"La cuarta revolución es una realidad y la tenemos encima": Acrip

La cuarta revolución industrial es una realidad. La tenemos encima y no es una elección de las organizaciones. Sin duda alguna vendrán grandes revolcones y el efecto se sentirá en la mano de obra”.

“La industria 4.0, que se caracteriza por una fusión de tecnologías, hará desaparecer algunos oficios, pero también le dará paso a nuevos empleos”.

Las afirmaciones son del presidente de la Federación Colombiana de Gestión Humana, Acrip, Juan Carlos Ramírez, quien agregó que las personas siempre van a estar en la mitad porque son las que piensan, diseñan y construyen.

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Ayer, durante la clausura del Congreso Nacional de Gestión Humana en su versión número 21 que se realizó en Cali, expresó que “los empresarios deben asumir con capacidad y liderazgo la revolución industrial para que las empresas puedan ser competitivas y alcancen el éxito en los mercados, que día a día son más avasalladores”.

Pero definitivamente lo más importante es el ser humano. “Seguramente tendremos grandes revolcones. Desaparecerán algunos oficios y aparecerán nuevos, pero siempre estará el ser humano en la mitad de este gran ejercicio”, reiteró.

Por su parte, Eduardo Acosta Castillo, uno de los invitados al certamen, sorprendió a los asistentes con la teoría de que la transformación digital no solo se resuelve con tecnología. “Muchas veces la solución está en el ser humano. Por supuesto que existen grandes desafíos, pero es él y los equipos de trabajo que ponen en marcha las soluciones”.

El impacto de las máquinas

Andrés Ricardo Arias del Centro Nacional de Revolución Industrial, indicó que los robots han venido a desplazar a los trabajadores y mostró algunas estadísticas: en el año 2018 la fuerza de trabajo fue 71% humana, frente al 29% de las máquinas, en cualquier denominación: robótica o industrial.

Sin embargo, el panorama cambiará en los próximos cuatro años. Se prevé, según los estudios de expertos en el mundo, que en el año 2022 esos porcentajes variarán sustancialmente. El 58% de mano de obra provendrá del recurso humano, en tanto que el 42% de las máquinas.

Pero tres años más tarde, en el 2025, se proyecta que el 48% será de personas realizando las labores y el 52% provendrá de la utilización de recursos tecnológicos de cualquier índole para ejecutar tareas.

Para el experto, no es un secreto que las máquinas han ido ocupando mayores espacios, pero la presencia del ser humano será necesaria porque es él quien organiza, diseña, piensa y señala las funciones a ejecutar.

En esa ecuación, las máquinas y los equipos son y serán los que ejecutarán la operación.

Entre todos, seres humanos y tecnología, deberán complementarse para darle el éxito a las organizaciones en tres grandes aspectos: la mejoría de la producción, la reducción de costos y la prevención de riesgos.

¿Retirar personal?

• Esa es una de las primeras alternativas de solución que se plantean en muchas organizaciones cuando los equipos y la tecnología toma asiento.
• Eduardo Acosta Castillo, líder del sector tecnológico industrial, expresó que no necesariamente la tecnología debe prescindir de la mano de obra.
• “A mi juicio se debe modificar la forma de trabajo de las personas dentro de la organización con una nueva visión empresarial”, indicó.