Así se prepara la hierba medicinal que ayuda a expulsar las flemas y limpiar los pulmones naturalmente

Desde la antigüedad, se conservan recetas de remedios caseros que pueden ayudar a las personas cuando tienen dolencias leves de su salud. Estas preparaciones son clave en la recuperación. Algunas infusiones medicinales son reconocidas por ayudar en enfermedades respiratorias, principalmente resfriados y gripes, caracterizadas por el exceso de flema. Los secretos de estos remedios se han mantenido de generación en generación hasta el día de hoy.

En este sentido, se conoce una infusión que tiene múltiples beneficios para contrarrestar los síntomas de los resfriados y gripes, en especial, por ayudar a que las flemas salgan del organismo y que las personas fortalezcan su sistema inmunológico.

Entre muchas opciones, una de las más efectivas es la infusión hecha a base de tomillo, una planta aromática utilizada principalmente como condimento para darle sabor a las comidas. Sin embargo, esta planta también tiene propiedades para mejorar la salud.

Los beneficios para la salud que se han descubierto sobre el tomillo incluyen sus cualidades como expectorante, espasmódico y antiséptico, además ayuda a fortalecer el sistema inmunológico. Por ello, también es recomendado tomar sus infusiones en temporadas de invierno o cuando la persona tiene debilidad.

Por otro lado, el tomillo tiene otras propiedades que lo convierten en una planta muy poderosa en términos medicinales. A los beneficios anteriormente mencionados, se pueden agregar sus propiedades antioxidantes, su efecto como relajante y digestivo; incluso, puede evitar el exceso de gases y ayuda a aliviar algunas afecciones a nivel bucal.

Prepare una infusión de tomillo para el resfriado y las flemas

Sin duda, el tomillo es una planta idónea a la cual acudir cuando se sufre un resfriado, en especial si se tiene congestión nasal y exceso de flema. La recomendación para preparar una infusión de tomillo es seguir dos sencillos pasos.

En primer lugar, se necesitará una cucharada y media de tomillo, 100 ml de agua y un poco de miel para endulzar la preparación.

El agua se debe poner a calentar. Cuando haya hervido, dejarla otro par de minutos en ebullición. Este es el momento adecuado para añadir la cucharada y media de tomillo. Después se retira la infusión del fuego, se tapa el recipiente y se deja reposar por 5 minutos. Transcurrido de este lapso, debe colarse el agua y servirse al gusto, agregando un poco de miel.

A la infusión de tomillo, también se le pueden agregar otras plantas como hierbabuena o menta. Esto ayuda a que tenga mayores beneficios, especialmente para despejar las vías respiratorias. Cabe destacar que estas últimas plantas también le darán un sabor más refrescante a la bebida.

Infusión de cebolla

Otra alternativa para combatir los síntomas de la congestión, además de la infusión de tomillo, es la infusión de cebolla utilizada tradicionalmente en épocas de invierno, porque ayuda a prevenir la gripe. Entre sus propiedades se encuentra que mejora la respiración, suaviza la garganta y fortalece las defensas.

Preparar una infusión de cebolla es muy sencillo, sus ingredientes son, además de la cebolla, la miel y el limón, esto son dos alimentos que tienen propiedades antibacterianas y antimicóticas, por lo que ayudan a que la infusión también se deshaga de las flemas. Como valor adicional, hay que destacar que el limón contiene Vitamina C, lo que contribuye a mejorar el sistema inmunológico.

La preparación es muy sencilla, solo se debe mezclar la cebolla cortada en aros con un poco de zumo de limón y otro poco de miel, dejando que se vayan integrando. La mezcla se deja reposar y se puede tomar hasta tres veces al día. Si se tienen síntomas de un resfriado y la garganta afectada, tomar este remedio casero ayudará en su recuperación.