El pais
SUSCRÍBETE
c | Foto: Especial para El País

RÍO MAGDALENA

La travesía del caleño que cruzó el Río Magdalena en kayak

Esteban Valderrama, de 24 años, y el instagramer Wilson Sánchez ‘Viajando con panela’, de 25, cruzaron el río Magdalena.

20 de noviembre de 2019 Por: Redacción de El País 

Esteban Valderrama, de 24 años, más conocido como @eltraveler en Instagram, le puso freno a sus miedos y aceptó la invitación de su amigo, el también instagramer Wilson Sánchez, de 25 años, (@viajandoconpanela) para navegar en kayak por el río Magdalena y llegar a Barranquilla, siguiendo su curso desde el departamento de Caldas.

Llevan dos semanas de viaje, remando por el río, desde el 1 de noviembre, desde el municipio de Honda, Tolima. Ayer, a las 5:20 p.m. habían llegado a El Remolino, municipio del Magdalena, “bastante aporreados” cuando les faltan 70 kilómetros aún por recorrer.

“Este viaje lo he querido hacer desde hace mucho y le dije a Esteban porque conocía su trabajo, que no iba a flaquear ante la propuesta”, dice Wilson, quien en las pasadas elecciones quedó como concejal electo de Villeta, Cundinamarca, cargo que no detendrá sus viajes.

Esteban confiesa que al principio tuvo pánico: “Todos mis amigos y mi familia decían que nos íbamos a matar, que el Magdalena es muy peligroso. Tuve demasiada ansiedad antes del viaje, comía poco y no podía dormir. Pero cuando tomé la primera corriente me sentí libre y se me quitó el temor”.

@eltraveler sueña con un viaje remando desde Cartagena hasta San Andrés. Para dicha hazaña piensa invitar a unas seis personas y viajar al lado de un barco. “Siempre me ha gustado ser emprendedor y he querido crear algo, una empresa. De tantos proyectos terminé en este. Creo que soy un tipo de misionero, pero no es que en mis redes hable de Dios, porque respeto todo tipo de creencias, me enfoco más en las energías y pensamientos positivos. Mi proyecto a futuro es ser un líder, tener consciencia de mi papel en la vida de la gente, tratar de quitar tantos miedos que la sociedad nos ha impuesto”, agrega.

Para Esteban, “lo más difícil del viaje es arrancar. Todo el mundo te dice que te vas a morir en el Magdalena. Hay mucha comunicación negativa respecto al río realmente triste, porque realmente el río es lindo, está muy contaminado, pero con la historia y con el conocimiento de todo lo que ayuda este río al país, entiendes que se debería cambiar el lenguaje y el contexto para que cambien el chip”.

“Hacer este viaje requiere de buen físico, pero además de control mental. Hemos cogido corrientes que nos han llevado a sitios nada agradables y nos ha tocado remar para alejarnos de allí. El río tiene cuatro divisiones que son como cuatro islas, luego hay tres más, después dos, se vuelve un laberinto fluvial y más arriba se convierte en manglar. En estos días nos cogió una tormenta en una isla y el río se creció y todo se inundó, mi compañero y yo creímos que no saldríamos con vida”.

AHORA EN Colombia