ELN buscaría presionar un nuevo proceso de paz

La alerta de Cuba a Colombia sobre un posible ataque militar del ELN en Bogotá constituye una forma de presionar al Gobierno de Iván Duque para que retome los diálogos de paz con esa guerrilla.

A esa conclusión llegaron varios analistas consultados por El País, quienes afirman que en esta negociación el Gobierno de la isla buscaría seguir siendo un intermediario entre el ELN y el Ejecutivo colombiano.
No obstante, John Marulanda, consultor en seguridad y defensa, sostiene que no está de acuerdo con retomar los diálogos con esa guerrilla hasta que no se someta a las exigencias del Gobierno y sus miembros que permanecen en Cuba regresen a Colombia y se pongan a órdenes de la justicia.

“Hasta que no hagan eso, creo que la única opción viable e inteligente es seguir manteniendo una fuerte acción militar en contra del ELN. Si se abre un diálogo con esa guerrilla, no se puede aplicar la misma técnica que con las Farc, en las que unos dialogaban y otros disparaban”, afirmó Marulanda.

Asimismo, indicó que el grupo subversivo “con el aliento de Cuba y el apoyo de Venezuela” se ha convertido en un cartel transnacional muy fuerte que opera en las fronteras con Ecuador, Perú, Panamá y Venezuela”.

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“El ELN busca llevar al Gobierno a abrir algún tipo de diálogo. Esa estrategia, que es diseñada desde Cuba y apoyada por Venezuela, contempla hacer creer que esa guerrilla está dividida en dos, una parte que no quiere saber nada de violencia ni de narcotráfico (que es la que está en La Habana) y otra que es la que está en Venezuela, dedicada a la violencia y al narcotráfico”, agregó el experto. Según Marulanda: “A partir de ahí también se pretende empezar a presionar con personas como el expresidente Santos, que ya salió a decir que Estados Unidos debía quitarle el embargo a La Habana”.

El analista minimizó igualmente la advertencia que le hizo el embajador de Cuba, José Luis Ponce, al Gobierno colombiano sobre un posible ataque terrorista del ELN, en la medida en que “ya se sabe” que esta organización tiene la capacidad de lanzar “en cualquier momento” un atentando de esta índole, como quedó demostrado con el ocurrido en la Escuela de Cadetes General Santander en enero de 2019.

“Y los organismos de seguridad del Estado están prevenidos mucho más, sabiendo que el próximo lunes 15 de febrero se celebra un aniversario de la muerte del cura Camilo Torres -ideólogo del ELN-, por lo que saben que esa guerrilla puede cometer atentados antes, durante o después de esa fecha”, explicó.

Eso mismo aseguró el ministro de Defensa, Diego Molano, quien indicó que “es evidente que el ELN es un grupo terrorista y que tengan intenciones de actos terroristas no es nuevo para Colombia. Esa es una información que toda Colombia sabe y desde inteligencia, Policía y Fuerzas Militares se hace seguimiento a esa investigación”.

El 18 de enero de 2019, el presidente Iván Duque rompió los diálogos de paz con el ELN, luego del atentado contra la Escuela de Cadetes General Santander.

Por su parte, el director de la Policía Nacional, mayor general Jorge Luis Vargas, indicó que se está en “la tarea de recolección de información sobre las intenciones del ELN de afectar a la población civil y de las regiones”.

De su lado, el analista político Ancizar Marroquín aseguró que sí se debería insistir en el proceso de paz que se venía adelantando desde el Gobierno de Juan Manuel Santos y que se rompió tras el ataque perpetrado por esa guerrilla en Bogotá.

Cabe recordar que, tras la ruptura de los diálogos, el Ejecutivo levantó la suspensión de las órdenes de captura expedidas en contra de los jefes del ELN que integraban la delegación enviada a La Habana.

Precisamente algunos de ellos, que permanecen en Cuba, aseguraron no tener conocimiento del posible atentado terrorista que se estaría organizando, pues “no tienen involucramiento en decisiones militares u operaciones de la organización”.

“Creo que Colombia debe abrirle, una vez más la puerta al ELN a negociar. El Gobierno no solo debe retomar los diálogos sino dar el primer paso y, de ser necesario, el segundo y el tercero. Y en este proceso, el puente más creíble y eficiente es la Iglesia Católica”, manifestó Marroquín.

Entre tanto, Carlos Charry, director de la maestría en Estudios Sociales de la Universidad del Rosario, también señaló que el Gobierno debería retomar las conversaciones de paz, teniendo en cuenta que el ELN es una guerrilla en la que cada uno de sus frentes es casi que autónomo y “por eso ha sido tan complicado sentarse a negociar con ella”.

“Por eso no hay que dejar a un lado ese proceso de negociación y darle algún grado de legitimidad a los negociadores, para que ellos a su vez puedan ejercer algún tipo de centralización en las fuerzas internas que configuran al ELN”, indicó.

Al respecto, Miguel Ceballos, alto comisionado de Paz, dijo que no se puede “buscar la paz con un grupo que además de cometer actos terroristas, está dividido”.

Petición
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El Ministerio de Justicia de Colombia informó ayer que está tramitando ante el Gobierno de Cuba la extradición de cuatro integrantes del ELN.

Eston son: Nicolás Rodríguez Bautista, alias Gabino; Israel Ramírez Pineda, alias Pablo Beltrán; Juan de Dios Lizarazo Astrosa, alias Alirio Sepúlveda, y Víctor Orlando Cubides, alias Aureliano Carbonell o Pablo Tejada.