En la apertura del Congreso Nacional de Infraestructura de la CCI, el presidente del gremio, Juan Martín Caicedo Ferrer, aseguró que no se puede seguir aplazando la destinación de recursos para garantizar la navegabilidad del río Magdalena y para el dragado del puerto de Buenaventura. “Ambos son pilares de la competitividad nacional y símbolos de nuestra integración fluvial y marítima”, aseguró el líder gremial.

Desde la región se ha venido pidiendo apoyo del Gobierno Nacional para definir cómo se hará el dragado, obra clave para la competitividad de la región y del país. Actualmente, la profundidad del canal de acceso de la bahía de Buenaventura está a 12 metros y se requiere llevarlo mínimo a 16 metros para permitir el ingreso de buques de gran tamaño.

Al respecto, la ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, reconoció la importancia de la obra, pero dijo que “a la fecha no hay recursos para este proyecto”.

Sin embargo, afirmó que en este momento se adelantan una serie de temas relacionados con licencias y consultas previas. “La idea es que el otro año se declare de importancia estrategia y se pueda dejar $1,5 billones para el dragado”, afirmó.

Ahora, explicó, se está terminando la modificación de la licencia ambiental para poder tramitar el Conpes y, posteriormente, se pasaría a dejar las vigencias futuras comprometidas para la obra, lo que sucedería en el 2026.

Otra de las obras del Valle del Cauca que fue mencionada dentro de los retos pendientes del país fue la concesión del aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón

“Hay una oportunidad histórica, en efecto, con proyectos como el nuevo aeropuerto de Cartagena, El Dorado Max en Bogotá, la ampliación del Alfonso Bonilla Aragón en Cali y el corredor Conexión Centro (Manizales–La Paila). Juntos suman inversiones que superan los $34 billones, provenientes de capital privado”, dijo Juan Martín Caicedo.

Balance del Gobierno

Según el Ministerio de Transporte, el conjunto de proyectos estratégicos del sector definidos y validados por el Gobierno Nacional para el futuro alcanza $321,3 billones, una escala de inversión 5,6 veces mayor a los aportes de la Nación en las concesiones viales 4G, estimados en $57 billones.

De este total, $38,6 billones ya cuentan con documento Conpes, lo que significa que las obras están formalmente priorizadas y tienen vía libre para avanzar en estructuración, financiación y gestión dentro del Presupuesto General de la Nación.

Según informe de la ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, el portafolio de inversiones se organiza en seis grandes frentes que modernizarán la conectividad nacional:

  • Reactivación Férrea (2026–2055): $276,3 billones
  • Vías para la Paz (2026–2035): $18,2 billones
  • Tren de Zipaquirá (2027–2039): $17,0 billones
  • Infraestructura Aeroportuaria (2026–2030): $4,4 billones
  • Electrificación de la flota de buses del transporte público (2026–2043): $1,28 billones
  • Infraestructura fluvial y portuaria: $4,13 billones

“Colombia está dando un salto histórico. Las inversiones priorizadas para el sector transporte son casi seis veces mayores que las 4G. Esta hoja de ruta integra vías, trenes, aeropuertos, puertos y muelles para transformar la movilidad, cerrar brechas y garantizar un país más conectado y productivo", dijo.

Para Juan Martín Caicedo, presidente de la CCI, hacia futuro es necesario rescatar la confianza de financiadores e inversionistas, “sin duda lesionada por los ataques sistemáticos, -desde las esferas oficiales- al modelo de participación privada en el desarrollo de la infraestructura. Sin el factor confianza, valga decirlo, difícilmente las concesiones viales, portuarias y aeroportuarias habrían sido capaces de superar, en escasos 30 años, el rezago de un siglo en materia de infraestructura”, dijo.