A Santos lo van rajando

En Cartagena vi un caleño feliz, Andy Baiz porque su película sobre Juan Roa Sierra, posible asesino de Gaitán, gustó mucho a los pedantísimos críticos de cine y también al público. En Cartagena una mujer muy admirada, muy caleña, Patricia Tascón, esposa de Munir Falah el durísimo del cine nacional. Y allá ganó premio televisivo una actriz caleña: la talentosa Marcela Carvajal. Allá vi al presidente Santos en una tarima con mi camarada Salvo Basile. Sonreían felices, los aplaudieron sonoramente en la noche del ‘Festival Internacional de cine’.Irresponsable el paro cafetero. Lo pagaron muchos millonarios dueños de fincas con café que buscan jugoso cheque del gobierno. Empujaron a las carreteras a los humildes y ellos en el Club Manizales tomando whisky. Hay asonadas contra la Policía y la turba bloquea carreteras. En Inglaterra quien arremete contra un policía va la cárcel pero aquí a la autoridad no la respetan, el saqueo y el vandalismo son el menú del día. Sumen que hay paro de costo millonario en la Drumont mientras por la radio pasan una tontarrona propaganda que dice “Prosperidad para todos”.Hay pesimismo en el país y para calmarlo miren hacia Italia, allá están peor que nosotros, allá ganó en votos el torpe Berlusconi a pesar de la artillería periodística que hace tres años lo compara con el diablo. Y aciertan, gran película es ‘El diablo se viste de Prada’ con Meryl Streep donde nos muestra el mundo de la moda femenina con sus horrores y vanidades.A Santos lo van rajando injustamente en las encuestas que hoy son como las libretas de notas del colegio donde rajaban a los malos estudiantes. A Santos el estudioso lo rajan, lo ponen casi al mismo nivel de Gustavo Petro. ¿Qué llevó a Petro a tan baja popularidad? No respondo, soy un terco seguidor de Enrique Peñalosa y sigo furioso porque a él le atajaron la Alcaldía de Bogotá.Y para que no acusen a Juan Manuel Santos de bogotano centralista, antier visitó Cali. La foto nacional lo mostró inaugurando un colegio para niños de la clase popular, todos de la etnia afrocolombiana, que lo felicitaron y no lo insultaron como lo vienen haciendo los magnates cafeteros. Imagino que Juan Manuel Santos ante la mala imagen que tiene entre la gente debe estarse preguntando en la almohada: ¿Será que sigo apoyando las difíciles y lentas charlas en Cuba entre los guerrillos y el gobierno? Un costeño alegrón le diría “Ajá, si tú te metiste… tú te sales”.