien además sostiene que siempre y cuando haya un número suficiente de biológicos, “podemos continuar con nuestro rendimiento y fortaleciendo nuestra capacidad y llevando la vacuna, como lo venimos haciendo, con diferentes formas y estrategias”.

Se necesita la mayor celeridad posible en la vacunación para tener una apertura económica, social, cultural, oportunamente, salvando vidas, agrega la funcionaria.

Entre tanto, el médico epidemiólogo Christian Pallares, docente de la Universidad Javeriana, advierte que para contrarrestar la variante Delta no se necesita aumentar o disminuir un determinado porcentaje de inmunización. La mayor parte del impacto en esta lucha la tenemos nosotros mismos con el autocuidado. “De nada sirve que estemos vacunados si la gente no se cuida, no usa el tapabocas, no se hace higiene de manos, no evita sitios no ventilados, no vigila el aforo... porque tú puedes estar inmunizado, pero si no practicas el autocuidado, pues vas a contagiar. Por estar vacunado se te van a presentar formas leves de contagio, pero esas formas van sumando hasta que llegue a alguna persona a la que la enfermedad se le manifieste de manera severa”.

El doctor Millán hace similares recomendaciones y recuerda que las mutaciones del virus —que lo pueden hacer más contagioso y peligroso— se presentan en la medida en que hay más infecciones; sin embargo, expresa, “si todos estamos vacunados y mantenemos el autocuidado, vamos a tener menos posibilidad de infectarnos y de infectar. Y por supuesto, vamos a ponerle fin a esta pandemia”.

*Nombre cambiado por petición de la fuente.

En Cali hasta el 11 de agosto se había vacunado con esquema completo
el 30,4 % (688.793 personas) de la población a vacunar inicialmente: 1.585.324 (que es el 70 % del universo total de habitantes: 2.264.748).

La población vacunada con primeras dosis es de 1.032.467 (46 %).

De acuerdo con el doctor José Millán Oñate y el estadístico Rodolfo Herrera, hay que hacer una búsqueda de las personas que no han completado su esquema de vacunación o que no han accedido a las vacunas para ir donde ellas, escucharlas y explicarles los beneficios de vacunarse.

• 60 a 79 años: Solo el 61 % tiene el esquema completo.
• 55 a 59 años: Solo el 61 % tiene esquema completo.
• 45-49 años: Solo el 33 % tiene el esquema completo.
• 40-44 años: Solo el 45 % tiene el esquema completo

Expertos aconsejan jornadas de vacunación 24 horas; cubrir rápidamente a los grupos vulnerables; que haya vacunación en hogares y más cercos epidemiológicos.