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En los salones y fachadas del colegio Santa Librada se ven grietas, baldosas sueltas y cielos rasos caídos. | Foto: Oswaldo Páez / El País

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Rezago en infraestructura de algunos colegios de Cali es de hasta 50 años

La alerta por el estado del colegio Santa Librada abrió un debate sobre el tema.

10 de febrero de 2019 Por: Redacción de El País

El SOS que lanzó la institución educativa Santa Librada por los daños que registra en parte de su infraestructura, abrió un debate sobre el rezago que presentan los centros educativos de Cali en este aspecto y la millonaria inversión que está realizando a través del programa Mi Comunidad es Escuela, que tiene como dos de sus componentes la calidad y la infraestructura.

La Secretaría de Educación Municipal aclaró que la situación del colegio Santa Librada es especial, teniendo en cuenta que se cataloga como patrimonio nacional, por lo que requiere de un proceso complejo para su intervención, sin embargo, ya se está trabajando en un plan de mejoramiento y se han hecho algunas inversiones para controlar situaciones críticas.

Y entonces, ¿en qué se están invirtiendo los $500.000 millones destinados a educación, que el gobierno actual ejecuta a través del programa Mi comunidad es Escuela? De este monto, $340.000 millones se van a temas de infraestructura y $160.000 a aspectos relacionado con calidad.

La Secretaría de Educación hace énfasis en que la infraestructura de las instituciones educativas oficiales de Cali presentan problemas de más de 50 años, y “pedirle a una sola administración que los resuelva es imposible”.

“En infraestructura, a la fecha se han entregado 36 obras, en marzo tenemos 34 más para entregar en la zona rural, y estamos iniciando la remodelación de 40 sedes educativas más. De 9 colegios nuevos ya entregamos 3, y de 7 Centro de Desarrollo Infantil, CDI, ya entregamos 2, y está para inaugurar un CDI y una torre nueva del colegio Llano Verde, finalmente se entregarán 150 sedes entre renovadas y nuevas”, dijo Luz Elena Azcárate, secretaria de Educación de Cali.

Los $500.000 millones que se están invirtiendo actualmente en educación, provienen de un empréstito (crédito) por $360.000 millones que adquirió la Alcaldía en 2017, alrededor de $50.000 millones del Ministerio de Educación Nacional y el resto, recursos propios de la administración.

En efecto, parte del dinero destinado a mejorar la infraestructura proviene de un convenio con el Ministerio, a través del cual se financian obras en 24 sedes educativas, que han tenido retrasos.

Video: vea el deterioro que padece Santa Librada, el colegio más icónico de Cali

“El problema no es por falta de presupuesto, porque todo está garantizado en un 100%. Los retrasos en las obras se originan por problemas del Fondo de Infraestructura del Ministerio con los contratistas que ellos mismos han tenido y contratado. El gerente del fondo viene a Cali el próximo 11 de febrero a cita con el alcalde y con los 24 rectores”, explicó Azcárate.

La funcionaria indicó que antes de finalizar esta administración esperan entregar mínimo cinco obra y garantizar que durante el 2020 se entreguen las restantes, “pues están financiadas”.

Libardo Dorado, presidente en el Valle de la Unión Sindical de Directivos de la Educación, Usde, aseguró que esta situación está generando incomodidad y hasta deserción escolar en algunas instituciones educativas, como la José María Vivas Balcázar, donde es rector.

“El colegio está siendo beneficiado con reconstrucción de la sede principal, que la demolieron totalmente desde mediados del año pasado, pasó un semestre y estamos agotando el primer mes y no se han reiniciado las obras. En estos momentos he sido contactado telefónicamente por rectores, maestros, algunos padres de familia, y la gente dice que están inconformes porque eso ha ocasionado incomodidad”, dijo Dorado.

El directivo sindical reveló, que por ejemplo, en la institución a su cargo hay hacinamiento: “en la academia militar, el aula máxima lo han dividido en cuatro partes para tener cuatro salones y los niños no se aguantan el calor y eso nos han producido deserción escolar en la mayoría de las instituciones educativas, eso implica que si se van los niños nos quedan maestros excedentes y comienza el calvario de reubicar maestros”.
Sobre el impacto de Mi Comunidad es Escuela, el docente aseguró que en temas de calidad “hay muchas bondades”.

“Tenemos maestros de nuestras instituciones que han sido escogidos para acompañar a las instituciones en mejorar los resultados de las pruebas Saber y revisar todo el proyecto educativo, han acertado porque el acompañamiento y el trabajo nos ha aportado muchísimo a fortalecer el componente pedagógico de las instituciones educativas”.

A su vez, Guillermo Ordóñez, presidente del Sindicato Único de Trabajadores por la Educación del Valle, Sutev, añadió que “se está invirtiendo en capacitaciones de jornada extendida, con programas de atención artística, cultural, entonces eso nos parece bien, pero en infraestructura hay mucha institución que se nos está cayendo, y lo que se debe hacer es redireccionar bien los recursos para recuperarlas”.

Así se distribuye el dinero de mi Comunidad es Escuela

45 semilleros de cultura ciudadana se crearon, durante el 2018, en
el mismo número de instituciones educativas, con el fin de tratar temas como convivencia, consumo de sustancias psicoactivas y medio ambiente, entre otros.

140 sedes educativas serán intervenidas físicamente con adecuación o infraestructura nueva. En 2017 se intervinieron 16; en 2018 fueron 68 y el resto estarán listas este año.

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