Bandera blanca

A su vez, algunos noticieros ‘pesca-rating’ atizan y azuzan el fuego con informaciones sensacionalistas y extremas que están polarizando aún más a los colombianos .

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17 de may de 2021, 11:55 p. m.

Actualizado el 18 de may de 2023, 07:01 a. m.

Tenemos que apaciguarnos. Respirar profundo y calmar los ánimos porque de seguir así vamos a terminar matándonos en una guerra civil en la cual todo puede ocurrir. Es verdad, ha habido excesos de parte y parte y no se trata aquí de echarle la culpa a los unos o a los otros y no terminaríamos nunca.

Yo culpo de esta situación a las redes sociales que se han convertido en una alcantarilla, en la que de manera irresponsable y perversa se difunden ‘fake news’ que tienen al borde de una crisis de nervios a millones de compatriotas que ya no saben que es verdad y que no, y con posturas altisonantes se hablan -perdón- se escriben consignas horrorosas propias del desespero colectivo.

A su vez, algunos noticieros ‘pesca-rating’ atizan y azuzan el fuego con informaciones sensacionalistas y extremas que están polarizando aún más a los colombianos .

Conozco docenas de personas ‘paniquiadas’ que aseguran que este país se acabó y que hay que salir corriendo. Y otras tantas que quieren armarse para defender sus pertenencias, desconociendo que hay un gobierno que está buscando soluciones y unas autoridades que hasta donde les es posible, controlan el desorden público a las que es preciso rodear y apoyar.

No se trata aquí entonces de juzgar, justificar o condenar lo que hemos padecido en estos casi 20 días de paro. Dejémosle ese encargo a otros colegas y opinadores a quienes en su mayoría respeto.

Se trata aquí de izar una bandera blanca -no de rendición sino de paz- que ondee por todo este país convulsionado y que busque senderos que nos acerquen a una inaplazable negociación en la que todos cedan para llegar a un entendimiento, que insisto, no se conseguirá por el camino de la sangre y la destrucción.

No se trata de capitular ni de que haya vencedores y vencidos. Ya la justicia se encargará de condenar a los responsables de los desafueros cometidos en estos aciagos días.

Lo importante es cómo vamos a salir de este conflicto en el que por la fuerza y por las malas - reitero- solo dejará un camino de muerte, destrucción y resentimientos. Por ello este llamado a la cordura a través de una negociación respetuosa y por demás justa, en pro de una gran solución nacional.

Tenemos que concertar, cediendo de parte y parte, nos guste o no nos guste, reconociendo que hay marchas y manifestantes que tienen la razón en sus protestas pacíficas las que, desafortunadamente siguen siendo infiltradas por vándalos y anarquistas empeñados en desestabilizar al Estado.

Creo que hay voluntad de diálogo entre las partes y tocará volver a barajar -en todo el sentido de la palabra- para llegar a un entendimiento, comenzando por una gran cruzada nacional para generar, por ejemplo y de manera inmediata, medió millón de empleos sobre todo para una juventud que clama por ellos .

Bandera blanca repito, de los unos y los otros o sino caos total. ¿Qué prefiere usted: ¿reconciliación y diálogo o un nefasto fuego cruzado?

Administrador de Empresas, Abogado y periodista por vocación. Director y fundador de MF Publicidad Mercadeo Limitada, al igual que de los programas Mario Fernando Piano y Oye Cali. Galardonado en dos oportunidades con el premio Simón Bolívar de periodismo. Escribe para El País hace más de 40 años.

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