Fiscalía investiga si la muerte de Alicia Graham, madre de niña envenenada con talio, estaría vinculada al caso

Las autoridades continúan avanzando en las investigaciones por la muerte de dos menores que fallecieron en el mes de abril de 2025 tras ingerir frambuesas contaminadas con talio, un caso que ha generado conmoción nacional.

En el marco de estas indagaciones, la Fiscalía General de la Nación incluyó en su solicitud de extradición contra Zulma Guzmán Castro un conjunto de evidencias que dan cuenta de hechos adicionales que estarían siendo analizados por el ente acusador. Entre estos, se menciona un posible episodio previo de intoxicación por talio ocurrido en el año 2020, que habría afectado a Alicia Graham, madre de una de las menores fallecidas.

De acuerdo con información revelada por El Tiempo, el documento judicial evidencia que Graham murió en 2021. La Fiscalía ha aclarado que no se ha establecido de manera concluyente si su fallecimiento estuvo directamente relacionado con el presunto envenenamiento que hoy es materia de investigación. No obstante, el caso fue incorporado como un antecedente relevante dentro del expediente.

Las pesquisas también detallan la relación personal que habría existido entre Guzmán Castro y Juan de Bedouth, padre de una de las niñas y propietario de la vivienda donde, según las autoridades, fueron entregadas y consumidas las frambuesas.

Según los investigadores, se trató de una relación extramatrimonial que habría estado marcada por comportamientos considerados inusuales por parte de la hoy señalada, entre ellos, presuntos intentos de seguimiento sin consentimiento y consultas de carácter esotérico relacionadas con su vínculo sentimental.

Cabe mencionar que el programa Los Informantes reveló que la enfermedad que antecedió a la muerte de Alicia Graham podría guardar relación con una intoxicación por talio. Según los reportes conocidos, la mujer comenzó a presentar un deterioro progresivo de su salud a finales de 2020, en plena pandemia, pese a que años atrás había superado un cáncer de seno.

Aunque Graham acudió a múltiples especialistas y se descartó la reaparición del cáncer, no se logró identificar de inmediato el origen de sus síntomas. Fue posteriormente, según relató el médico internista y endocrino Julio Portocarrero, quien la atendió, cuando surgieron elementos clínicos que permitieron considerar la posibilidad de una intoxicación, línea que hoy es revisada por las autoridades judiciales dentro del caso.

El ente acusador logró reconstruir la ruta del crimen ocurrido en abril pasado, vinculando a la empresaria con el envío de un paquete de frambuesas cubiertas de chocolate que contenían la sustancia letal.

Según las evidencias técnicas, el día de los hechos Guzmán Castro visitó un local de esoterismo en el norte de Bogotá, ubicado en el mismo edificio donde fue recogido el paquete por un servicio de mensajería. Un mentalista identificado como ‘J’ declaró que la mujer acudía a consultas urgentes debido a que su expareja se negaba a retomar la relación, y le habría instalado un localizador GPS en su vehículo para vigilar sus movimientos.

Mientras tanto, el expediente liderado por la fiscal Elsa Cristina Reyes acumula testimonios que describen una conducta de acoso persistente, en la que Guzmán habría utilizado mensajeros para forzar la entrega del “regalo” envenenado que terminó con la vida de dos niñas de 13 y 14 años, tras una intoxicación severa en la Fundación Santa Fe.