Un particular dice ser dueño de 30 hectáreas del cerro de las Tres Cruces, ¿qué hay detrás?

Las afectaciones ambientales y alteraciones estructurales que ha sufrido el ecoparque Tres Cruces - Bataclán tienen en alerta a las autoridades ambientales del Municipio pues, al parecer, un particular es quien ha desarrollado algunas actividades en el emblemático cerro, alegando ser el propietario de una buena porción de tierra.

“Todo empezó en el año 2016, cuando nos dimos cuenta de la existencia del señor Fabián Vidal Abadía. Él llegó a nosotros (a la Alcaldía) y nos dijo que había adquirido 30 hectáreas del ecoparque mediante la compra de unos derechos herenciales, que incluían la Hacienda Toledo. Desde ese entonces, este lugar ha sufrido una serie de intervenciones que no están permitidas porque esta es un área de especial conservación”, comenta un integrante de la Unidad Contra las Invasiones de la Alcaldía de Cali.

El testimonio es confirmado por Guadalupe Fajardo, abogada de Ecossistemas para Recuperación de Predios del Dagma, quien asegura que entre esos impactos, se encuentra la edificación de una pequeña casa en el sector de Altos de Normandía, la construcción de un pozo séptico ilegal, múltiples siembras de frutales sin autorización y hasta un cerramiento con cercas eléctricas donde habitaban caballos.
“Es muchísimo el daño que el señor Fabián nos ha causado en el ecoparque. Tenemos que tener a nuestros guardaparques casi que centrados en que no siembre, no construya, no suba vehículos y no meta animales. Lo que él dice es que quiere hacer allí una especie de Panaca, con un ecohotel y actividades de camping”, afirma Fajardo.

Pero, quizá, el mayor impacto que ha sufrido el ecoparque Tres Cruces - Bataclán, en los últimos tres años, es el desmantelamiento de los escalones que se habían construido en el sendero Eucalipto en el año 2012.

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El Municipio de Cali es propietario de 26 hectáreas en el ecoparque Tres Cruces Bataclán. Además tiene bajo
su responsabilidad 542 hectáreas más que lo conforman.

“En ese entonces había 189 peldaños para que pudieran subir los deportistas y turistas, los fueron quitando con el paso de los meses y, la semana pasada se los terminaron de llevar todos. Lo más curioso es que, cuando hacíamos los recorridos, los encontrábamos escondidos entre los matorrales. Creemos que el causante de esos daños ha sido Fabián Vidal, porque hace un tiempo él nos dijo que su intención era hacer pasar por este camino una carretera que, según él, antes existía”, señala un guardaparques del Dagma.

Esta hipótesis estaría muy cerca a confirmarse ya que, el pasado jueves 7 de marzo, guardaparques del ente ambiental encontraron a dos hombres haciendo una zanja en el sendero Eucalipto para la evacuación de aguas.
“A uno de lo señores se le hizo un comparendo ambiental mediante el Código de Policía y, el otro hombre era su hijo, el cual presentaba una condición de discapacidad mental. El que tenía todas sus facultades, nos dijo que estaba trabajando para Fabián Vidal. Por eso, de aquí en adelante, la investigación va a estar dirigida en contra de este hombre”, asevera la abogada Guadalupe Fajardo.

Varias fuentes aseguraron a El País que, presuntamente, el desmantelamiento de las escaleras del sendero Eucalipto está siendo llevado a cabo por algunos habitantes de la comunidad del sector conocido como Altos de Normandía - Bataclán, quienes estarían siendo financiados por Fabián Vidal, bajo promesas de que velará porque estas personas no sean despojadas de sus tierras por parte del Municipio.

Edwin Luis Garzón, morador de la zona que, de acuerdo al POT de 2014, es considerada un asentamiento subnormal, asegura que muchas personas del barrio quieren que allí vuelva a existir la vía que hace 80 años conducía a la hacienda Toledo y que fue construida por los mineros de la época.

“Por allí subían los bomberos a apagar los incendios en la parte alta del cerro, al igual que la Policía con sus camiones debido a que allá hay mucha inseguridad. Pero el Dagma no ha querido dejar organizar esa carretera. Los escalones tienen más de 20 años y la misma gente los ha ido dañando de tanto subir, no nosotros”, asegura Garzón.

Sin embargo, la abogada de Ecossistemas para Recuperación de Predios del Dagma asevera que Edwin Luis Garzón es uno de los ocupantes ilegales del ecoparque Tres Cruces - Bataclán que, junto con sus dos hermanos, inició una acción de prescripción para que se les otorgara la propiedad de cerca de 2000 metros cuadrados en ese lugar.

“El proceso inició en el 2014 y terminó en febrero de este año con una sentencia en segunda instancia, en la que el Tribunal Contencioso Administrativo del Valle del Cauca decretó que esos predios son inalienables, imprescriptibles e inembargables y por eso les negó el derecho a prescribir esa propiedad, reconociendo que esos terrenos eran del Municipio”, dice la abogada.

La explicación, según la directora del Dagma, Claudia Buitrago, está sustentada en que en dicho ecoparque nadie puede tener titulación debido a que fue declarado en el año 1987 como bien de uso público “proveniente del gran baldío que la Nación le entregó al Municipio de Cali hace 70 años”.

Adicionalmente, entre los años 1991 y 1992, la Administración Municipal también adquirió dos predios en esa misma zona, que juntos sumaban un área de 263.787 metros cuadrados (un poco más de 26 hectáreas).

“Estos predios se compraron existiendo ocupantes dentro de ellos. En ese entonces, el Departamento Administrativo de Valorización Municipal, adquirió los derechos de posesión, las construcción y las mejoras forestales (sembrados) de 171 ocupantes ubicados en el sector de Bataclán y el cerro de las Tres Cruces. El punto es que algunas de estas personas le vendieron al Municipio las mejoras, pero no se fueron”, comenta Buitrago.

A raíz de esto es que la Alcaldía de Cali inició acciones judiciales para recuperar dichos predios en los que, según la última caracterización realizada en el 2018, viven 98 ocupantes, contra los cuales corren en curso 20 acciones policivas. En estos predios, está incluída la Hacienda Toledo, de la cual Fabián Vidal también dice ser el dueño.

Según la versión de Fabián Vidal Abadía, en el 2017 hizo una compra de los derechos herenciales, del predio en cuestión, a los hijos de María Almanza y Luis Toledo, familia que habría vivido por más de 70 años en el ecoparque Tres Cruces - Bataclán.

El terreno que Vidal dice haber adquirido, abarca 30 hectáreas del emblemático cerro de la ciudad.

“Pero yo estoy desde el 2014 en la zona y, años anteriores, había tenido un negocio con los Toledo Almanza. Ellos fueron los que me entregaron los linderos de la torre Anchicayá hacia arriba, hasta 70 metros antes del monumento de las Tres Cruces”.

Asimismo, el presunto comprador asegura que el Municipio de Cali fue objeto de una estafa cuando adquirió en los años 1991 y 1922, unos predios en la zona en mención que “supuestamente no existían”.
“En su momento, la Contraloría de Cali le advirtió a la Alcaldía a través de un documento que los títulos eran vagos e imprecisos y que por eso no había fundamento para la negociación, pero el Municipio hizo caso omiso. En ese sentido, los verdaderos títulos de esos predios son de la Sociedad Las Tres Cruces Ltda.”, explica Vidal.

El señor también se opone al fallo que hizo la corregidora del corregimiento de Golondrinas en el 2018, en el que declaró al Municipio como dueño de las tierras que él reclama. “Ella no es juez de la república para hacer un proceso de deslinde y dar propiedad”, dice.

Respecto a las acusaciones sobre las afectaciones que, presuntamente, ha causado en el sendero Eucalipto del Cerro de las Tres Cruces, Vidal niega haberlas cometido, pero sí reconoce que los trabajadores que fueron sorprendidos en flagrancia realizando intervenciones en el ecoparque, hacen parte de su equipo de trabajo. “Estaban arreglando canaletas que ya estaban construidas y por eso esto no puede ser considerado un delito. Tampoco yo he mandado a dañar los escalones”, afirma.

El hombre también precisa que sus deseos son construir en el cerro una proyecto ecoturístico con una zona de camping. “En el que quiero sembrar árboles frutales, de hecho ya llevo 500 individuos plantados y, posiblemente, darle trabajo a la misma gente de Bataclán. También que por ese lugar pueda subir la Policía para que haya mayor seguridad en la zona, o las ambulancias cuando ocurran accidentes”.

1987. 542 hectáreas del sector de Tres Cruces y Bataclán fueron declaradas como un bien de utilidad pública.

1991 y 1992. El Municipio de Cali adquiere 26 hectáreas en esa zona.
2014. Con el POT se crea el ecoparque Tres Cruces - Bataclán para evitar la expasión urbana hacia esa zona.

2016. Fabián Vidal llega al ecoparque.

2017. El hombre formaliza una presunta negociación con los hijos de la familia Toledo Almanza, en la que asegura haber adquirido 30 hectáreas de esa loma, mediante la compra de unos derechos herenciales.

2018. En junio del año pasado, la corregidora del corregimiento de Golondrinas emite un fallo en el que declara al Municipio como propietario de las 30 hectáreas en disputa.

2019. El Municipio de Cali interpone ante la Fiscalía una denuncia penal en contra de Fabián Vidal por daños ambientales en el ecoparque Tres Cruces -Bataclán.

En medio de la disputa por las 30 hectáreas del ecoparque Tres Cruces - Bataclán, Fabián Vidal a interpuesto varias denuncias. “Una de ellas en contra de la abogada del Dagma Guadalupe Fajardo por atropellos en mi contra”. También contra Alexánder Perafán (quien hace parte de la Unidad de Control de Invasiones de la Alcaldía), “por los daños que causó en mi predio en febrero de 2018 sin orden judicial, hurtando el alambre que destruyó en mi propiedad y del cual tengo evidencia”.

Adicionalmente, contra Laureano Quintero “por la retención ilegal que hizo de mi trabajador la semana pasada y quien participó con la Unidad de Control de Invasiones en la destrucción de mi predio el 20 de junio de 2018 por orden de la Corregidora de Golondrinas Ángela María Velásquez. A ella también denuncié por daño en bien ajeno luego de que, estando por fuera de su jurisdicción, ordenara una demolición en un kiosko de mi Hacienda Toledo en el 2018”.