Una situación poco común se presentó en una patrulla de la Policía de La Elvira, corregimiento de Cali, cuando, en el asiento de atrás, nació la pequeña Soe, en medio de una rápida reacción de las autoridades para trasladar a su madre a un centro asistencial para que pudiera ser atendida durante el parto.

Los hechos iniciaron cuando el padre llegó a la Subestación La Elvira en busca de ayuda, indicando que su compañera sentimental se encontraba en trabajo de parto y requería ayuda para ser atendida.

Uno de los policías aguardó a que las enfermeras atendieran a la bebé para cargarla. | Foto: El País

Ante la emergencia, la Policía de manera inmediata le brindó los medios necesarios para su traslado al centro médico más cercano usando una de las patrullas de la estación.

Cuando arrancaron, las Unidades del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes de los sectores de Terrón Colorado y Siloé, avanzaron simultáneamente en sus jurisdicciones para garantizar la movilidad del vehículo en el que la familia estaba siendo transportada.

Una bebé nació en una patrulla de policía en La Elvira, corregimiento de Cali. | Foto: El País

Sin embargo, la bebé no esperó a llegar al centro médico donde sería atendida junto a su madre, pues 15 minutos después de haber iniciado el desplazamiento, un leve llanto se escuchó en la parte de atrás de la patrulla, calmando un poco la tensión y los nervios de la situación.

El intendente jefe Carlos Jaramillo Poveda fue quien los acompañó en ese momento y poco después, la familia completa llegó sana y salva al centro médico donde profesionales de la salud esperaban su llegada.

Personal médico aguardaba para recibir a la bebé recien nacida y a la mamá. | Foto: El País

“En sus 24 años de carrera institucional, es la primera vez que el Intendente Jefe se enfrenta a una situación como esta, demostrando el humanismo y el profesionalismo que caracterizan a los hombres y mujeres policías de Colombia”, indica el comunicado de las autoridades.

Mientras madre e hija eran atendidas, los policías que acompañaron el trayecto esperaron para ver a la bebé y cuando fue limpiada, pesada y vestida por las enfermeras, algunos uniformados pudieron cargarla para darle la bienvenida al mundo.