Así fue el golpe al frente Carlos Patiño de las Farc, el que habría generado el ataque contra la Base Aérea en Cali

El presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, reconoció que una de las causas del demencial ataque con explosivos contra la base aérea Marco Fidel Suárez en la ciudad de Cali, y donde seis personas perdieron la vida y más de 50 resultaron heridas, es el contundente golpe militar que sufrió el frente Carlos Patiño de las disidencias de las Farc.

“Son muchas las causas de este hecho, una de ellas es el contundente golpe que se le propinó a la disidencia Carlos Patiño, nuestra fuerza pública llegó hasta la vereda Honduras del corregimiento de Huisitó para desmantelar el centro de operaciones de este grupo armado al margen de la ley, llegamos al corazón de este grupo delincuencial para incautar más de 280.000 proyectiles para fusil, explosivos, drones y desmantelar su centro de operaciones y la respuesta de esta organización delincuencial es este ataque o masacre contra la población civil”, agrego el mandatario de los colombianos.

De ahí que hay que tener presente que este resultado operativo se dio el pasado martes 19 agosto cuando más de trescientos militares y policías llegaron a esta zona de la zona rural de El Tambo para enfrentarse abiertamente contra los integrantes de esta disidencia de las Farc, luego ejecutar cinco órdenes de registro y allanamiento en igual número de viviendas que previamente fueron identificadas como “centro de operaciones” de los alzados en arma en este punto rural, uno de los accesos al denominado Cañón del Micay.

Se trata de un hotel, la vivienda de una comerciante, un predio o finca conocida como Los Cocos y dos rudimentarias residencias que eran en realidad unos “armerillos”, donde los alzados en armas fabricaban minas antipersonales, morteros o tatucos y granadas para drones, como bien comprobaron los soldados y policías que lograron ingresar a esos lugares tras llegar en varios helicópteros tras partir de Popayán en la madrugada de ese martes 19 de agosto.

“Estos eran los lugares usados por alias Giovanny y estos terroristas para abastecerse de armas, explosivos, incluso, para almacenar los cargamentos de cocaína que son elaborados en esta parte del Cañón del Micay para después ser despachado hacia el exterior por los ríos de la zona y que los une con el océano Pacífico, además desde este punto rural, los terroristas del frente Carlos Patiño ejercen su violencia hacia los municipios de Argelia, El Patía y Balboa”, explicaron integrantes del Ejército que ahora participan en esta intervención militar, bautizada como Operación Perseo II.

Por eso, y tras varios meses de seguimientos satelitales y labores de inteligencia liderados por la Fuerza Área Colombiana, los integrantes del Ejército y de la Policía llegaron directamente a esas cinco casas, residencias y establecimientos comerciales que eran estratégicos para esta este frente disidente, el cual empezó a controlar el Cañón del Micay desde el 2019 y 2020 cuando expulsó de la zona a los integrantes del frente José María Becerra del Ejército de Liberación Nacional, ELN.

“Estos sitios se ubicaron los mayores depósitos logísticos, de explosivos, material de guerra, sitio de acopio y distribución de sustancias estupefacientes, a través del río Micay, con destino a Centro y Norte América. En el procedimiento fueron incautadas seis armas de fuego tipo fusil, 3.034 cartuchos de diferentes calibres, 1.000 eslabones, 181 granadas de fragmentación, 400 detonadores, 22 minas antipersonales, 78 Artefactos Explosivos Improvisados tipo mortero acondicionados para dron, un Dron, un detector de metales, 27 plataformas de lanzamiento, 40 kilos de pólvora, 20 uniforme pixelados, 31 proveedores, 450 metros de cordón detonante, entre otros elementos de

intendencia y material de guerra que pertenecían a este grupo terrorista”, informaron por su parte los integrantes del área de inteligencia del Ejército, quienes van coordinando a las tropas que ahora se enfrentan a los disidentes en esta parte del El Tambo.

A raíz de este resultado operativo se activaron inmediatamente las alertas de seguridad en todo el suroccidente Colombiano, especialmente en los municipios del Cauca por la inminente retaliación, más cuando también se han registrado la captura de otros señalados cabecillas de esta organización armada al margen de la ley. En Popayán, por ejemplo, permanece fuertemente custodiadas la alcaldía, la gobernación y todas las unidades policiales, las cuales son acordonadas en las horas de la noche y las madrugadas para evitar ser atacadas con explosivos, acondicionados con explosivos.