¿Cuáles electrodomésticos encarecen su factura de luz incluso apagados? Así puede ahorrar energía fácilmente

Pueden estar “apagados”, pero siguen consumiendo energía, y eso es lo que millones de hogares en el mundo desconocen al tener electrodomésticos.

Y es que, ciertos aparatos eléctricos siguen tomando energía aun cuando no están en uso. Estos, por lo general, son conocidos como “vampiros de energía”, y según el Consejo para la Defensa de los Recursos Naturales (NRDC) representan cerca del 23 % del consumo residencial total, un porcentaje que puede inflar la factura sin que los usuarios se den cuenta.

Dichos equipos que permanecen en modo reposo (o “stand-by”), listos para encenderse con un solo clic, mantener actualizaciones automáticas o conservar configuraciones internas, pueden ser los televisores modernos, que nunca se apagan del todo.

Estos mantienen sensores activos para recibir señales del control, ejecutan actualizaciones y permanecen listos para encenderse al instante. De hecho, entre más grande y más “smart” sea, mayor el consumo fantasma.

Otro de ellos, son las consolas de videojuegos, que pueden ser grandes devoradoras de energía en modo reposo, especialmente cuando actualizan juegos o mantienen funciones de suspensión.

Ahora bien, los computadores, especialmente si se teletrabaja, consumen energía en reposo debido a sus fuentes de poder, cargadores, ventiladores en modo mínimo o configuraciones de suspensión prolongada.

Incluso, si de trabajo se trata, las impresoras, escáneres y parlantes, y cargadores, también mantienen luces piloto y funciones listas para activarse.

Y finalmente, se encuentran los secadores de pelo y herramientas para el cabello, que además del gasto, representan un riesgo para el hogar, según la Asociación Nacional de Protección contra Incendios, que calcula unos 10.000 incidentes domésticos al año relacionados con estos aparatos.

Dichas herramientas pueden ser las planchas, rizadores y secadores, y hasta los cargadores de celulares, que suelen permanecer conectados por comodidad, pero incluso en reposo consumen energía para mantener componentes internos listos para calentarse rápidamente.

No obstante, entre todos ellos, aunque el gasto por unidad puede parecer pequeño, la suma mensual se vuelve significativa a la hora de tener que pagar el recibo de los servicios públicos.

Por eso, si es de los que acostumbra a dejar conectados diversos dispositivos, aunque no estén en uso, el mejor consejo es mantenerlos conectados a una regleta, y apagarla cuando termine de usarlos.

Si no es así, entonces use un enchufe inteligente que corte el suministro cuando no lo necesite. Incluso, active modos de ahorro de energía en televisores, consolas y computadoras. Y finalmente, no deje cargadores conectados si no hay dispositivos enchufados.