Este viernes en Reino Unido se ultiman los preparativos para el funeral de Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II fallecido a los 99 años el pasado 9 de abril. Los ojos del mundo están puestos en la ceremonia ante cualquier señal de reconciliación entre los príncipes William y Harry.
Siguiendo la voluntad del duque de Edimburgo, sus restos se enterrarán en el castillo de Windsor, ubicado unos 50 km al oeste de Londres.
Debido a la pandemia solo podrán asistir 30 personas, en su mayoría familiares cercanos. El primer ministro Boris Johnson, que cedió su lugar, anunció el viernes que mirará la ceremonia por televisión desde su residencia de campo en Chequers.
Las exequias, que comenzarán a las 3:00 (hora local) reflejarán la alta consideración que tenían por él los militares, afirmó el general Nick Carter, jefe de las fuerzas armadas.
Vea además: ¿Quién era Felipe de Edimburgo, el príncipe que tiene de luto al Reino Unido?
La ceremonia será de una "precisión militar y, sobre todo, una celebración de una vida bien vivida", dijo Carter a la BBC. "También mostrará lo mucho que las fuerzas armadas le querían y respetaban", agregó.
El príncipe Felipe, que había pedido una ceremonia sencilla pero de marcado estilo militar, sirvió como oficial de Marina en la Segunda Guerra Mundial y mantuvo estrechos lazos con el Ejército.
Su féretro no será llevado en coche fúnebre sino en un Land Rover verde militar diseñado siguiendo las instrucciones aportadas durante años por el duque, que lo dotó de una sección trasera abierta para llevar el ataúd e incluso diseñó los pasadores metálicos que deben impedir que se mueva.
El difunto esposo de la monarca, con quien estuvo casada 73 años, fue toda su vida aficionado a los Land Rovers, a la ingeniería y al diseño.
Los tres ejércitos estarán presentes en el parque de Windsor para recibir el féretro. Y los cornetines de los Grenadier Guards, de los que Felipe fue coronel durante 42 años, encabezarán la procesión hasta la capilla San Jorge donde se celebrará la ceremonia.
El jueves, la casa real británica difundió los nombres de las personas que asistirán a las exequias, ellos son:
Reina Isabel II
Príncipe Carlos
Camilla de Cornualles
Príncipe William
Kate Middleton
Príncipe Harry
Príncipe Andrés
Princesa Beatriz de York
Edoardo Mapelli Mozzi
Princesa Eugenia de York
Jack Brooksbank
Príncipe Eduardo
Sofía de Wessex
Lady Louise Windsor
Jacobo Mountbatten-Windsor
Princesa Ana
Sir Timothy Laurence
Peter Phillips
Zara Phillips
Mike Tindall
David Armstrong-Jones
Lady Sarah Chatto
Daniel Chatto
Duque de Gloucester
Duque of Kent
Princesa Alexandra
Bernhard, príncipe heredero de Baden
Príncipe Donato de Hesse
Príncipe Philipp of Hohenlohe-Langenburg
Condesa Mountbatten de Burma
Tensión entre Harry y William
Esta será la primera aparición pública de Enrique con la realeza desde que él y su esposa Meghan concedieron una explosiva entrevista televisiva en la que acusaron de racismo a algún miembro no identificado de la familia.
El príncipe de 36 años, que sacudió a la monarquía hace un año cuando la pareja decidió abandonar sus funciones reales e irse a vivir a California, no caminará tras el féretro de su abuelo junto a su hermano Guillermo, de 38 años y segundo en el orden sucesorio al trono.
Entre los dos hermanos, sobre cuyas tensas relaciones ha escrito la prensa británica largo y tendido, se situará su primo Peter Phillips.
Puede ser "una excentricidad en la planificación o un intento deliberado de mantenerlos separados", escribió el viernes el diario The Times.
Y aunque el anuncio alimentó la especulación sobre una persistente disputa entre los hermanos, un portavoz del palacio de Buckingham afirmó al periódico The Sun: "No vamos a entrar en percepciones y dramas".
"Las disposiciones se acordaron así y representan los deseos de su majestad" la reina, agregó.
Isabel II, que el 21 de abril cumplirá 95 años, llegará a bordo de un Bentley oficial junto a una dama de compañía pero se sentará sola en la capilla.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, líder espiritual de los anglicanos, que oficiará la ceremonia, pidió el viernes a los británicos de todas las creencias que apoyen a la reina en este "momento de angustia".
Ella y todos los invitados deberán llevar mascarillas y mantener las distancias de seguridad contra el coronavirus.
Entre los presentes, además de sus hijos, estarán Camila, esposa del heredero al trono -Carlos, de 72 años-, todos los nietos del duque y sus cónyuges, los hijos de la hermana de la reina -la difunta princesa Margarita- y tres parientes alemanes de Felipe.
También está invitada una amiga íntima del duque, la condesa Mountbatten de Birmania, que compartía con él la pasión por conducir carruajes de carreras.
Debido al coronavirus se pidió a los británicos que no vayan a Windsor. El funeral se retransmitirá por televisión.
La BBC, que el día de la muerte de Felipe y parte del siguiente interrumpió todos sus programas para ofrecer una intensa cobertura especial, afirmó el jueves haber recibido casi 110.000 quejas, un número récord, calificándola de excesivo y criticando que se dejase a los telespectadores sin opciones.