¿Está expuesto al bullying en su relación de pareja?

No dejar a la pareja trabajar, forzarla a realizar prácticas sexuales que no desea o burlarse de su peso o aspecto, alertas.

No se trata solo del acoso constante contra alguien y con intención, el bullying sexual se viste de piel de oveja con frases como “Te voy a dejar si no lo haces”. “Tú ya no me quieres”. “Haz esto o te va mal”. “Yo te ayudo si te portas bien”. Incluso fingir que alguien nos gusta para luego humillarlo es considerado como tal.En las relaciones de pareja este matoneo busca dominar y manipular. Es complejo y doloroso por los vínculos emocionales que hay entre el agresor y la víctima, los cuales se usan a menudo para maltratar al otro.Va desde gritos, golpes, encierros, pasando por abusos y manipulaciones; incluye celos, posesividad y obsesión; mentiras, insultos, amenazas, hasta maltrato sexual, aislamiento social y prohibición de amistades. Algunos bullys llegan a ejercer control sobre la comida, el vestuario, las mascotas y los planes del otro, y hostigan por chat, mail y mensajes de voz.Es un matoneo múltiple. Ataca sicológica, emocional, física y verbalmente. Deja secuelas visibles e invisibles, como el atropello a la evolución de la sexualidad y la definición de la identidad.María Villegas en su libro ‘Enfrentando el bullying’, fija un parámetro claro: “Una buena relación nunca te obligará a hacer algo contra tu voluntad, ni te producirá miedo, incertidumbre o estrés. Siempre sacará a relucir lo mejor de cada uno”.Cómo manejarloSi hay niños en casa, evite tener pornografía o imágenes eróticas. Hay que cuidar la clasificación de las películas para preservar la inocencia de los pequeños.Se entiende por bullying o acoso sexual cualquier conducta sexual no deseada, que puede incluir tocamientos, lenguaje obsceno, bromas sexuales o comentarios sobre la superioridad de un sexo sobre el otro.Aunque el acoso sexual parece estar bastante controlado en la universidad, sigue siendo un tabú en la escuela secundaria y aún más en la primaria.La falta de atención sobre estas conductas en la preadolescencia y la adolescencia, resulta negativa ya que gran parte de las actitudes hacia las personas del sexo opuesto se forman en los primeros años.Ciertos estereotipos sobre "la adolescencia incontrolable" a causa de las hormonas, provocan una banalización del tema del acoso sexual en los centros.Es más fácil decir cosas como: “Son todo hormonas, no hay cerebro”, o “Sólo llaman la atención” que trabajar para frenar estas conductas precoces, las cuales son el germen de futuras agresiones de “violencia de género”.La recomendación es aprender a decir “NO”, sin importar la presión del otro. Si conoce al agresor, evite quedarse a solas con él. Denuncie sin temor. Trátese de quien se trate.En ColombiaEn Colombia, según la Ley 1236 de 2008, la persona que realice actos sexuales en presencia de o con un menor de 14 años y lo induzca a prácticas sexuales, deberá pagar con cárcel estas acciones.Un caso de bullying sexual en el país que desencadenó en tragedia fue el de tres amigos que desnudaban al cuarto del grupo que estaba distraído, arrojando su ropa a un tejado cercano para que pasara por la vergüenza de tener que recuperarla en dichas condiciones. Sin saber lo que ocurría, el padre del joven pasó cerca cuando ocurrían los hechos. Creyendo que estaba siendo víctima de una violación, sacó un arma y mató a los tres supuestos agresores. El joven dijo “solo nos estábamos divirtiendo”. El papá paga una condena de 30 años de prisión.¿Es un bully con su pareja?Responda las siguientes preguntas:¿Se burla permanentemente de las opiniones de su pareja?a. Síb. No¿Comenta con ironía sobre el aspecto físico del otro?a. Síb. No¿Lo amenaza y lo agrede cuando no hace lo que usted quiere?a. Síb. No¿Le empodera hacer sentir mal al otro?a. Síb. No¿Siente que su pareja le tiene miedo?a. Síb. NoSi una o más respuestas son positivas, estará cayendo en una conducta de matoneo.