La deuda del Cali

En otro año convulsionado para el Deportivo Cali, casi todas las partes que conforman al club han dado todo para salir de la crisis: en lo administrativo se ha hecho un gran esfuerzo para lograr la llegada del grupo inversor IDC, mientras que los hinchas siguen metiéndose la mano al bolsillo para llenar las gradas de Palmaseca de manera sagrada. Bajo ese contexto, la gran deuda que hoy aqueja a la institución corre por cuenta de los jugadores, que con su pobre nivel tienen al equipo por fuera de los cuadrangulares.

Es increíble ver cómo hoy, cuando solo faltan 4 fechas para que termine la fase regular del campeonato, el Cali se encuentra en la posición 12, por debajo de equipos con nóminas muy modestas como Fortaleza (la revelación del torneo), Llaneros, Águilas y Alianza. Desde arriba se hizo un esfuerzo grande por contar con un técnico ganador como Alberto Gamero, pero en la cancha, que es donde todo se decide, los jugadores son los que han fallado, sobre todo en casa.

Resulta increíble ver cómo una de las hinchadas con mejor promedio de asistencia en Colombia en el 2025 (16.000 espectadores por juego) tiene que devolverse casi siempre a casa con la tristeza de un empate o una derrota. En lo que va del año, el Cali ha disputado 18 juegos como local, con un registro de 7 victorias, 6 empates y 5 derrotas. Esto deja un pobrísimo balance de 27 puntos logrados de 54.

Si solo analizamos lo que va del segundo semestre, el tema empeora. De 8 juegos disputados en casa con muy buenas asistencias, el equipo ha perdido 4, recibiendo además una abultada cantidad de goles por parte de sus rivales: Medellín y Llaneros le marcaron 3, mientras que Junior y América 2.

Con resultados como estos en casa es muy difícil que un equipo pueda clasificarse a la fase final de la Liga y disputar, al menos, el cupo a un torneo internacional. Por eso mismo, desde ahora, el club y el propio Gamero deben pensar muy bien en cómo confeccionar el equipo de la próxima temporada, pensando en resarcir esa relación ‘futbolistas – hinchada’ que no ha sido recíproca.

Dentro de lo que ha sido este 2025 son muy pocos los jugadores que se salvan, mientras que hay otros que no se entiende cómo se han mantenido en la institución si su nivel ha sido deficiente, como en el caso de los veteranos Javier Reina y Fabián Castillo, quienes llevan dos años en club y ha sido muy poco lo que han aportado.

Lo único que le queda al equipo es afrontar estos 4 partidos que quedan con dignidad, apuntándole a, al menos, hacer los 6 puntos que quedan en casa para saldar un poco la deuda que se tiene con una hinchada que ha sido maltratada por sus propios jugadores.