Esta fue la herencia que le dejó Belisario Betancur al Valle

Para el expresidente Belisario Betancur, una de las prioridades en el Valle del Cauca fue el Distrito de Aguablanca, en Cali, que empezó a conformarse desde 1981 (casi dos años antes del inicio de su mandato).

“Con preocupación vemos la marginalidad que atraviesan casi 130.000 compatriotas que han establecido su residencia fuera del perímetro sanitario de la ciudad. De mantenerse las tendencias migratorias actuales, Aguablanca se convertirá en pocos años en la segunda agrupación poblacional del Valle”, dijo Betancur en un discurso en Cali, el 28 de abril de 1986, cerca de terminar su periodo presidencial.

Dentro de su programa de “habilitación y equipamiento” de Aguablanca fue importante priorizar las obras que beneficiaron la salud de las familias, por esto el componente principal del proyecto fueron los servicios de acueducto y alcantarillado.

Una de las acciones que más se le recuerda fue la de su programa de vivienda sin cuota inicial. Según el economista Édgar Vásquez, en su libro ‘Historia de Santiago de Cali del siglo XX’, con este se logró reducir el déficit habitacional en la capital del Valle.

“La política de ‘vivienda sin cuota inicial’ aplicada durante el Gobierno de Betancur produjo un impacto favorable en Cali, hasta el punto que -en plena crisis económica- el déficit se redujo considerablemente, del 34 % en 1980 al 14, 5% en 1985”, escribió.

Según el exmandatario, al final de su gestión el Valle contribuía con algo más del 10 % del producto interno del país, “el 5,8 % de la producción agropecuaria, el 13,8 % de la producción industrial manufacturera, el 11 % del sector comercio y el 11,2 % del sector financiero. Hoy en día es el departamento más urbano del país”.

En el área educativa se puso en marcha la Escuela Nacional del Deporte. La capacitación y formación de mano de obra para el mercado laboral a través del Sena tuvo una inversión en el Valle de $3300 millones.

A través del Fondo Vial Nacional el Gobierno ejecutó obras por valor cercano a los $1500 millones, entre las que se destacaron la doble calzada de la carretera Cali-Jamundí, las variantes y obras de acceso a varias poblaciones y la rehabilitación de la autopista Suroriental en Cali.
En julio de 1983 Betancur inauguró el Parque de la Caña, considerado el polideportivo más grande de Sudamérica en su momento y cuyo costó ascendió a $350 millones.

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El vallecaucano Rodrigo Lloreda Caicedo fue designado por el entonces presidente como canciller de Colombia, cargo que desempeñó entre 1982 y 1984 uy desde el cual desarrolló una dinámica gestión diplomática que le dio un importante liderazgo al país a nivel internacional.

Entre 1984 y 1986, Lloreda Caicedo fue embajador en Washington, periodo en el que también fue nombrado como designado presidencial, cargo que obtenía quien tuviera el respaldo mayoritario del partido del Gobierno.

Otros vallecaucanos destacados en el gobierno Betancur fueron Doris Eder De Zambrano y Liliam Suarez de Melo, quienes se desempeñaron como ministras de Educación.