Banano: así se debe consumir para reducir el riesgo de tener cáncer

Es frecuente que esperemos a que los plátanos se maduren antes de comerlos, ya que parecen más suaves y dulces. No obstante, un experto advierte que al permitir que los plátanos maduren, podríamos estar perdiendo ciertos beneficios para la salud.

Según un artículo publicado en Mail Online, el Dr. Mosley explica que los plátanos verdes contienen almidón resistente, que actúa como fibra en el intestino y, por lo tanto, no provoca un aumento tan significativo en los niveles de azúcar en la sangre.

Adicionalmente, este almidón también proporciona nutrición a las bacterias saludables presentes en el intestino. Estas bacterias transforman el almidón resistente en un ácido graso llamado butirato, que no solo puede ayudar a prevenir el cáncer de colon, sino que también ofrece diversos beneficios para el intestino.

Un aliado sorprendente para la salud del hígado

El Dr. Mosley señala los resultados de una investigación que destaca cómo el almidón resistente, presente en plátanos verdes y otros alimentos, puede tener un impacto positivo en la salud del hígado y el intestino. En un estudio realizado en el Sexto Hospital Popular de Shanghai en China, se reclutaron 200 personas con enfermedad del hígado graso no alcohólico. Los participantes que consumieron almidón resistente de maíz mostraron una disminución del 40% en la acumulación de grasa en el hígado, junto con niveles reducidos de enzimas hepáticas y factores inflamatorios asociados a esta enfermedad.

El especialista sugiere que para aumentar la ingesta de almidón resistente es importante incluir alimentos como avena, legumbres y plátanos verdes en la dieta. Además, menciona que el proceso de cocinar, enfriar y recalentar alimentos como arroz, pasta o patatas puede convertir los carbohidratos simples en almidón resistente, ofreciendo beneficios tanto al intestino como al hígado.

Evitar el riesgo de cáncer

Un estudio llevado a cabo por las Universidades de Newcastle y Leeds en el Reino Unido ha revelado que consumir un plátano verde al día puede reducir hasta en un 60% las posibilidades de desarrollar cáncer. La investigación involucró a 1,000 pacientes con síndrome de Lynch, una condición genética que aumenta el riesgo de esta enfermedad. Los participantes que consumieron este alimento mostraron una disminución significativa en el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer, gracias a la abundancia de almidón presente en los plátanos verdes. Este componente también se encuentra en otros alimentos como frijoles, cereales y avena.

Además, este efecto protector se hizo más fuerte en los casos de tumores gastrointestinales, como los del esófago, estómago, páncreas o duodeno. Lo notable es que esta protección se mantuvo incluso diez años después de que los pacientes dejaran de consumir el almidón, como destaca el informe.

Otros alimentos que pueden reducir el riesgo de padecer cáncer

Brócoli

El brócoli contiene un compuesto llamado sulforafano, el cual se ha comprobado que tiene la capacidad de inducir la muerte de las células cancerosas y reducir el tamaño de los tumores en investigaciones realizadas en laboratorios y con animales. Además, se ha observado que un aumento en el consumo de vegetales crucíferos, como el brócoli, está relacionado con un menor riesgo de padecer cáncer colorrectal.

Zanahorias

Varios estudios han revelado que aumentar el consumo de zanahorias está vinculado a una reducción en el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer.

Por ejemplo, un análisis que evaluó cinco estudios concluyó que consumir zanahorias puede disminuir el riesgo de cáncer de estómago hasta en un 26%.

Otro estudio encontró que las personas que consumían más zanahorias tenían un 18 por ciento menos de probabilidad de desarrollar cáncer de próstata.

En un análisis de las dietas de 1,266 participantes, algunos con cáncer de pulmón y otros sin él, se encontró que los fumadores que no incluían zanahorias en su dieta tenían tres veces más posibilidades de desarrollar cáncer de pulmón en comparación con aquellos que las consumían más de una vez por semana.