En la actualidad es cada vez más común que haya personas que tengan más de una nacionalidad, llegando al nivel de que incluso hay países que le venden esta oportunidad a las personas para poder acceder a su pasaporte. Esto por lo general ocurre en países que dependen en su mayoría del turismo y que, a través de la venta de su nacionalidad, obtienen buenos ingresos a cambio de ciertos beneficios especiales para estos extranjeros.
Esto permite que una persona pueda ser ciudadana de otro país a la vez que lo es del suyo de origen, teniendo así los derechos y deberes tanto políticos, jurídicos y humanos en ambos países.
Si bien cada día este tipo de procesos lo realizan más personas en el mundo, existen algunos países que no permiten en lo absoluto que sus ciudadanos tengan doble nacionalidad, y en el caso de que esto llegue a ocurrir, le solicitarán renunciar a una de las dos, de otra forma, el gobierno puede tomar la decisión de retirarla de forma automática si no se soluciona a tiempo.
Estos países que limitan la cantidad de nacionalidad que una persona puede tener suelen hacerlo por razones como conflicto con otras o, sencillamente, porque poseen unas leyes migratorias muy estrictas que lo prohíben.
Estos países no permiten tener doble nacionalidad
Austria
De acuerdo a la información alojada en la página web de la Embajada de Austria en Colombia, la ley de este país europeo no permite la doble o múltiple nacionalidad, pues aseguran que quien adquiere voluntariamente otra nacionalidad de otro país, perdería, en un principio, su nacionalidad austriaca.
Así las cosas, si la persona no quiere perder su nacionalidad de Austria, deberá solicitar el consentimiento para conservar esta previo a adquirir la segunda nacionalidad. En este paso, la oficina a la que le corresponda este trámite en el Gobierno aplicará una exhaustiva evaluación para poder determinar si se puede conservar finalmente la nacionalidad y que pueda tener ambas.
Sin embargo, advierten que los extranjeros que deseen adquirir la nacionalidad austriaca deberán renunciar a la anterior en la medida que esto sea posible. Para esto solo hay una excepción y aplica para niños nacidos de un padre o madre austriaco y su otro par sea extranjero y el país de estos le confiera la ciudadanía al menor.
India
Este país ubicado al sur de Asia cuenta con una ley de inmigración bastante estricta, sin embargo, solo aquellas personas tengan una ascendencia india podrán disfrutar de los derechos otorgados por el mismo Programa de Ciudadanía para Extranjeros, los cuales en su mayoría, no pueden tener la doble nacionalidad india. Por lo que si desea obtener esta, deberá renunciar a su primera nacionalidad.
Por tradición, al creer que una nacionalidad es un compromiso del estado, al tenerla doble, se considera que una persona en estas condiciones no puede estar fielmente comprometida con el país.
Japón
Japón es uno de los países con uno de los pasaportes más poderosos del mundo, pues sirve como llave de entrada a la gran mayoría de territorios del globo, por lo cual es muy codiciado, pero así de complejo resulta siendo su acceso. Por lo que si un extranjero desea adquirir la nacionalidad japonesa, deberá renunciar a su ciudadanía actual.
De igual forma, quien desee convertirse en japonés de forma legal, deberá cumplir con los requisitos establecidos en el artículo 5 de la Ley de Nacionalidad del país asiático, donde se incluyen una residencia continua durante al menos cinco años, tener mínimo 20 años de edad, contar con un historial de buen comportamiento y no presentar antecedentes y el suficiente capital económico para sostenerse en los que es también uno de los territorios más costosos para vivir, al menos en las grandes ciudades.
Países Bajos
De acuerdo con la ley de inmigración de este país europeo, si un ciudadano neerlandés solicita otra nacionalidad, pierde la suya automáticamente. No obstante, a partir de abril del presente año habilitaron algunas excepciones que evitaría que esto suceda y se pierda la nacionalidad de origen.
Dentro de estas excepciones está también que el ciudadano haya nacido en el país de su segunda nacionalidad y resida en este al momento de adquirirla, o si está casado con alguien que tiene otra nacionalidad e incluso, si vivió durante cinco años seguidos, antes de cumplir los 18, en el país de su otra nacionalidad.