Cultivadores de coca protestarán por demoras en plan de sustitución en el Valle

Los campesinos que se dedican al cultivo de coca en el Valle del Cauca advirtieron sobre demoras en el plan de sustitución de cultivos y pidieron al Gobierno apoyar y fortalecer este programa. Esa y otras quejas motivarán una protesta que se realizará el próximo 23 de julio en Jamundí.

A través de la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Marihuana y Amapola, Coccam, los cultivadores rechazaron además el eventual regreso de la fumigación con glifosato.

“Las acciones en el Valle del Cauca iniciarán el próximo martes 23 de julio con una jornada pacífica en el municipio de Jamundí. Una comisión saldrá a divulgar lo que está pasando a nivel nacional y dentro del territorio de Jamundí y los municipios del Valle del Cauca”, indicó a El País John Freddy Gil, vocero del Valle del Cauca en la comisión política de la Coccam.

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Gil añadió que la coordinadora se encuentra en asamblea permanente. “Nos vamos a reunir urgente para definir qué acciones a nivel nacional vamos a tomar frente a las determinaciones del Gobierno Nacional”.

Según Gil, solo en Jamundí, hay más o menos 1.500 familias cultivadoras. “Dentro del programa se habla de familias cultivadoras, no cultivadoras y recolectores de hoja de coca. Todas estas familias están en riesgo”.

Cabe recordar que la Defensoría del Pueblo alertó en días pasados que carteles mexicanos estarían controlando desde Colombia la ruta del narcotráfico.

“El año pasado la Defensoría lanzó una alerta temprana sobre Jamundí. Ahí contamos que a esa zona habían llegado 12 personas de Norte de Santander de un grupo denominado Los Pelusos o EPL, y hoy ese grupo tiene entre 150 y 200 personas en todo su ejercicio delictivo en el norte del Cauca, con buena conexión con Jamundí”, afirmó Carlos Negret, defensor del Pueblo.

El funcionario añadió que “también advertimos que estaban en todo el corredor del narcotráfico, y lógicamente como lo hemos advertido en Buenaventura, en Tumaco, en Caquetá, ahí están los carteles mexicanos de Sinaloa y de Jalisco comprando directamente la droga”.

Los cultivadores le reclaman al Gobierno lo que consideran la falta de cumplimiento en el Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito, Pnis.

“Dentro del Valle del Cauca hay nueve municipios con presencia de cultivos de uso ilícito y se han firmado acuerdos colectivos individuales en tres localidades —El Dovio, Dagua y Bolívar—. Estas familias cumplieron con lo que les correspondía, que era levantar los cultivos de hoja de coca, pero hasta el momento no tienen el primer proyecto productivo”, denunció Gil.

Aseguró que la administración de Iván Duque “ha definido que dará continuidad, con todos los incumplimientos que se han presentado, solamente a las familias que ya firmaron el acuerdo, o sea que en el Valle del Cauca seis municipios quedarían por fuera del Pnis”.

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Gil se mostró en desacuerdo con las declaraciones del defensor del Pueblo sobre la influencia de los carteles de Sinaloa y Jalisco  en Jamundí y afirmó que también protestarán contra el posible regreso de la fumigación aérea con glifosato, una puerta que se abrió este jueves luego de que la Corte Constitucional dejara a disposición del Consejo Nacional de Estupefacientes la decisión de permitir, o no, este método de erradicación.

“La rechazamos rotundamente porque tenemos comunidades, niños, ancianos; tenemos flora, fauna y lo más importante, la vida, en peligro por culpa de esta práctica que el Gobierno nos quiere imponer”, puntualizó.

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La Coordinadora de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana, Coccam, se creó a inicios de 2017 con el objetivo de ayudar al Gobierno Nacional en la implementación de las políticas de erradicación y sustitución de cultivos ilícitos.

La organización busca hacer un puente entre el Gobierno y las comunidades para negociar los mecanismos de erradicación y “sustitución integral” de cultivos de coca, marihuana o amapola.