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Cuando el río Cauca sube, el canal CVC y otros canales y quebradas que van hacia el río no encuentran flujo libre de descarga y por ello, el sistema hidráulico desde río Cauca hacia el occidente de la ciudad empieza a represarse y se desborda. | Foto: Foto: José Luis Guzmán - El País

EMCALI

Las tareas pendientes para que Cali no colapse por las lluvias

Liberar las áreas protectoras de quebradas invadidas, entre las medidas urgentes. Piden más consciencia del cuidado de cuencas.

4 de abril de 2021 Por: Redacción de El País

Para nadie es un secreto que Cali es una ciudad que tiene una gran riqueza hídrica, pero también tiene un alto riesgo de inundación en temporada de lluvias, especialmente en zonas como el Distrito de Aguablanca, el sector de Petecuy, Paso del Comercio, Gaitán, en las comunas 1, 18 y 20, las quebradas la Cristalina y Guarrús, entre otras, que son las que causan mayores afectaciones.

Incluso, así se evidencia cada año cuando se presentan las anegaciones, lo cual ocurre por varias razones, que según explica Joaquín Collazos, gerente de Acueducto y Alcantarillado de Emcali, “son antiguas, hace muchos años la parte baja de Cali eran lagunas, todo el agua que cae de la cordillera de los Farallones deslizaba y llegaba a la ciudad, hasta cerca al río Cauca y había muchas lagunas; con los años, en el desarrollo de la ciudad hemos estado haciendo una cantidad de construcciones que están dentro del sector que debemos haber protegido que es la montaña, entonces al haber muchas construcciones cuando llueve, el agua viene, no alcanza a contenerse y llega con mucha furia a la ciudad y es lo que está pasando, se inunda”.

Y a esto se le suma la falta de cultura ciudadana porque “las personas desechan escombros, todo tipo de basuras las van tirando a los canales de aguas lluvias y cuando llegan las crecientes se llevan todos esos residuos que hacen que en ciertos sitios se acumulen y ahí el agua se sale. Por ejemplo, en la Carrera 50 con Calle 16 se acumulan las basuras porque el desvío que hay hacia el río Meléndez es estrecho y se represa”, agrega Collazos.

Incluso, el funcionario de Emcali anota que en las plantas de bombeo cuando llegan las aguas con toda la basura se recoge a diario entre 4 y 5 toneladas de residuos.

Es por esto que los expertos señalan que se debe desde ya pensar en alternativas que puedan mitigar las inundaciones de la ciudad, sin embargo, observan que “el interés por estos temas surge cada vez que tenemos una época de lluvias fuerte (...) Lo que se tiene que empezar a hacer es una proyección a largo plazo, planteando que dentro del cambio climático es muy posible que empecemos a tener este tipo de lluvias con cierta periodicidad, y el aumento urbanístico de la ciudad sin un control va a ser que cada vez más tengamos problemas en las laderas y en zonas donde estas aguas no están siendo contenidas”.

También, especialistas dicen que se necesita realizar proyectos de contención para evitar desplazamiento de masas, canales para recoger escorrentías de aguas lluvias y canalizarlos hacia una correcta disposición de las aguas lluvias, entamboramiento de algunos sistemas de reducción de agua, o incluso tanques de compensación.

No obstante, el presidente de Acodal, Hugo Salazar, sostiene que “no hay capacidad ni metiendo tubería ni canales capaces de almacenar el agua que baja de la montaña y aún más una montaña que está alterada con urbanizaciones legales e ilegales, y si encima hay una falta de cultura ciudadana que le tiran muebles, llantas, peor porque Cali es muy plana”.

Es por eso importante que la ciudadanía coopere y que todos los sistemas de drenaje de Cali estén totalmente libres de residuos sólidos, solo así se puede mitigar riesgos de inundación, precisa John Alexander Posso, subdirector de Calidad Ambiental del Dagma.

Y recalca: “si se sigue arrojando todo tipo de residuos estos sistemas van a colapsar, no solo se van a deteriorar, sino que en un momento pico de lluvia no vamos a tener capacidad de respuesta de dicha infraestructura”.

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Fortalecer lagunas del Pondaje y Charco Azul

Aunque se han hecho trabajos de recuperación hidráulica de la Laguna del Pondaje y Charco Azul de remoción de piedras que por mucho tiempo se han sedimentado en esas zonas y por ende han disminuido la capacidad de recoger agua para hacer una regulación del caudal antes de ser entregado al canal oriental de Cali y posteriormente al río Cauca, aún se necesita obras para fortalecer y mejorar las lagunas.

Según el l ingeniero Hugo Salazar, de Acodal, las lagunas tenían una capacidad de hasta 630.000 metros cúbicos de almacenamiento de agua, gracias a estas no se inundan muchas zonas de Aguablanca, de ahí la importancia de fortalecerlas, pues “son fundamentales para aguantar aguas de escorrentías”.

De hecho, Leonardo Herrera, director del programa de Biología de la Universidad Icesi, menciona que estas lagunas son tal vez los humedales más importantes que tiene Cali, el reto está en establecer políticas claras para qué se van a usar.

“Se ha tratado de recuperar, pero se requiere mucha inversión, ingeniería verde -infraestructura verde urbana-, tiene que mantenerse con un control continuo de sedimentos, tiene que ser zonas que permitan de nuevo, mantener su servicio ecosistémicos naturales, y ser captadores de las aguas de lluvias”.

Recuperar el manejo hídrico de cuencas

La mayor prioridad de la ciudad es recuperar el manejo hídrico de las cuencas de los ríos, especialmente en la ladera que ha sido invadida en las áreas forestales protectoras de las quebradas, pues según explican los expertos, al sustituir la capa vegetal de esas zonas por viviendas informales ha perdido la capacidad de regulación de cuencas, por lo tanto el suelo absorbe menos agua y entonces baja o corre a gran velocidad el agua cuando llueve.

Es por esto que el director de Planeación de Cali dice que es necesario someter dichas áreas a un tratamiento integral del hábitat, “vamos a adelantar trabajos que nos permita identificar cuáles son las viviendas que habría que reasentar, ofrecerle una solución en su mismo territorio para no afectar el arraigo de las comunidades, y a medidas que se van liberando los cauces de las quebradas va recuperando la capacidad regulatoria de las cuencas”.

Un proyecto que anota, “es costoso, habrá que buscar fuentes de financiación con el Gobierno”.

En este sentido, el gerente de Emcali, Juan Diego Flórez, considera que se debe empezar a trabajar en una solución integral a largo plazo, “ya debe empezar a hablar de un proyecto de reubicación de la Ladera por alto riesgo, así como el Plan Jarillón”.

Esto se necesita para descongestionar la ladera y así permitir que por los lugares donde se requiera encauzar o proteger quebradas, acequias, escorrentías, “podamos aplicar la ingeniería a través de entamborar las cañadas o darles una regulación de su cauce o incluso tener la posibilidad de tener un embalsamiento de algunas de esas aguas para quitarles fuerza y poderlas manejar con mayor nivel de seguridad”, precisa Flórez.

Modificaciones urbanísticas

Para algunos expertos, en la ciudad se tienen que hacer otro tipo de urbanismos, “no se puede seguir construyendo así como vamos porque las consecuencias posteriores van a ser muy desagradables, toda la ladera occidental tiene terrenos muy frágiles”, indica el ingeniero Hugo Salazar.

Y agrega: “El POT se ha manejado con intereses particulares y políticos, no con intereses técnicos, y ahí es donde los ciudadanos e instituciones como Acodal, indicamos que tienen que hacerse otro tipo de manejos de ciudad”.

No obstante, el director de Planeación de Cali, subraya que la ciudad tiene en el Plan de Ordenamiento Territorial, POT, con buenos estudios e información sobre amenazas y riesgos, pero “el problema es de implementación en la medida que no tenemos una oferta de vivienda suficiente para la población informal y construye donde puede, no hace caso a las normas urbanísticas”.

Asimismo, dice que se debe abrir el debate para estudiar si se debería ampliar las áreas de protección ambiental e incluir nuevas obras de regulación.

Crear lagunas de contención

Tener lagos de retención es una de las propuestas en las que más reiteran los ingenieros sanitarios, pues dicen que con el crecimiento de las ciudades se coparon todos los espacios, es por ello que se debe “tratar de buscar sitios donde haya parques formales o crear parques y dentro formar los lagos de retención, y los van vaciando en la quebrada o en los ríos más cercanos que pueda durante las 24 horas siguientes a un evento”, anota Hugo Salazar, presidente de la Asociación Colombiana de Ingeniería Sanitaria, Acodal, seccional Valle.

El profesional indica que esta es una verdadera alternativa, pues “ayudarían mucho a mitigar las inundaciones porque los lagos siempre se deben hacer dos simultáneos, uno inicial que recoja toda la carga de arena, materiales flotantes, palos; y el segundo lago que ya tiene decantado esa situación, es más lúdico, tiene una vida más acuática, por ejemplo, el lago de la Babilla -en Ciudad Jardín-, así hay que construir todos los lagos de retención en la ciudad”, afirma Salazar, al tiempo que dice que se debe obligar a que todos los constructores a hacer lagos de retención en sus urbanizaciones.

Dichos lagos de retención, agrega, “podrían estar ubicados en las canchas panamericanas, otro en lote frente de Cosmocentro, también se pueden tener en la baja ladera, en el espacio plano, eso ayudaría a completar los corredores ecológicos que va desde Farallones hacia el río Cauca”.

A su vez, el Gerente de Emcali comenta que se está estudiando la posibilidad de realizar lagunas de contención en áreas de Navarro, “para poder lograr hidráulicamente tratar que esas aguas que vienen, lleguen a un lugar se establezcan, y poder irlas soltando paulatinamente a una laguna de compensación. Esta es una de las opciones que estamos explorando en el corto y mediano plazo”, asegura.

Para el director de Planeación, Roy Barreras, estas obras hidráulicas son posibles de hacer y “podría pensarse en adelantarse en un mediano plazo, no son baratas y había que pensar en el mecanismos financiero para hacer esas obras con cargo, puede ser, a la tarifa de servicios públicos, o a través de un esquema de valorización, normalmente lo que se hace es que se le impone como obligaciones a los desarrolladores de las nuevas construcciones, pero esa es una normativa que estamos todavía desarrollando”.

Otras obras

Emcali está trabajando en el embalsamamiento del Río Cañaveralejo para poder regular el descargue de las aguas que vienen desde la montaña, y así “poderlo tener en un sitio y soltarlo paulatinamente para que no inunde aguas abajo el canal”, comenta el gerente general, Juan Diego Flórez.

Así también se realizan “obras tratando de encauzar muchas de las quebradas y ríos para poder llevarlos a feliz términos hacia el canal interceptor CVC o hacia el cárcamo que está en Ciudad Jardín”.

Y se ha empezado la descolmatación que se hace todos los años de muchos sectores que por sedimentos o por basuras se han tapado, para poder permitir que salga el flujo libre hacia la parte oriental de la ciudad.

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