Durante las últimas horas, la Procuraduría General de la Nación adelantó dos visitas a la Imprenta Nacional, como a la Cancillería, con el ánimo de indagar las condiciones para la fabricación de pasaportes.
Esto luego de la larga novela entre la empresa que estaba encargada de producir el documento, Thomas Greg and Sons, y el gobierno de Gustavo Petro, quien se ha enfrascado en quitarle el contrato a la compañía que lo lleva haciendo durante casi 17 años.
Para esto, la Procuraduría Delegada para la Función Pública, en cabeza del procurador Marcio Melgosa realizó la visita y dio una fuerte advertencia al ver la infraestructura con la que cuenta la Imprenta Nacional, entidad que asumiría esta tarea, de la mano de la Casa de la Moneda del Estado de Portugal.
Tras las visitas, el procurador encargado estableció que, efectivamente, la Imprenta Nacional no tiene la infraestructura, ni la logística para adelantar la producción en masa de los documentos.
“Aunado a lo anterior, la entidad que debe prestar el servicio bajo el nuevo esquema adoptado por el Gobierno nacional es la Imprenta Nacional de Colombia, empresa que según se informó en el marco de la vigilancia preventiva, carece de las capacidades e infraestructura física y de personal para prestar el servicio de suministro de pasaportes actualmente“, señaló la entidad.
Melgosa aseguró que la imprenta no cuenta con la maquinaria o el personal capacitado para realizar las libretas que cuenten con todos los requisitos de seguridad.
“Hoy no tiene la posibilidad de elaborar las libretas de pasaportes. Se lo digo porque eso es lo que se nos respondió en la visita. Ellos están a la espera de que se suscriba el instrumento que les permita a ellos comenzar a prepararse para elaborar los pasaportes”, señaló el funcionario.
Además, señaló que este es un proceso que debe tener un buen empalme y no se debe apurar, ya que podría entorpecer la calidad de los documentos.
“Esto no es de un día para otro. El documento establece claramente que este proceso tiene que cumplir con unos tiempos y estándares internacionales”, señaló Marcio Melgosa.
Uno de los descubrimientos más alarmantes del reporte de la Procuraduría es que aún no se ha firmado el contrato interinstitucional entre la Cancillería y la Imprenta Nacional, pese a que el actual convenio se vence en dos meses.
“Hasta nuestro conocimiento, no ha sido suscrito”, declaró Melgosa a Blu Radio.