Tensión en el Concejo de Cali: no hubo quórum para elegir al nuevo contralor

La crisis interna del Concejo de Cali se agudizó este jueves luego de que la corporación volviera a quedarse sin el quórum necesario para avanzar en la elección del nuevo contralor de la ciudad, proceso que, en sí mismo, ya ha estado rodeado de polémicas y cuestionamientos.

La sesión convocada para entrevistar a los ternados no pudo desarrollarse, pese a que el presidente del Cabildo, Edison Lucumí, dio un compás de espera para intentar que más concejales se sumaran.

A las 10:39 de la mañana, el secretario general, Hebert Lobatón, abrió oficialmente la sesión. Sin embargo, tras el llamado a lista quedó claro que no había el número mínimo de concejales para deliberar. Solo estuvieron presentes Lucumí y los concejales Ana Erazo, Roberto Ortiz, Flower Rojas, María del Carmen Londoño y Rodrigo Salazar.

Mientras las barras reclamaban respeto y celeridad en la elección, Lucumí ordenó un receso hasta las 10:58, a la espera de que más cabildantes ingresaran al recinto. El segundo llamado a lista no cambió nada y confirmó el ausentismo: ningún otro concejal llegó.

El Presidente del Concejo calificó la situación como “delicada” e “inesperada”. Según explicó, la mesa directiva cumplió con todos los pasos legales y contaba con un análisis jurídico previo.

“Ayer realizamos un proceso con un jurista reconocido, el doctor Luis Mario Duque, quien dio claridad de que el proceso para elegir contralor se había hecho conforme a la normatividad vigente”, afirmó.

Insistió también en que la sesión se convocó una vez tuvieron plena certeza jurídica, y descartó que la ausencia pueda ser una acción personal contra él. “Algunos argumentan temores jurídicos; temores puede tener cualquiera, pero las cosas se han hecho en derecho y eso debe dar tranquilidad”, aseguró.

Por su parte, el concejal Rodrigo Salazar, de la Alianza Verde, criticó con firmeza a los 15 concejales que no asistieron. “Esto afecta el funcionamiento de la democracia local y el cumplimiento del deber constitucional de elegir contralor. Los ciudadanos necesitan una autoridad que vigile los recursos públicos”, dijo.

Añadió que la terna al cargo estuvo presente, así como el público que esperaba claridad sobre el proceso, lo que agravó el impacto de la falta de quórum.

El concejal Roberto Ortiz fue uno de los más críticos frente a la inasistencia mayoritaria que impidió avanzar en la elección, la cual atribuye a presiones externas: “Posiblemente -y muy seguramente, dijo- están presionados por el alcalde Alejandro Eder, porque quiere tener un contralor de bolsillo, una persona que le haga juego a sus intereses”.

Las barras también manifestaron su inconformidad y pidieron respeto ante lo que consideran una parálisis injustificada del Cabildo. Se espera que este viernes (28 de noviembre) se retome la elección del contralor con todos los concejales presentes.