Gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, firmó la Ordenanza que promueve las cabalgatas en el departamento

Finalmente, fue firmado por la gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, el proyecto de Ordenanza No. 017 de 2023, que promueve las actividades culturales y recreativas en el departamento que requieran la participación de caballos y otros équidos, entre las cuales se encuentran las polémicas cabalgatas.

Además de los caballos, el grupo de los équidos está integrado por yeguas, burros, burras, cebras y sus híbridos o cruces.

En los últimos días, y como antesala a la determinación que pudiera tomar la Gobernadora del Valle, diferentes organizaciones que velan por la protección de los animales se habían opuesto a la ratificación de esta ordenanza, al asegurar que predominarán las malas condiciones de esas especies durante las actividades.

Incluso el pasado lunes se colgó un cartel en el edificio de la Gobernación, con la inscripción “Clara Luz, diga no a las cabalgatas”.

“Hoy esa ordenanza está en las manos de la gobernadora Clara Luz Roldán. En sus manos está la posibilidad de objetar esa ordenanza, de detener la explotación de los equinos en las cabalgatas. No se haga cómplice de la explotación de los caballos. Usted ha dicho que está en contra de la instrumentalización de los animales, y particularmente en contra del maltrato animal que significan las cabalgatas. Diga no a las cabalgatas”, expresó el concejal animalista Terry Hurtado en ese momento.

También aseguraron que esos desfiles y cabalgatas han tenido históricamente resultados negativos, como los ocurridos en la reciente cabalgata en Tuluá.

“Desde la Federación de Liberación Animal nos tomamos la Gobernación y le decimos a la gobernadora: Clara Luz Roldán, diga no a las cabalgatas y objete esta ordenanza que condena a los caballos a la explotación en las crueles y violentas cabalgatas”, aseguró también el pasado lunes Carol Ruiz, vocera de la organización animalista.

Sin embargo, esos argumentos no pesaron y la Mandataria vallecaucana firmó la Ordenanza, pero se indicó que no habrá maltrato y que se garantizará lo mejor para los équidos. De acuerdo con el documento, se determinaron algunos mecanismos que deberán cumplirse en el marco de la protección y el bienestar de estos animales, para lo cual se establecieron condiciones mínimas de manejo y trato. Estas son:

• Promover acciones para que la movilización de los équidos prevenga la utilización de elementos contundentes, corto punzantes, eléctricos o de otro origen, que puedan ocasionar algún tipo de lesión o sufrimiento.
• Promover una cultura responsable del manejo de équidos, (...) con equipo o aperos apropiados y diseñados en forma adecuada, bien ajustada y cómoda, que permitan que el équido ejerza sus movimientos en las mejores condiciones, de manera eficiente y sin riego de dolor o lesiones.

• (...) En las situaciones en que los équidos sean atados, que los cuidadores, organizadores u operadores propendan por un espacio suficiente entre los equinos, que les permita estar de pie lo más naturalmente y moverse sin riesgo de lesionarse. El lugar de sujeción ha de estar libre de obstáculos que puedan enganchar las riendas y se deberán tomar las acciones necesarias para mover a los équidos a áreas que les brinden sombra.
• El Departamento del Valle del Cauca promoverá herramientas que incentiven la cultura del buen manejo de los équidos, para que los animales que se destinen para los desfiles cuenten con condiciones básicas, como las siguientes: a) Evitar sobrecargar a los équidos por mayor peso del que puedan soportar. b) Evitar el uso de elementos que puedan causar incomodidad, dolor o heridas. c) Los équidos -deberán contar- con entrenamiento específico para mejorar su rendimiento, habilidades o capacidades, según su fin zootécnico.

De igual manera, se creó el Consejo Departamental para el Bienestar del Équido en el Valle del Cauca, que tendrá como propósito “el seguimiento y evaluación de la puesta en marcha de los lineamientos establecidos en la ordenanza para garantizar el bienestar animal y el fomento cultural, recreativo y económico que se derive de las actividades con équidos”.