Jairo Pinilla recibió el premio Macondo a Toda una vida

De un modo infame, algunos lo han llamado el ‘Ed Wood’ colombiano, comparándolo al cineasta estadounidense que algunos críticos consideran “el peor director de toda la historia del cine”.

En un intento por un símil más justo, habría que llamarlo el Méliès colombiano: Jairo Pinilla es el cineasta más prolífico de este país, con más de 50 obras entre largometrajes, cortometrajes y documentales, y también, es el padre de los efectos especiales y del cine de suspenso colombiano.

Salvo que, de algún modo, es un padre negado. Pinilla hizo películas como ‘Funeral Siniestro’, ‘Área Maldita’ o ‘Triángulo de oro’ que en los años 80 compitieron en los cines colombianos con los filmes extranjeros y resultaron siendo las más taquilleras de la época. Los críticos consideraban sus obras como una especie de cine intrascendente de principiante, pero las salas reventaban de público. En los 90 la falta de apoyo estatal y un problema con Focine lo relegó al olvido y al reconocimiento de solo algunos círculos especializados.

Anoche, como pago de un fragmento de la deuda que este país tiene con él, recibió el premio Macondo de la Academia de Cine Colombiano a ‘Toda una vida’ dedicada al séptimo arte.

La primera película que vi y me impresionó fue ‘El ladrón de Bagdad’, en Bogotá. Cuando se terminó, yo corrí hacia la pantalla para ver cómo era que eso sucedía y desde ahí seguí viendo cine y preguntándome cómo era posible que eso sucediera. Luego entré a estudiar Ingeniería Electrónica, me gradué y accedí a una beca para estudiar en México y allí llegué a los estudios Churubusco, en donde me encontré con todos los actores que yo había visto en los cines en Colombia: Javier Solis, Cantinflas, Pedro Infante. No lo podía creer... Allí vi cómo se hacían las películas y cuando regreso a Colombia, a mediados de los 70, llego dispuesto a hacer cine.

Llega a Bogotá y cómo comienza...
​
Yo encontré un grupo de amigos con ganas de hacer cine y entonces nos pusimos a hacer una película argumental, que se llamaba ‘Mago’. Un amigo tenía una cámara, y el resto actuábamos. Nos fuimos para el Parque Nacional y contamos la historia de unos amigos que se iban de paseo y se encontraban un mago, que era una especie de antihéroe, un mago al que no le salían sus trucos. Pero eso era cine mudo y nunca se proyectó. Fue gracias a que se abrió el negocio de presentar cortos colombianos antes de las películas mexicanas, que decidimos hacer un corto con el mismo argumento, y allí salió ‘Qué mago’, el primer cortometraje que hice y que le fue muy bien con el público.

¿Cómo es la historia del primer largometraje que hace, ‘Funeral Siniestro’?
​
Yo escribí el guión y anduve como cuatro años buscando financiación. Nadie quería darme dinero para hacerla hasta que un amigo que era camionero decidió invertirle. Lo hice con actores naturales, yo incluso actué, y resultó siendo un gran éxito en taquilla.

A sus películas les fue muy bien en taquilla, ¿por qué en los 90 caen en el olvido?
​
A los críticos no les gustaba mi cine, porque además yo era un empírico y no me relacionaba con Focine. Mis películas las produje yo mismo. Entonces hubo una reacción de los críticos contra mí y luego tuve un problema con Focine. Yo estaba haciendo mi película ‘Triángulo de oro’, que costó alrededor de $300 millones y que era la primera película doblada al inglés.

Focine me prestó $10 millones y yo me demoré con los pagos. Así que un día Focine llegó y me quitó todas mis películas, mis equipos, los afiches, todo, para saldar la deuda. Fue luego con María Emma Mejía, que estuvo en la dirección de Focine, que se me devolvió esa película y yo mismo me encargué de distribuirla. Y le fue muy bien en taquilla, pero ese dinero fue para pagarle a mi amigo el que había invertido en la producción.

¿Dónde están ahora?
No sé, se supone que las debe tener el Patrimonio Fílmico.

Usted sigue haciendo cine...
​
Sí, ahora estoy terminando la primera película en 4D colombiana, que se llamará ‘El espíritu de la muerte’. El cine es mi vida. Yo lo hago no con las uñas, sino sin uñas, pero lo hago, y es lo que voy a hacer hasta que me muera.

Mejor Película de Ficción: Pariente.

.Mejor Dirección: Iván D, Gaona por ‘Pariente’.

Mejor Película Documental: Noche herida – Medio de contención Producciones.

Mejor Actriz Principal: Luisa Vides - Oscuro Animal.

Mejor Actor Principal: Bernardo Garnica - X500.

Mejor Guion:Iván D. Gaona – Pariente.

Mejor Dirección de Fotografía
Juan Camilo Paredes – Pariente.

Mejor Cortometraje: 7ún3l de Klych López.