Seguramente alguna vez te has preguntado: ¿A qué vine a la tierra? ¿Cuál es mi misión?

Eres un ser de amor y viniste a perfeccionarte en lo que eres, o sea, que tu misión es amarte y amar.

 Así de simple, pero también es complejo, porque el amor tiene más expresiones de las que se piensa.

  El amor es entrega, verdad, respeto, generosidad, perdón, desapego, tolerancia, fe y admiración.

 El amor es ternura, sencillez, libertad, comprensión, detalles, deseo, armonía sexual, confianza y paciencia.

Esas y otras expresiones del amor son las que debes cultivar y perfeccionar paso a paso.

 En la tierra te pules en un trabajo que ya habías iniciado en el más allá, y que seguirá al partir.

Lo que te cuesta es lo que estás aprendiendo. Lo que no te talla es porque ya lo aprendiste.