El último año de Ospina
Llega un nuevo año, pero los problemas de Cali son los mismos, y vuelven a ser los retos que enfrenta la Administración. Cali necesita recuperar unos propósitos sobre los cuales la mayoría estén de acuerdo y trabajen para lograr una mejor convivencia.
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1 de ene de 2023, 11:55 p. m.
Actualizado el 17 de may de 2023, 05:40 a. m.
Hoy inicia el cuarto año de mandato del alcalde Jorge Iván Ospina, cuyo nivel de aceptación está entre los más bajos del país, el 77% desaprueba su gestión y solo el 19% lo aprueba. Cambiar este panorama y sobre todo la gestión seguramente no será fácil porque los resultados no lo han acompañado.
En el 2022 el Mandatario de los caleños se empeñó en sacar adelante los proyectos que hicieron parte de su campaña y que no se habían consolidado, en parte por la pandemia y el paro nacional. Se trata de los proyectos que denominó como movilizadores: Parque Pacífico, Cristo Rey, Parque Tecnológico, Ecoparque de Pance y Bulevar Oriente, los que demandan una importante inversión cercana a los $350.000 millones.
Sin embargo, ninguno de ellos vio la luz en el año que concluyó y, por el contrario, son objeto de críticas por la falta de socialización y porque muchos consideran que, aunque son proyectos necesarios para Cali, no son prioridad ni lo que los caleños están pidiendo en este momento.
Junto a esto hay en marcha otros contratos como el de la malla vial o el de semaforización inteligente, los cuales tampoco han llegado a feliz término. De esta manera, las grandes apuestas que tenía para la ciudad apenas están en marcha.
Mientras tanto, buena parte de los caleños siente que no se ha puesto atención a lo que realmente requiere la ciudad y es donde Ospina pierde el año. El 80% de los habitantes de Cali se siente inseguro, incluso, en su barrio, según la encuesta del programa Cali Cómo Vamos; los hurtos han crecido 20%; el sistema de transporte masivo ahonda su crisis por la falta de pasajeros y en las calles reina la intolerancia, esto sin contar la necesidad de que mejore la calidad educativa.
Llega un nuevo año, pero los problemas de Cali son los mismos, y vuelven a ser los retos que enfrenta la Administración. Cali necesita recuperar unos propósitos sobre los cuales la mayoría estén de acuerdo y trabajen para lograr una mejor convivencia. Esto pasa por impulsar la cultura ciudadana, el respeto a las normas y a los derechos de cada una de las personas.
Pero eso tiene que estar acompañado por una mejor movilidad, un servicio de transporte eficiente lo que incluye sacar de la crisis al MÍO, mejores oportunidades laborales y educativas, una ciudad que a la vista sea bonita, limpia y retorne el orgullo de muchos. No una ciudad de huecos, basuras, andenes rotos, violencia y corrupción, donde reina la intolerancia. Nadie quiere eso.
La Administración tiene un último año para intentar cambiar el panorama de la ciudad y brindar un poco de esperanza. El reto es muy grande, para ello el Alcalde cuenta con los recursos y lo que se necesita es que se inviertan bien. El 80 % de los $650.000 millones del crédito que se le aprobó a la Administración para dinamizar la economía aún no se han ejecutado. Mientras tanto, la ciudad demanda inversiones en los barrios, en los jóvenes, en la movilidad, en salud, en el espacio público, y en todo lo que ayuda a tener una mejor calidad de vida.
El 2023 es la oportunidad final para que el gobierno de Jorge Iván Ospina realice, con transparencia y eficiencia, las transformaciones que reclaman los caleños.
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