En el mismo día, jueves 21 de agosto, narcoguerrilleros asesinos derribaron en Amalfi, Antioquia, un helicóptero adscrito a la Policía Nacional y mataron 13 integrantes. En Cali, frente a la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez, hicieron explotar un camión, con saldo de 7 personas fallecidas y 70 heridos, muchos de ellos de gravedad.
¿Cómo fue la reacción ciudadana en cada caso? Los antioqueños se unieron para condenar el atentado acusando al presidente Petro por la forma desastrosa en la que está manejando la seguridad nacional: Redujo sustancialmente el presupuesto de las Fuerzas Armadas; los gestores de paz son hoy muchos de los victimarios que fueron apresados y condenados por crímenes escabrosos; los diálogos de paz han sido el bálsamo que la delincuencia necesitaba para fortalecerse; puso en su momento como ministro de defensa a un enemigo de la institucionalidad castrense que llevará el deshonor como el peor ministro de la historia en este cargo. La actitud presidencial, en fondo y forma, ha tenido el propósito de desmoralizar a los uniformados. Los antioqueños, con este panorama, han rodeado a sus gobernantes locales y le han pasado factura al Gobierno central.
En cambio, en Cali, a raíz del horroroso atentado del barrio La Base, han sido múltiples las voces que pretenden trasladarle la culpa al alcalde Eder. Le reclaman que este debería tener permanentemente una posición más guerrera, y si no la predica, le señalan de ‘mamerto’ o de blando. Se olvidan estos críticos que Antioquia y el Valle son muy diferentes. La homogeneidad paisa les ha permitido consolidar una posición más férrea y unificada.
El Valle del Cauca, siempre incluyente y receptor de múltiples migraciones que llegan desplazadas y carentes de recursos, acarrea un componente social y político muy diferente al antioqueño. Por eso la votación de izquierda es más alta en la zona Pacífico; por tal razón Francia Márquez fue fórmula vicepresidencial para atraer dicha votación; por eso acá fue más fácil que fuerzas oscuras financiaran el estallido social y los bloqueos.
Pero por eso mismo, existe Propacífico, Compromiso Valle, Corazón de Caña y toda la infraestructura fundacional de la región. Entonces, los gobiernos del Valle y de Cali han ameritado más inteligencia y prudencia en sus declaraciones sin sacrificar las estrategias que buscan recuperar la seguridad en un entorno con narcotráfico, minería ilegal y voracidad indígena.
No le demos gusto al terrorismo que quiere precisamente que nos dividamos y que desconfiemos de nuestras autoridades. Apoyemos a Eder y a Dilian en sus esfuerzos por implementar medidas que restablezcan la seguridad y el progreso.
***
Otrosí: Esperanzadora la transformación del Deportivo Cali a Sociedad Anónima. Que buena junta. Felicitaciones. La región requiere de buenas noticias y el deporte ayudará al espíritu colectivo.
Otro sí 2: La sociedad Americana de Floristas SAF, otorgó en Phoenix, Arizona, el máximo honor de la industria floral internacional al vallecaucano Augusto Solano Mejía, presidente de Asocolflores, por su trascendental aporte a esta agroindustria en el planeta. Cuánto nos alegra este reconocimiento, pues Augusto ha hecho un destacado recorrido empresarial y gremial gracias a su inteligencia, caballerosidad y visión estratégica.
Otros sí 3: También muy buena la noticia de la recuperación de mi amigo y colega Jorge Restrepo Potes, después de una cirugía en el cráneo. Tenemos visiones muy diferentes de la política y del manejo del Estado, sobre todo en este gobierno, lo cual no ha afectado nuestra amistad. Confiamos en que el neurocirujano haya hecho muy buen trabajo para tenerlo muchos años con nosotros. ¡El primer logro es que Jorge está trabajando mejor su lado derecho!