La 'Coalición de la Esperanza' que desata discordias en la Alianza Verde

Las preferencias en torno al candidato que deberá escoger la colectividad para las presidenciales del 2022 han dejado en evidencia las profundas diferencias ideológicas que hay al interior del Partido Alianza Verde.

En efecto, en esa fuerza política existe un amplio sector que cree que se debe apoyar al exgobenador de Antioquia, Sergio Fajardo. Allí se ubican figuras de ‘peso’, como la alcaldesa de Bogotá, Claudia López; la senadora Angélica Lozano y la respresentante a la Cámara Juanita Goebertus.

Pero en la otra orilla hay militantes que consideran que el senador Gustavo Petro es una mejor opción para la carrera por la Casa de Nariño. Los congresistas Inti Asprilla y León Freddy Muñoz son algunos de ellos.

Solo que esta última posibilidad quedó prácticamente enterrada cuando, el pasado 12 de febrero, se oficializó la ‘Coalición de la Esperanza’ y el ingreso de los ‘verdes’ en ella, pero sin la inclusión en la misma de Petro.

Así lo anunciaron, mediante un comunicado conjunto, el exministro Juan Fernando Cristo; el exsenador Juan Manuel Galán; el exjefe del equipo negociador de Paz Humberto de la Calle; el senador Jorge Enrique Robledo, la representante a la Cámara Ángela María Robledo; el excandidato presidencial Sergio Fajardo.

A ellos se suma la senadora Angélica Lozano, como compromisaria de los ‘verdes’ frente a la coalición, quien, vía Twitter, anunció un día antes que esta alianza espera competirle “a todos los partidos y movimientos de izquierda de Colombia”.

Esto luego de que, también en los últimos días, se anunciara la conformación del ‘Pacto Histórico’, integrado por la Colombia Humana, el Polo Democrático, el Mais, la Unión Patriótica, entre otras fuerzas políticas de esa tendencia ideológica.

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Sin embargo, la ‘Coalición de la Esperanza’ no cayó nada bien entre algunos ‘verdes,’ como Inti Asprilla, quien dijo en las reces sociales que el copresidente del partido, Antonio Navarro, elaboró un comunicado “bajo la dirección de Angélica Lozano, violando lo acordado para lavarle la cara a Juanita Goebertus y complacer las pataletas de Sergio Fajardo”.

“No dejaré camino libre para entregarle el partido a la centroderecha. Voy por las bases”, agregó el representante a la Cámara, marcando un claro distanciamiento con la otra línea de la colectividad.

Ya antes, el 10 de febrero, Asprilla, reconocido por su cercanía con el líder de la Colombia Humana, había informado que la colectividad estaba “en diálogos exploratarios” con Gustavo Petro de cara a una posible alianza para las elecciones de 2022.

Pero Juanita Goebertus tildó de falsa la información proporcionada por su compañero de bancada.

“La noticia es cierta, tan cierta como las charlas que tu sector sostiene con Fajardo, Galán, de la Calle y otros”, le respondió Asprilla en Twitter.

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Angélica Lozano asegura que la decisión que tomó la Alianza Verde de formar la ‘Coalición de la Esperanza’ con varios liderazgos políticos del país que no militan en el partido no puede catalogarse como una división al interior de la colectividad, sino como un “consenso democrático”.

En ese sentido, explica que, de los 19 congresistas del partido, 17 respaldaron la alianza con “otros actores de centro”, mientras que solo dos (Asprilla y Muñoz), quieren formar coalición con el senador Petro.
Asimismo, la congresista Lozano señala que la mayoría de los integrantes del comité ejecutivo nacional de los ‘verdes’ apoyaron la ‘Coalición de la Esperanza’.

“Debo aclarar que en la reunión en la que tomamos la decisión solo estuvieron presentes nueve de los once integrantes del comité ejecutivo, de los cuales solo uno -Witney Chávez- quería aliarse con Petro. Entonces, no se trata de una división, de sino un consenso mayoritario”, sostiene.

¿Pero por qué la mayoría de los integrantes del Partido Verde decidieron respaldar una alianza que dejaba por fuera al líder de la Colombia Humana, pese a la alta votación que alcanzó en las presidenciales del 2018?

Para el director de Innopolítica, Jaime Gutiérrez, lo que busca la Alianza Verde es seguir siendo fiel a su visión de poder bajo la cual fue creada, es decir, mantenerse como un partido de centro, alejado de los extremos, así como de “dinosaurios y maquinarias políticas”.

“Y, en este caso, Petro representa la extrema izquierda y, más grave aún, vincularse con él también implica vincularse con dinosaurios políticos que lo están acompañando, como Roy Barreras y Armando Benedetti, los cuales han sido alimentados con la maquinaria y la politiquería tradicional de este país”, asevera el politólogo.

Gutiérrez señala, además, que entre los cinco participantes de la ‘Coalición de la Esperanza’ el que más posibilidades tiene de convertirse en el precandidato del Partido Verde para la primera vuelta de las próximas presidenciales, que deberá realizarse en mayo del 2022, es Fajardo.

Y agrega que, en últimas, lo que los ‘verdes’ quieren es evitar que este se enfrente en una consulta interpartidista con el líder de la Colombia Humana, que tendría más probabilidades de ganar.

“Claudia López, Angélica Lozano, Ángela María Robledo, Jorge Enrique Robledo y toda el ala que ha arropado a Fajardo dentro del Partido Verde saben que si llegan a ese escenario, Petro puede tener altas posibilidades de ganar. Él viene de sacar ocho millones de votos en la elección presidencial anterior y, además, ha tenido un escenario de activismo político de oposición mucho mayor en estos dos años largos que el que ha tenido Fajardo”, apunta director de Innopolítica.

De su lado, la analista política Bibiana Clavijo considera que “es normal” que en estos momentos hayan divisiones en el Partido Verde en torno a qué candidato apoyar en la carrera por la Casa de Nariño, teniendo en cuenta que la colectividad hoy en día es una unión de diferentes tendencias políticas.

“Entonces, que se den las deliberaciones para saber cómo se van a configurar electoralmente es un proceso normal dentro de las estructuras partidistas. Allí hay miembros del ‘petrismo’, verdes de origen. También tenemos los que vienen del ‘Compromiso Ciudadano’ (el movimiento creado por Fajardo). Todas esas fuerzas se está midiendo para saber cuál tiene mayor probabilidad de tener una aspiración presidencial”, concluye la politóloga.

Lo cierto es que mientras avanza esa medición a gran escala, otros nombres de la colectividad han saltado al ruedo con el objetivo de hacerse a la precandidatura oficial del Partido Verde (ver recuadro), lo que podría ahondar las divisiones en esa fuerza política.

Según la representante a la Cámara, Catalina Ortiz, a nivel regional también hay múltiples fuerzas que “coexisten” en el Partido Verde.
De un lado, asegura, hay una tendencia ‘ospinista’, liderada por el alcalde Jorge Iván Ospina y sus hermanos (Diego y Mauricio), que es más cercana a Gustavo Petro y que está “más abierta” a hacer alianzas con la política tradicional.

“Ellos (los Ospina) apoyaron a Petro en la segunda vuelta durante las pasadas elecciones presidenciales”, dice Ortiz.

De otro lado, señala están Andrés Felipe Ramírez (alcalde de Jamundí, Paola Arenas (diputada del Valle del Cauca) y Duvalier Sánchez (excandidato a la Gobernación), “que en algún momento hemos trabajado con Fajardo y tenemos una historia con él, que claramente, habrá que hacer respetar”.

Por su parte, el concejal de Cali Terry Hurtado asegura que hay otros militantes verdes pertenecientes al movimiento animalista que nos son “ni fajardistas ni petristas”, sino una “fuerza autónoma” dentro del partido.

“La mayoría de animalistas de Cali y el Valle que tenemos curul estamos apoyando la candidatura presidencial de Camilo Romero, con quien encontramos muchísimas afinidades en sus planteamientos, ya que tiene un origen activista”, manifiesta.

Asimismo, Hurtado señala que a nivel regional en el partido hay una discusión interna respecto a si se debe incluir a Petro en la consulta interpartidista que realizará la Alianza Verde el próximo año.
“Nosotros (los integrantes del movimiento animalista) pensamos que Petro sí debe estar en esa consulta”, subraya el cabildante.