Diez mil vehículos abandonados y un lío jurídico sin atender, ¿qué pasa con el polémico patio de tránsito de la 66?

Una nueva polémica surgió en Cali por el manejo que le ha dado el Municipio a los patios de Tránsito de la carrera 66 (predio al que se envían los vehículos inmovilizados por infracciones o accidentes).

Por un lado, el concejal Fernando Tamayo denunció que hasta agosto del año pasado el Municipio pagó el arriendo del terreno ubicado en la Carrera 66 con Calle 13, al sur de la ciudad, a un particular del que hasta el momento se desconoce su identidad y que presuntamente estaba ejerciendo ese derecho de manera irregular.

“El Municipio le pagó por trece años una plata, por el alquiler de ese lote, a un pirata que no tenía dominio sobre el terreno. Algo lamentable porque lo primero que se debe hacer en un negocio como ese es pedir certificado de tradición”, dijo Tamayo.

Asimismo, el cabildante explicó que ese lote actualmente pertenece a la Sociedad de Activos Especiales, SAE, y que este comportamiento irregular generó un posible detrimento patrimonial de $10.000 millones.

“El Centro de Diagnostico Automotor del Valle, Cdav, y el Municipio deberían dejar de hacerse los pendejos. Debido a esa irregularidad, ahora la ciudad podría enfrentarse a una demanda multimillonaria porque un pirata usufructuó un terreno que es de la SAE”, indicó el concejal.

Según informó la Secretaría de Movilidad de Cali, 2161 vehículos que están en el predio de la carrera 66 con calle 13 de la ciudad corresponden a inmovilizaciones por siniestros viales.

Tamayo también reveló que el negocio de los patios de tránsito le deja al Cdav alrededor del 60 % de lo recolectado y que al Municipio le queda el porcentaje restante. Pero, advirtió que en caso de una demanda le tocaría a la ciudad asumir el 100 % de la responsabilidad.

Por otra parte, desde septiembre la empresa Yolagir SAS tomó en arriendo el terreno anteriormente mencionado. Pero, sus directivas denuncian que desde ese momento no se ha recibido un solo peso por tener cerca de 10.000 vehículos - carros y motos- en el sitio.

“Estos comportamientos omisivos del pago del arriendo constituyen faltas graves porque están poniendo en riesgo la seguridad de esos vehículos. Entonces, seguramente estos hechos serán investigados por los organismos de fiscalización competentes”, afirmó Mario Ospina, abogado representante de firma Yolagir.

Resaltó también que no tienen ningún problema en que los patios sigan funcionando en este predio, pero que para eso necesitan que el Municipio se ponga al día y se regule esta prestación del servicio, ya que hasta el momento no se tiene ningún tipo de contrato entre Yolagir, la Secretaría de Movilidad y el Cdav.

“Desde el Municipio y el Cdav han evitado cualquier tipo de acercamiento con nosotros (Yolagir), de hecho lo único cierto es que lo último que dijo el gerente del Cdav fue que no iban a pagar esos costos de arrendamiento, situación que nos convocará a iniciar un proceso de responsabilidad patrimonial contra el municipio de Santiago de Cali”, puntualizó Ospina.

Además, el abogado recalcó que no se puede entregar una cifra exacta de los dineros que el Municipio le adeuda a Yolagir por el arriendo del lote. Sin embargo, expuso que es un valor alto considerando la extensión que tiene el terreno y los meses que tienen acumulados de mora.

Las directivas del Centro de Diagnóstico Automotor informaron que sobre el tema solo se pronunciará la Secretaría de Movilidad, y esta solo emitió un comunicado.

En este dicen que “actualmente las inmovilizaciones que realiza la autoridad de Tránsito se atienden en el sector de Acopi”.

Además, aseguraron que en el predio de la 66 permanecen 9919 vehículos, de los cuales 9319 llevan más de un año de haber sido inmovilizados. Según el concejal Tamayo, ya era hora de que esos carros y motos se hubieran subastado o chatarrizado. La administración caleña argumenta que tales tramites pueden tardar entre 12 y 18 meses adicionales, en cumplimiento de las normas que regulan el debido proceso.

Las directivas de Yolagir y concejales han indicado que este terreno, donde permanecen esos vehículos, ya no es un patio de tránsito, sino que se convirtió en un cementerio de carros y motos.

En un sondeo que hizo El País en Facebook sobre el tema, el ciudadano Orlando Valverde opinó: “Si a mí el Tránsito me quita la moto la dejaría allá. Debido a que uno tiene que pagar la multa, pagar los días de parqueadero, la infracción, la grúa y demás cosas que hacen que sea mejor comprar una nueva moto”.

De hecho, las directivas de Yolagir SAS confirmaron que ya no están entrando vehículos, producto de inmovilizaciones, al patio de la Carrera 66 y que ahora están llevando los carros y motos inmovilizados a un lugar ubicado en Yumbo.

El concejal Fernando Tamayo insistió en que los cuestionamientos alrededor de este tema sean investigados por los entes de control de la ciudad, los cuales no se han pronunciado al respecto.