Autoridades de salud del Valle se capacitan para enfrentar al fentanilo

El fentanilo es una de las drogas que más problemas de salud pública están causando a nivel mundial, incluso se ha hablado de que en Estados Unidos desplazó a la cocaína.

Además, es considerada como la droga ‘zombie’, debido a que es más potente que la cocaína y genera efectos de alucinaciones en las personas.

En Cali, por ejemplo, ya se identificó y capturó a algunos criminales que se dedicaban a la comercialización de esta droga. Por eso, las autoridades están en máxima alerta.

“En el país y en el Valle del Cauca se tiene preocupación por el uso indebido del fentanilo, y que se salga del espacio hospitalario y llegue a la comunidad como una sustancia más para producir estímulos mentales que produce al final adicción”, comentó la secretaria de Salud del Valle del Cauca, María Cristina Lesmes.

La funcionaria realizó recientemente un foro donde se trató el tema, y se explicó las graves consecuencias que tiene el consumo del fentanilo.

“Hemos empezado unos espacios de capacitación y formación que le permita al personal de salud reaccionar en esto y a los gobiernos poner medidas para que contengan el uso indebido de esta sustancia, al final lo que vamos a hacer es evitar un número importante de muertes”, resaltó Lesmes.

Se debe recordar que, por ejemplo, recientemente se capturó a un joven en Cali que estaba intentando robar de un centro asistencial algunas ampollas de fentanilo, pero esto fue evitado debido a la reacción del personal del lugar. Todo quedó grabado en cámaras de seguridad.

Durante el foro, el médico toxicólogo Jorge Quiñonez, resaltó la importancia de capacitar al personal de salud. “Tenemos que entrenar a los médicos, las enfermeras y todo el personal para reconocer estas intoxicaciones rápidamente porque produce la muerte muy rápido. Es muy importante reconocer en los pacientes que pueden llegar a cualquier servicio médico, las pupilas que son muy pequeñitas y que en el abdomen no tiene movimiento intestinal, son algunas de las características para el diagnóstico; existen otras, por ejemplo, la persona llega inconsciente y empieza a fallar la respiración”.

“Estos espacios son muy importantes no solo para el personal sanitario, sino también a nivel comunitario porque nos muestra una mirada más amplia de la problemática que estamos viviendo actualmente. La invitación es a que tanto jóvenes como sus familias y actores de comunidades académicas nos informemos y podamos aportar a la prevención del uso de sustancias psicoactivas para mitigar el riesgo de daños y muertes ocasionadas por estas sustancias”, resaltó Milton Noguera, estudiante de enfermería.

Finalmente, María Cristina Lemes, secretaria de Salud del Valle, indicó que esto también debe ser impulsado con el tratamiento de afecciones mentales de las personas, para así evitar el ingreso al mundo de las drogas.

“Para evitar cualquier tipo de adicción y en especial no permitir que el fentanilo ingrese como una sustancia más”, concluyó la secretaria María Cristina Lesmes.

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El presidente Gustavo Petro ordenará que se instalen puestos de salud cerca a los sitios de rumba en las ciudades donde se pueda detectar si las drogas que se consumen en esos sitios contienen también fentanilo. “Aquí cambia el paradigma”, dijo el presidente.

El anuncio se hace en concordancia con lo manifestado por el presidente Gustavo Petro que se construirá “una política pública para detener la entrada del fentanilo a Colombia, uno de los peores males que hoy sufre la humanidad”.

A través de su cuenta de X, el presidente informó que en la Casa de Nariño sostuvo una “reunión con varios alcaldes de capitales para examinar problemas de los sistemas integrados de transporte masivo, de inseguridad, y de política para defender la juventud del fentanilo”.

La presentación de la estrategia la hará el director de la Policía Antinarcóticos, General Nicolás Alejandro Zapata, en el Congreso que se realiza en Medellín.

Esta estrategia estará articulada con la Política Nacional de Drogas 2023–2033, que establece la implementación de un plan de respuesta integral frente a la amenaza de drogas de alto impacto como el fentanilo, opioides y otras drogas emergentes.

“Eso incluye estrategias de prevención, reducción de daños, atención, manejo de urgencias, monitoreo control”, afirma el documento. Se establecen operaciones de desmantelamiento y destrucción de infraestructura diferenciadas para las drogas sintéticas y el fentanilo.