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Para los psicólogos, la necesidad de suplir una carencia lleva a muchos a tener más de una pareja a la vez. | Foto: Tyler Nix / Unsplash

SEXO

¿Realmente es amor? Esto piensan los expertos sobre tener más de una pareja

Para los psicólogos, la necesidad de suplir una carencia lleva a muchos a tener más de una pareja a la vez.

17 de marzo de 2019 Por: Redacción de El País

"No sé qué me pasa. No me considero una mujer superficial pero en este momento siento que tengo sentimientos fuertes hacia tres hombres”, le consulta una paciente a la psicóloga Nancy Álvarez.

“Realmente nadie puede estar realmente enamorado de tres personas. Es confusión. Es diferente que esté enamorada de alguien y le atraiga otro. Amar a alguien es profundo, es querer a esa persona con los defectos que tiene, conocerla, preocuparse por ella y por su futuro, cuidarla; pueden discutir, pelear, pero tienen un vínculo afectivo fuerte. Que alguien le guste o le llame la atención por como habla o como luce, es diferente. Vaya al psicólogo, busque ayuda profesional, porque eso que usted dice que siente no es normal”, le responde esta psicóloga clínica, sexóloga y terapeuta familiar dominicana, y toda una celebridad de televisión de Miami.

“Posiblemente usted lo que tiene es terror a comprometerse, porque fue abandonada, porque tiene temor a fracasar, porque alguien la trató mal, porque su papá abandonó a su mamá y usted vio ese modelo y le da miedo que le pase igual. Debe resolver ese temor, porque ninguna pareja va a aguantar que usted tenga tres. No juegue con eso, pues tiene consecuencias serias”, agrega la doctora Nancy, quien estrenó el 11 de marzo cápsulas especiales en YouTube bajo el nombre de ‘Dra. Nancy más allá’.

Sin embargo, “a diferencia de los pingüinos, que están biológicamente diseñados para encontrar una pareja, sentir conexión química y brindarle exclusividad, los seres humanos suelen decir que tienen un corazón grande en el que caben varios”, considera Paula Dávila, psicóloga clínica.

“Amar no se limita a las sensaciones corporales, a las mariposas en el estómago o a erizarse con el tacto, se trata de acumular experiencias y enamorarse a través de estas. Ese proceso llamado enamoramiento dura entre seis y ocho meses. Por eso muchos tienden a confundirse, al sentir que aman a dos o tres, porque se basan en la atracción sexual que sí se puede dar por dos o tres personas al tiempo”, explica Dávila.

“Uno se enamora por medio de sustancias químicas, y hay compatibilidad y gustos, en gran parte ligados a una parte biológica que no controlamos. El resto del proceso de entablar una relación y generar un vínculo emocional como tal es la parte posterior a pasar por ese primer momento de enamoramiento. Ahí es cuando se generan sentimientos en una relación más madura, la parte biológica se regula y entran en juego otras cosas, como el proyecto de vida”, añade.

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Los que dicen como el cantante popular colombiano Galy Galiano que tienen “dos corazones”, solo están confundidos, coincide Mario Guerra, tanatólogo, coach y psicoterapeuta.

El amor romántico que hemos aprendido en occidente, neurológicamente, va a pedir exclusividad, dice Guerra.

“Cuando conoces a dos personas que te atraen, ambas te generan dopamina en el cerebro, esa química rica, esas mariposas en el estómago. Pero una vez empieces a conocerlas, una de las dos, neurológicamente, va a ser la fuente primaria de generación de dopamina, y tu cerebro te va a hacer inclinar por esa persona y va a hacer que a la otra, poco a poco, vayas apartándola de tu sistema. Al final, nuestro cerebro está diseñado para que estemos con una persona a la vez, aunque sea de manera secuencial”.

“Los seres humanos somos monógamos secuenciales, estamos diseñados neurológicamente para estar con una pareja a la vez, no con dos o tres, así en el transcurso de nuestra vida podamos estar cambiando de parejas en términos de varios años. Por eso somos monógamos secuenciales”, afirma el experto.

Para él, quien siente que tiene dos o más amores, está confundido. “Podemos confundir el deseo o el romance con la pasión o el amor comprometido, el que va a perdurar. Cómo podemos decir que amamos a dos personas simultáneamente, si cuando amamos queremos darle todo a esa persona. Si tenemos tiempo libre nos gusta pasarlo con quien verdaderamente amamos”, afirma.

Cuando surge un interés por dos personas o más es porque alguna de ellas satisface una necesidad. “No es lo mismo necesitar, que amar.
Cuando necesito de alguien que me dé seguridad, que me eleve la autoestima, reconocimiento, pasión, no puedo decir que es amor, porque se está satisfaciendo una carencia. Y no podemos relacionarnos de manera amorosa cuando lo hacemos desde la carencia”, opina Guerra.

El tercero o cuarto en cuestión, según el coach, “llena un vacío que tengo, pero no quiere decir que lo esté o me esté amando. Mientras me dé lo que necesito lo voy a mantener a mi lado, pero si deja de darme reconocimiento o llega alguien que me dé más, de inmediato me voy. Por eso a veces pasamos de una pareja a otra pensando que estamos amando”.

En el caso de la esposa y la amante, la esposa lo que brinda es la seguridad, la confianza y la continuidad; mientras que la amante satisface una necesidad de pasión.

Al amar a alguien, este satisface las necesidades básicas de una relación, pero nunca las primarias y elementales, como de reconocimiento, autoestima y valoración, porque estas deben ser satisfechas desde nuestro interior.

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Explica Guerra que “quien tiene una carencia interior va pasando de una pareja a otra ya sea de manera simultánea o alternada, considerando que esa persona que llega a mi vida sí va a satisfacer mis necesidades, me va a hacer feliz. Pero entras a una relación, al inicio estás bien, luego se disminuyen las ganas y al final te das cuenta de que la carencia es interna y no la vas a llenar afuera”.

Se trata de una carencia que, sobre todo, proviene de una insatisfacción emocional de la infancia. En ese caso lo recomendable es ir a terapia o autoevaluarse.

“Probablemente ni siquiera ame a ninguna de las dos personas, porque la persona confundida no tiene claro lo que es el amor y lo que es necesidad o apego. A veces, la esposa hace el rol de la mamá que nunca estuvo o ya no está. Y la amante cumple el rol de la novia. Salgo de mi casa con mi mamá, voy a ver a mi novia y regreso antes de que mi mamá me regañe”, concluye Guerra, quien aconseja en caso de duda ir a terapia para ver en perspectiva la confusión.

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de cada diez hombres casados que se divorcian, se casa con la amante, asegura la psicóloga Nancy Álvarez.

En conclusión

Amar no es satisfacer carencias. Se puede amar a muchas personas, pero de distinta forma.

Neurológicamente no se puede amar a dos personas de la misma manera.

Amar no es satisfacer una carencia a través de otra persona. Las carencias se satisfacen internamente, para poder relacionarse con alguien desde una perspectiva sana.

Se ama de verdad a una persona, pero puede haber dependencia emocional con una segunda persona.

De acuerdo con la psicóloga Nancy Álvarez, en las culturas donde a un hombre se le permite tener varias mujeres, estas viven deprimidas, porque “la primera es la que más importa, las demás son relleno, satisfacen determinados placeres al hombre, mientras las otras padecen”.

Sin embargo, la sexóloga Flavia Dos Santos rescata la opción de una relación de ‘poliamor’. “Este inicia cuando usted y su pareja, después de analizarlo, sienten que quieren
comenzar una relación con otra persona (o más de una)”.

Ese tipo de relación tuvo su auge en los años noventa y se basa en entablar relaciones estables (una principal y otra secundaria) con más de una persona (incluso pueden ser varias) con el fin de encontrar el 'paquete completo' donde el amor, la estabilidad y la sexualidad de todos está completamente satisfecha.

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