Columnistas
Falsa Navidad
El mundo despierta y siente que lo que ‘nos prometieron’ o lo que queríamos, no se consiguió. Entonces, la sensación de estafa es innegable
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16 de dic de 2025, 01:58 a. m.
Actualizado el 16 de dic de 2025, 01:58 a. m.
El problema con diciembre es que está repleto de claroscuros. Y como nos han mentido tanto, tratando de crear un mundo perfecto e ideal, el golpe con lo real es tan fuerte que más de uno prefiere pasar ‘de agache’, no participar de la parafernalia, no disfrazarse de ‘buen hijo’ o ‘buena madre’, ‘buen amigo’, cuando lo cotidiano está repleto de emociones encontradas que no coinciden con ese retrato de perfección. Ser miembro de una familia, reconocerse en ella, no elimina errores, pasiones ocultas, rivalidades, preferencias, discusiones, intereses económicos, etc., etc. La familia es una institución en crisis porque también participó de la mentira: aquí todos nos queremos, aquí todos somos iguales, aquí queremos el bien de todos. El mundo despierta y siente que lo que ‘nos prometieron’ o lo que queríamos, no se consiguió. Entonces, la sensación de estafa es innegable.
Me preguntaban en el Corrillo de MAO, ¿por qué el mundo está triste?, ¿por qué, en época de tanto desarrollo, existe tantísima insatisfacción? ¿Por qué aumentan las enfermedades no solo mentales sino también físicas? ¿Por qué más violencia, más intolerancia, más odio, más rabia? ¿Por qué el responsable de lo que vivo y siento es el otro y no yo mismo? ¿No será que estamos mirando para el lado que no es? Imposible entonces negar que extraviamos el camino: no, por allí no era. Cualquier pensador, en cualquier parte de la geografía mundial, repite lo mismo. El haberle dado tanto valor a lo material, el habernos volcado para afuera, el evadir al inquilino interior, mi propio yo, mi conciencia, nos ha llevado a ese desequilibrio tan aplastante.
Pero no todo está perdido. Despertar es importante porque cuando tengo conciencia de lo que hago, cuando salgo del automático, cuando no me escudo más en el infantil ‘no sé’, empiezo a ser dueño de mi criterio, a caer en cuenta. No es fácil el camino a ese despertar porque, si no he visto, ¿qué quiero ver? Es una paradoja existencial. No puedo anhelar lo que nunca he tenido.
Se necesita un ‘golpe’, un cimbronazo, una cachetada, que saque del marasmo. De allí que el sufrimiento puede ser salvador porque es la palmada que obliga a hacerse preguntas y a buscar otras respuestas. El sufrimiento del mundo, el de su país, su barrio o su familia, no es ‘contra’ usted. Puede ser la llave que lo transporte a otra dimensión, o en letra clara, a plantearse inquietudes que lo saquen del automático.
Es urgente una mirada trascendente o espiritual. Diciembre es propicio para balances, por ello no debo copiar Navidad con el mismo sonsonete, lo que produce ese inmenso vacío y desencanto que enferma. ¿Qué quisiera cambiar, qué quisiera no repetir? Puede que el cambio no se vea ‘afuera’ pero usted ya va siendo consciente que eso no es lo que quiere seguir viviendo. Empieza por la insatisfacción, como la brújula que le muestra un camino distinto. No se desespere: leer, caminar, meditar, aislarse, actividades personales de usted con usted, pueden ser el inicio del despertar.
Diciembre, Navidad, tienen muchísimos significados simbólicos (espirituales) y agotarse en lo material desgasta porque allí no hay respuestas. Sí o sí, si quiere sentir paz y tener una Navidad diferente, intente mirar de otra manera. El silencio, la quietud, encontrar la vocecita interior, callar la bulla externa e interna, puede ayudar. En definitiva, es el camino del sentir, no del pensar. El camino para despertar conciencia…

Psicóloga, conferencista de temas de pareja, cambio y espiritualidad. Licenciada en Letras. Directora de los programa de televisión Revolturas, Despertar de la Conciencia en el Canal 14, y "Consultándole a GloriaH" en el Canal 2 en Cali. Colaboradora habitual de la radio en Oye Cali, El corrillo de Mao . En 2009, ganó el premio Rodrigo Lloreda Caicedo a la mejor columna de opinión en El País. Autora de los libros Hablemos del Amor , "Amarte no es tan fácil" y Dónde esta mi papá´.
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