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Transitar por los carriles exclusivos del MÍO es una de las infracciones más comunes en la ciudad de Cali. Muchos hechos de intolerancia se han generado entre los conductores y las autoridades al cuestionarlos por violar esta norma. | Foto: Jorge Orozco - El País

CALI

El MÍO se está quedando sin conductores, ¿por qué Metrocali no los encuentra?

Incumplimiento en el pago de salarios, horarios abultados y mejor remuneración en la piratería, entre las razones por las que el sistema no consigue operadores.

12 de junio de 2022 Por: Luz Stella Cardona - Reportera de El País

Los concesionarios del Sistema Integrado de Transporte Masivo, MÍO, de Cali han abierto este año varias convocatorias para contratar conductores. Se requieren unos 300 para las diferentes empresas.

Sin embargo, esta tarea no ha sido fácil y eso que Cali tiene una tasa de desempleo de 13 % y se podría pensar que muchos quisieran estar al frente de uno de estos vehículos que diariamente transportan a los caleños.

Pero no es así. Óscar Ortiz, gerente de Metrocali, entidad responsable de desarrollar el sistema, explicó que se ha buscado cubrir estos cupos a través de estrategias como ‘Cali Trabaja’, adelantada por la Secretaría de Desarrollo Económico.

Con esta propuesta se abrieron 100 vacantes para hombres y mujeres, a los que se les ofreció capacitación y subsidio del 100 % para la obtención de la licencia categoría C2.

“La iniciativa la venimos impulsando desde marzo en la feria de empleo, con medios de comunicación y redes sociales, pero no hemos tenido muchos candidatos”, señaló Ortiz.

No obstante, la secretaria de Desarrollo Económico, Liliana Sierra, confirmó que el pasado miércoles se cerró esta convocatoria porque se llenaron los cupos, abriendo una esperanza de que de ese grupo salga un buen número de operadores de los buses del MÍO.

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¿Por qué no se suben?

El sistema tiene cuatro empresas concesionarias: Blanco y Negro Masivo, ETM S.A, GIT Masivo y Unimetro. Las tres primeras están al día en el pago de salarios y prestaciones con sus trabajadores, sin embargo, Unimetro les estaría debiendo cuatro quincenas a los conductores. Esta situación ha sido recurrente, pues la empresa argumenta que Metrocali también tiene deudas con ellos.

Óscar Ortiz reconoció que esto es cierto, pero asegura que también es
cierto que “quien tiene que tener el músculo financiero y la capacidad de pago es esa empresa, porque es una concesión privada. Nosotros no tenemos compromisos laborales con ningún concesionario”, dijo el directivo de Metrocali.

Explicó que hay una diferencia entre lo que paga el usuario por el pasaje y la tarifa técnica que reciben los concesionarios, pues durante el gobierno de Maurice Armitage se cambió la forma de pago para ellos: ya no por el número de pasajeros, sino por kilómetros recorridos.

“Pasamos de una autosostenibilidad a un modelo de sostenibilidad, pero
llegó la pandemia y el paro nacional, y las fuentes de pago no fueron lo suficientemente viables para obtener los recursos, porque la demanda cayó de 438 mil usuarios a 230 mil en el 2020 y hoy día movemos 260 mil”, destacó Ortiz.

Los concesionarios del MÍO tienen una fuente primaria de ingresos que es la tarifa de la cual se les paga el 70 %, “pero con ello no le cumplen a los trabajadores, específicamente es el caso de Unimetro”.

Actualmente, el sistema masivo cuenta con 835 buses con certificado de operación activo, pero solo salen a las calles 656 porque no hay conductores. Se estima que se requieren 2.3 conductores por
bus, es decir que hay un déficit de más de 300 operadores y no hay suficientes candidatos.

Incumplimientos

Algunos conductores han señalado que entre las razones para no trabajar en el MÍO están el incumplimiento en los pagos laborales: salarios, cesantías y seguridad social por parte de empresas como Unimetro, pero también los horarios abultados, en el caso de los otros concesionarios del sistema.

Julio Caicedo, conductor de Unimetro, afirmó que el Sistema de Transporte Masivo se ha ganado una imagen negativa debido a la empresa en la que laboral, la cual les adeuda varias quincenas.

“La compañía no nos paga a tiempo, llevamos cuatro quincenas sin
salario y no nos da ninguna respuesta. Tampoco nos ha consignado las
cesantías del 2021; esto ha hecho que la gente le tenga miedo a venir a trabajar al sistema, por eso no quieren laborar en el MÍO, esa es la verdad”, expresó.

Agregó que en este momento Unimetro tiene un inventario de 164 vehículos, pero promedio día salen alrededor de 32 buses, lo que significa que dentro de la empresa se quedan parados unos 132
carros, los cuales “están en un estado paupérrimo, pues son vehículos totalmente desbaratados”, dijo.

Asimismo, Unimetro cuenta con cerca de 90 operadores, de los cuales hay un número importante en cese indefinido de actividades por el problema de salarios. Luis Eduardo Caicedo, vicepresidente de Sintramasivo, aseguró que la gente no quiere trabajar en el MÍO por lo que está pasando con Unimetro, y en las otras empresas porque tienen una carga laboral muy pesada con turnos muy extensos.

“En este momento estamos totalmente desprotegidos, al igual que nuestras familias. Tenemos ancianos y niños que no tienen acceso a su medicina y tampoco hay dinero para comprarla. Estamos en una situación desesperada, por eso varios trabajadores hemos tomado la decisión de entrar a un cese indefinido de actividades al interior de
la misma empresa”.

Esta situación, manifestó Caicedo, afecta la movilidad en Cali, razón por
la cual muchas personas en las estaciones se tiran a la calle a bloquear las vías, para exigir más buses. Y este inconformismo se vuelve en contra de los conductores que son víctima de ataques por parte de las personas que le tienen odio al sistema.

Piratería, otra razón

Para algunos concesionarios la razón principal por la cual las personas no
quieren vincularse formalmente al sistema MÍO, es que han encontrado en el transporte informal, en la piratería, un medio que les genera mayores ingresos.

Eduardo Bellini, gerente de Blanco y Negro Masivo, sostuvo que “básicamente el inconveniente es que no hay conductores porque la gente prefiere irse a la ilegalidad. Como la Administración no la está combatiendo, eso ha prevalecido”.

Agregó que aunque los concesionarios tienen los buses para trabajar, no
cuentan con los operadores debido a esta problemática. “Lo que queremos es que haya un control por parte de la Alcaldía al tema de la ilegalidad”, reiteró.

Bellini señaló que la empresa tiene 340 buses y les falta alrededor de 100 operadores, no obstante, se estima que todos los concesionarios tienen un déficit de más o menos 30 % de conductores.

De otro lado, Enrique Wolff, gerente de GIT Masivo, coincidió con Bellini en que no hay controles contra la informalidad, pero considera que, además, hoy en día los conductores están expuestos a peligros, a usuarios y actores viales que les tiran piedras, los maltratan y atentan
contra sus vidas.

“Esto les está generando mucho estrés y hace que muchos conductores no quieran trabajar en el sistema. A nosotros nos hacen falta algunos operadores, pero básicamente la gente, viendo que el Municipio deja actuar libremente a la piratería, ha preferido comprar un carro particular y trabajar en el transporte informal”, dijo Wolff.

Para este directivo, el problema no es la falta de pago de salarios por parte de Unimetro, sino que en la informalidad hacen más dinero. Y a esto se suma el vandalismo y el maltrato constante a los conductores que hacen que ellos se retiren.

Así las cosas, y sin una solución a los problemas de movilidad, debido a
la falta de buses operando, los caleños seguirán resintiendo el servicio y optarán, como sucede en muchas partes de la ciudad, por el transporte informal.

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