Zona Diamante
El presunto homicida del teniente Dúver Orlando Daza Gil, jefe del esquema de seguridad de la Gobernadora del Valle, registraba antecedentes delincuenciales por hurto y porte ilegal de armas. Además, tenía una medida de detención domiciliaria vigente.
Explicado de otra manera, el hombre que le disparó a Daza el sábado pasado en un intento de hurto en el barrio Colseguros de Cali, y a quien las autoridades identificaron como Carlos Velasco, no tenía por qué haber estado en la calle delinquiendo, sino en su domicilio cumpliendo con su pena.
Ante esto, desde diferentes sectores se criticó la medida y se le pidió al Estado más atención a esta situación en Cali, ciudad en la que hay 4556 personas con casa por cárcel, según reveló este diario en un informe publicado el 22 de septiembre pasado.
Lea también: Asesinan en Cali al jefe del esquema de seguridad de la Gobernadora del Valle
El primero en reaccionar fue Pablo Uribe, subsecretario de la Política de Seguridad de Cali, quien afirmó que “el asesino del Jefe de seguridad de la Gobernadora es un criminal reincidente, con antecedentes criminales, pero el sistema judicial fue blando y le dio la casa por cárcel. Gracias a esta irresponsabilidad terminó asesinando a un inocente por robarlo. Esto no puede seguir así”.
“Mientras el sistema judicial siga tratando el atraco como un delito menor, mientras los criminales reincidentes no sean castigados con fuerza y mientras las cárceles de colombia estén colapsadas, los atracadores van a seguir haciendo de las suyas en nuestras ciudades”, añadió Uribe.
A su vez, el secretario de Seguridad de Cali, Andrés Villamizar, señaló que “de nada sirve los esfuerzos y recursos de la Policía, porque cuando capturan a los delincuentes, los jueces les otorgan medidas de casa por cárcel”.
Villamizar también dijo que esto tiene “preocupada y molesta a la Administración Municipal, pues cuando logramos demostrar que algunas personas cobijadas con detención domiciliaría están incumpliendo la medida, la justicia se niega a revocarles este beneficio”.
Y agregó que “el presunto asesino del teniente Dúver Daza estaba cobijado por casa por cárcel, pero se encontraba delinquiendo y acabó con la vida de un héroe de la patria”.
Ambos funcionarios, incluso, coincidieron en que “en Colombia se puede vencer a los atracadores, pero para eso se necesita una reforma institucional profunda desde la Nación con: cárcel inmediata y preventiva para reincidentes; tratamiento del hurto calificado como el delito grave que es y reforma radical al sistema carcelario”.
Por su parte, Juan David Castillo Sánchez, abogado especializado del Grupo Jurídico Lex, opinó que el tema de la medida de detención domiciliaria no es tanto culpa de los jueces que la otorgan, porque ellos estudian caso por caso y la ley permite estos procedimientos, además que el sistema está en un hacinamiento muy alto y que en este sentido la medida puede ser buena.
“El problema, creo yo, está en la ejecución, en la entidad que vigila que es el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec, que no está haciendo la labor que debería de hacer, como que los condenados cumplan la medida como es. El Estado también debería de invertir, por ejemplo, en más brazaletes electrónicos o un mejor sistema para vigilar las domiciliarias y que no sean un saludo a la bandera, como viene siendo actualmente”, argumentó el abogado.
Homicidio de Teniente fue por intentar hurtarle la motocicleta
Aunque en un principio no estaba claro si a Dúver Orlando Daza Gil lo habían asesinado por un intento de hurto o por algún problema relacionado con su trabajo, ayer se conoció un video en el que se evidencia que el Teniente intentó defenderse de dos hombres que lo abordaron en una motocicleta para intentar robarle la moto de su propiedad.
En las imágenes, que El País no publicó por solicitud de la familia del policía, se alcanza a observar que Daza se defiende con su arma y es en medio de un cruce de disparos donde él muere y uno de los hombres resulta herido.
Esa persona, la misma que se menciona párrafos arriba y que tenía medida de detención domiciliaria, fue llevada herida al HUV, y el martes pasado capturada, pues se logró dictaminar que la ojiva alojada en su cuerpo era del arma disparada por Daza en medio de su defensa.
El otro hombre que aparece en la escena es buscado por las autoridades.
El presunto homicida del teniente Daza es procesado por los delitos de homicidio, porte ilegal de armas y hurto. Al momento de la captura, según la Policía, no reconoció su participación en el hecho.
El hoy sindicado por el homicidio del teniente Daza había sido capturado en 2015 por hurto agravado y porte ilegal de armas de fuego, pero había sido beneficiado con prisión domiciliaria.
