El pais
SUSCRÍBETE
Ramsés Ramos, Nina Caicedo, Bárbara Perea, Indhira Serrano y Mateo Giraldo, actores de esta obra de teatro, muy aplaudida en Bogotá. | Foto: Especial para El País

ENTRETENIMIENTO

Teatro con entrada libre para conmemorar el mes de la afrocolombianidad

Hoy a las 7:00 p.m. se presentará con entrada libre ‘Uva pasa bajo el Sol’, en el Teatro Municipal Enrique Buenaventura. En el mes de la Afrocolombianidad, un clásico de la dramaturgia.

27 de mayo de 2019 Por: Redacción de El País

Uva Pasa bajo el Sol, obra que se presentó con funciones llenas en el Teatro Colón, de Bogotá, el año pasado, dirigida por el también actor Sebastián Aragón, es uno de los clásicos universales de la dramaturgia.

Y hoy llega a Cali con un elenco de lujo encabezado por Indhira Serrano, Bárbara Perea, Nina Caicedo, Mateo Giraldo y Ramsés Ramos, al Teatro Municipal Enrique Buenaventura, en una única función a las 7:00 p.m., con entrada libre hasta completar aforo.

‘A Raisin in the Sun’ —su título original, proveniente del poema ‘Harlem’— se estrenó en 1959 en Broadway, siendo la primera vez que en la meca del teatro se producía una obra escrita por una mujer afroamericana, la estadounidense Lorraine Hansberry. En teatro fue protagonizada por el actor Sidney Poitier, que también hizo una versión cinematográfica dos años después.

Lea también: Julián Román: "lucho para que la actuación sea tomada en serio en Colombia"

“¿Qué pasa con un sueño aplazado? ¿Se seca como una uva pasa bajo el sol? ¿O se encona como una llaga y luego supura? ¿Apesta como la carne podrida? ¿O se le forma una corteza encima como a los jarabes dulces? Tal vez solo se hunda como una carga pesada. ¿O acaso explota?”, dice el poema ‘Harlem’, de Langston Hughes, en que se inspiró la obra.

Juan Sebastián Aragón, su director, a quien vimos los colombianos en televisión en la serie La Niña, dice que “han sido muchas las versiones que se han hecho de esta pieza teatral en Estados Unidos, incluyendo musicales, películas y adaptaciones de cine para televisión con figuras como Danny Glover y Puff Daddy. Incluso la más reciente adaptación en Broadway la protagonizó Denzel Washington”.

Nominada al Emmy y a los Globos de Oro, y ganadora de premios Tony a mejor re-montaje teatral, esta obra cuenta las vivencias que surgen al interior de la familia Younger, ante la espera desde hace tres años del pago de un seguro por US$10.000. Cada uno de los integrantes tiene un sueño distinto con este dinero, como comprar una casa más digna, en el caso de la mamá abuela (Bárbara Perea); seguir la carrera universitaria de sus sueños, medicina, que es la aspiración de la hija (Nina Caicedo); montar una tienda de licores, como espera el hijo (Ramsés Ramos), en fin. Este último está casado con Indhira Serrano y tienen un hijo Mateo Giraldo. El personaje de Nina tiene dos pretendientes, que simbolizan la confrontación entre las culturas, uno de los novios está totalmente agringado; el otro viene de Nigeria. Se da así una confrontación de valores entre los miembros de la familia.

“Con ‘Uva pasa bajo el sol’ la idea es cambiar la mentalidad de la gente, que se den cuenta que aquello que odian tanto es porque lo desconocen, porque si lo conocieran se percatarían de que tenemos más cosas en común de las que creemos, como esa dificultad de manifestarnos amor, o esas dificultades inherentes al matrimonio derivadas de problemas económicos o un sueño en común de llevar una vida mejor a pesar de las circunstancias. La obra sigue viva después de tantos años porque sigue conectándose con el público”, reflexiona Aragón.

“Cuando estudié en Nueva York me presentaron esta obra como una de las titánicas de la literatura universal, pero descubrí que en Colombia, era totalmente desconocida, incluso entre la gente del teatro. Vivimos en un país donde hay mucho racismo, donde para un actor afro conseguir un trabajo es un camello, y cuando lo consigue generalmente se trata de papeles estigmatizantes, de portero, empleada del servicio, ladrón o esclavo. Y como si eso no fuera suficiente, su historia es un accesorio a la historia de otros, no es su propia historia”.

En esta obra todos los papeles protagónicos son para actores afros, para que estos luzcan su talento. Por eso, para Álvaro Bayona, quien interpreta a un personaje, el único de raza blanca, que genera el conflicto, resulta interesante “actuar junto a un gran grupo de muy buenos actores negros. El texto es maravilloso, escrito un momento de la dramaturgia norteamericana muy floreciente”. Indhira destaca que la obra original la conmovió: “sentimos que había que adaptarla al español para mostrar cómo a través de la historia de una familia negra en Estados Unidos se puede contar la de muchas familias que todos los días se levantan y luchan por su dignidad”.

A todos nos toca el corazón

Para Bárbara Perea ha sido todo un reto “poner en escena nuestra temática afro. Estamos creando identidad y reflexión para toda la población, porque es una obra dirigida a todos los públicos, a todas las razas, porque a todos nos toca en una época en la que seguimos viviendo y practicando la discriminación”, afirma Bárbara Perea.

Según Ramsés Ramos “esta obra representativa de la dramaturgia negra norteamericana abre una puerta para que las dramaturgias propias colombianas empiecen a navegar a través de estas historias y personajes. En nuestro país no tenemos una dramaturgia que dé cuenta, de manera sólida, contundente y abundante, de los personajes negros de nuestro país. Nos hemos reunido un grupo de actores negros para hacer un homenaje y a la vez una provocación, un llamado de atención a quienes hacen la dramaturgia para que miren hacia esta posibilidad narrativa”.

Pero más allá de inclusión, Aragón promete que “no existe la posibilidad de que salgas del teatro sin que tu corazón haya pasado por lugares de ternura, dolor, comprensión”.

AHORA EN Entretenimiento