Ataque contra patrulla de la Policía en el suroriente de Cali deja dos oficiales muertos

En la madrugada de este martes 16 de diciembre (3:55 a.m.), se escucharon dos explosiones, que al parecer iban dirigidas contra una patrulla de la policía que se encontraba cerca de un CAI en el barrio Mariano Ramos, en el sur de la ciudad, exactamente en la Carrera 50 con Calle 40.

Según las primeras informaciones suministradas por las autoridades, dos uniformados fueron las víctimas del ataque. El alcalde de la ciudad, Alejandro Eder confirmó el hecho, señalando que dos explosivos habían sido activados al paso de una patrulla.

Las detonaciones generaron pánico entre los habitantes de la zona, quienes salieron a las calles a brindar ayuda a los oficiales.

Versiones señalan que los dos uniformados fueron dos subintendentes, que se encontraban de servicio en ese momento.

Ambos fueron trasladados de urgencia a la Clínica Valle de Lili, donde recibieron atención médica.

Sin embargo, minutos después, las autoridades confirmaron el fallecimiento de los dos policías debido a la gravedad de las lesiones ocasionadas por la explosión.

Las víctimas fueron identificadas como el subintendente Jorge Leandro Gómez Ochoa, de 36 años edad y quien llevaba 15 años de servicio en la institución y el subintendente Rober Stiven Melo Londoño, de 33 años de edad y 12 años en la Policía.

El personero, Gerardo Mendoza Castrillón, manifestó su rechazo a este hecho de violencia en contra de la Policía Nacional y expresó su solidaridad a las familias de las dos víctimas.

Asimismo, instó a fortalecer las medidas de seguridad, inteligencia y prevención, no solo en las zonas más afectadas por la presencia de grupos armados ilegales, sino en todo el territorio nacional, con el fin de evitar que hechos de esta naturaleza se repitan.

También hizo un llamado a las autoridades nacionales y locales para que se refuercen los esfuerzos para garantizar el respeto a la vida, la integridad y los derechos humanos, “especialmente en contextos de conflicto armado y confrontación con organizaciones ilegales”.

Las autoridades adelantan operativos en la zona para establecer lo ocurrido y dar con los responsables. En este momento el área se encuentra acordonada, para facilitar las labores de inspección judicial y recolección de pruebas.

Unidades especializadas en explosivos y criminalística están desplegadas por toda la zona, con el fin de determinar qué tipo de artefacto fue utilizado y la modalidad del ataque.

Las explosiones ocurrieron muy cerca del Coliseo María Isabel Urrutia, uno de los escenarios deportivos más importantes de la ciudad.

Pese a que este hecho terrorista se registra en medio del paro armado decretado por el ELN en el país, al momento no se ha atribuido oficialmente la autoría del atentado a ningún grupo armado o estructura criminal.