Así quedaría el salario mínimo para 2026; Gobierno Petro realizará un gran aumento

A tres meses de definirse el incremento del salario mínimo en Colombia para 2026, el debate ya está sobre la mesa.

El Gobierno nacional, encabezado por el presidente Gustavo Petro, ha anticipado que el ajuste será nuevamente elevado, siguiendo la tendencia de aumentos significativos que ha caracterizado tanto su administración como la anterior.

De acuerdo con las proyecciones del área de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, el punto de partida para el ajuste sería el incremento decretado en 2025, del 9,5 %, lo que llevaría el salario mínimo de $1.423.500 a $1.558.773.

Sin embargo, el informe advierte que el aumento podría ser aún mayor, alcanzando los $1.600.000, lo que representaría un ajuste del 12,4 % y un incremento real superior al 7 %, el más alto en cuatro décadas.

En ese sentido, aunque parezca favorable para el poder adquisitivo de los hogares en el corto plazo, plantea riesgos inflacionarios en el mediano y largo plazo.

El salario mínimo, por su efecto indexador, impacta directamente en los precios de servicios intensivos en mano de obra, como alimentación fuera del hogar, peluquería, guarderías y administración de copropiedades.

Además, la reducción de la jornada laboral y la posible entrada en vigor de la reforma laboral agravan esta presión.

Según un informe realizado por el Banco de Bogotá, señala que el salario mínimo será el principal catalizador de la inflación en 2026, año marcado por elecciones presidenciales.

En caso de que el ajuste se mantenga en 9,5 %, la inflación cerraría en 4,1 %, dentro del rango meta del Banco de la República (2 %–4 %). Pero si el incremento alcanza el 12,4 %, la inflación podría escalar a 4,7 %, e incluso superar el 5 % si se aprueba una reforma tributaria.

Por otro lado, los rubros de alimentos, bienes y servicios regulados muestran una alta probabilidad de estabilizarse dentro del rango meta, gracias a una posible apreciación del peso colombiano.

Esta se daría por un dólar débil internacionalmente y una menor prima de riesgo país, siempre que el resultado electoral derive en un gobierno fiscalmente responsable.

Asimismo, con la baja tasa de cambio reduciría costos de fertilizantes y desincentivaría exportaciones, favoreciendo la oferta agrícola nacional. Así, se proyecta una inflación de alimentos del 3,1 %, de bienes del 3 % y de regulados del 3,5 % para finales de 2026.

El ajuste del salario mínimo será decisivo no solo para los ingresos de millones de colombianos, sino también para la trayectoria inflacionaria y las decisiones de política monetaria en el último año del Gobierno de Gustavo Petro.