Una operación conjunta de las autoridades permitió desmantelar una red dedicada a la falsificación de moneda extranjera que operaba desde una finca ubicada en zona rural del municipio de Berbeo, en el departamento de Boyacá.
En el lugar, los investigadores descubrieron una línea de producción destinada a la fabricación a gran escala de dólares falsos, lo que llevó a la captura de un hombre señalado como el responsable directo del complejo clandestino.
Se trata de José Jerónimo Ballesteros Ibáñez, quien, según las autoridades, estaría a cargo del funcionamiento del centro ilegal. Las investigaciones preliminares indican que los billetes falsificados se encontraban listos para ser comercializados tanto dentro del territorio colombiano como en el exterior, lo que evidencia el alcance del esquema criminal.
El operativo fue liderado por la Fiscalía General de la Nación, con el apoyo de agencias de Estados Unidos y unidades del Gaula Militar de la Policía Nacional. De acuerdo con los investigadores, la acción permitió ubicar un inmueble que había sido acondicionado específicamente para la producción de moneda falsa, con equipos y materiales diseñados para replicar billetes estadounidenses.
Las autoridades describieron el lugar como un verdadero centro de producción clandestino, pues en su interior, se halló maquinaria especializada, insumos y elementos técnicos empleados en la impresión y acabado de billetes falsos. Como resultado del procedimiento, se incautaron más de un millón de dólares falsificados, que ya estaban empacados y listos para su distribución.
Este sistema ilegal contaba con una capacidad de producción que permitía elaborar billetes falsos de denominaciones de 20 y 50 dólares, los cuales eran distribuidos en distintas ciudades de Colombia, así como en Estados Unidos y otros países de la región.
La Fiscalía señaló que la investigación permitió establecer que los billetes eran introducidos en diferentes mercados a través de canales de comercialización ilegal, lo que representaba un riesgo significativo para la economía y la confianza en el sistema financiero.
Tras la captura, Ballesteros Ibáñez fue presentado ante un juez penal de control de garantías por una fiscal de la Dirección Especializada contra el Lavado de Activos.
En la audiencia, se le imputaron los delitos de falsificación de moneda nacional o extranjera, tráfico de moneda falsificada y tráfico, elaboración y tenencia de elementos destinados a la falsificación de moneda.
El procesado no aceptó los cargos formulados por el ente acusador. Sin embargo, el juez decidió imponerle medida de aseguramiento en un centro carcelario, mientras avanzan las etapas del proceso penal y continúan las investigaciones en su contra.
La desarticulación del centro clandestino en Berbeo, la incautación de la maquinaria y del dinero falso, hacen parte de una investigación que aún se encuentra en desarrollo.
La Fiscalía General de la Nación informó que las indagaciones continúan con el objetivo de esclarecer completamente el funcionamiento de la red, identificar a otros posibles involucrados y determinar el destino final que tendría el dinero falsificado.