Día de los Santos Inocentes: origen religioso, significado y cómo se conmemora el 28 de diciembre

Cada 28 de diciembre millones de personas en el mundo hispanohablante conmemoran el Día de los Santos Inocentes, una fecha marcada por una mezcla de tradición religiosa y celebración popular que ha evolucionado a lo largo de los siglos.

La jornada, que hoy es sinónimo de humor, chistes y bromas, tiene un trasfondo histórico profundamente arraigado en la tradición cristiana.

El origen de esta fecha se remonta al relato bíblico narrado en el Evangelio de San Mateo, donde se describe cómo el rey Herodes I, temeroso de perder su poder tras el anuncio del nacimiento de Jesús, ordenó la matanza de todos los varones menores de dos años en Belén, buscando eliminar a lo que él consideraba una amenaza para su trono.

Por este episodio, la Iglesia Católica estableció el 28 de diciembre como el día en que se recuerda a los Santos Inocentes, niños que, sin culpa alguna, se convirtieron en las primeras víctimas del cristianismo.

Aunque la conmemoración original es solemne y recuerda este trágico suceso, con el paso del tiempo la fecha ha adoptado un matiz festivo centrado en el humor y el ingenio, especialmente en países como Colombia, España y México.

En estos lugares, las personas aprovechan la jornada para hacerse bromas entre familiares, amigos y compañeros de trabajo, en un ambiente de risa y complicidad que caracteriza la festividad contemporánea.

En Colombia, es habitual que el 28 de diciembre se convierta en un día de pequeños engaños y chistes amistosos, conocidos popularmente como “inocentadas”. Esta tradición ha trascendido el marco religioso y se ha consolidado como un elemento de convivencia y creatividad social, donde incluso los medios de comunicación participan publicando noticias ficticias o exageradas, que luego se aclararán como parte de la celebración.

A pesar de la evolución festiva, para muchas personas la festividad mantiene un componente de reflexión, ya que recuerda la importancia de proteger a los más vulnerables y conmemora a aquellos niños cuya vida fue truncada.

En algunos sectores religiosos, este día también se utiliza para pedir por la paz y el bienestar de los niños que hoy enfrentan injusticias, pobreza o violencia en diferentes partes del mundo; en el caso de la Iglesia católica, este domingo coincidió con la conmemoración del Día de la Sagrada Familia.

En definitiva, el Día de los Santos Inocentes es una jornada única en el calendario que combina memoria histórica, fe y humor, permitiendo a las comunidades celebrar con creatividad y al mismo tiempo reflexionar sobre el valor de la vida y la inocencia humana.