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Francia 2.0 full HD

Los que se ríen o se indignan mientras leen estas líneas se acordarán de mí.

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Bernardo Peña Olaya.
Bernardo Peña Olaya. | Foto: El País.

19 de ago de 2025, 12:32 a. m.

Actualizado el 19 de ago de 2025, 12:34 a. m.

Ha sido coherente porque no ha renunciado a la responsabilidad, así su jefe no la quiera, así le hayan entregado un ‘cañengo’ de ministerio, así le hayan cobrado su extracción campesina, negra y hasta su acento marcado del Pacífico. Francia admite que no vive sabroso y que no sabía en qué se metía cuando pese a las burlas de sus coterráneos y la oposición de su mamá se lanzó a la Presidencia.

Le dijo al programa Los Informantes que no ve el día en que entregue el cargo y que quiere irse un tiempo del país. En medio de tanta indignidad del alto gobierno es la única persona que ha conservado la suya y que ha puesto la cara, regresará con su millón de votos a una nueva aventura electoral convertida en una especie de Lula da Silva caucana. Los que se ríen o se indignan mientras leen estas líneas se acordarán de mí.

La única persona coherente del gobierno Petro resultó ser Francia Márquez. Menospreciada, usada (ella y su millón de votantes), engañada y desechada enfrentó el ego presidencial frente a millones de televidentes para reclamarle y decirle incumplido, decirle que estamos peor ahora que hace 3 años y 12 días.

Sí, es verdad: ella participó de este desastre desde el primer día del actual mandato. Llegó gritando vivas a la primera línea, en helicóptero, acusando a los “ricos y privilegiados”, arrogante, creyendo que señalando los problemas estos se irían solucionando, ya que el pueblo tendría el poder, ingenua, muy ingenua.

A regañadientes, Petro tuvo que nombrarla como fórmula vicepresidencial para aprovechar su imagen y el millón de votos que obtuvo en la primera vuelta. Elegido cumplió su promesa de “compartir” poder y le asignó una oficina sin presupuesto, sin equipo y sin nada diferente a un cargo de papel llamado Ministerio de la Igualdad y la Equidad, una entidad inútil que será eliminada el 7 de agosto de 2026. Francia quedó como un mueble que estorba y nadie sabe dónde poner.

Vive en Cali, rodeada de un fuerte esquema de seguridad que protege y controla cada movimiento, pero no lo que dice. Alejada del gobierno sirve para actos simbólicos y acompañar, con una distancia incómoda, al Primer Mandatario en desfiles conmemorativos, sirve para salir en las fotos pero no para tomar decisiones. Nada diferente a los anteriores vicepresidentes con una diferencia: Francia conserva sus votos, ha sido la única del pacto histórico que vio venir la tragicomedia y será de las pocas del Pacto que le podrá decir al presidente “se le dijo, se le advirtió”. Que nadie la escuchó es otra cosa, “ese ya no es mi problema” diría ella, es un problema para 54 millones de colombianos.

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