Jorge Iván Ospina debe ser suspendido de la Alcaldía, mientras concluyen las investigaciones que se le siguen, recalca senador Motoa

“Los órganos de control le han fallado a la ciudad de Cali”. Con esas palabras, el senador Carlos Fernando Motoa muestra su decepción por los nulos resultados obtenidos en las investigaciones que adelantan contra el alcalde Jorge Iván Ospina, la Contraloría General de la República, la Procuraduría y la Fiscalía.

“Las investigaciones contra Ospina están bien fundamentadas, yo mismo he presentado algunas quejas a la Contraloría cuando estuve en la Comisión Séptima del Senado y ahora que estoy en la Comisión Primera”, añadió Motoa.

Y continuó: “Rescatamos que ese órgano de control tomara la decisión de embargarle las cuentas al alcalde, para proteger el patrimonio de los caleños”. El congresista también aseguró que el daño que le acusa Ospina a Cali es “permanente, constante, cada semana que ese señor está en la Alcaldía de Cali perjudica los recursos de los caleños, la gestión de un gobernante y la imagen de la ciudad”. Por esa razón, el senador vallecaucano insistió en que “debe procederse con la suspensión temporal del alcalde por parte de la Procuraduría, mientras las investigaciones se consolidan o se concluyen”.

“Ya lo demás, lo que conocemos, el peor alcalde que ha tenido Cali, que ha venido deteriorando todos los indicadores. También vemos con preocupación lo que denuncia la Procuraduría, el 57 % de los contratos de Ospina fueron adjudicados a dedo”, concluyó Motoa.

Mientras tanto, en Cali reina el desconcierto pues mes y medio después de que la Contraloría General de la República embargó cinco cuentas bancarias abiertas a nombre de Jorge Iván Ospina y siete bienes que figuran a su nombre, la investigación que motivó esa medida cautelar no ha arrojado ningún resultado.

Esta obedece a las irregularidades halladas en un contrato para compra de cámaras de videovigilancia, ya que al parecer se pagaron 300 millones de pesos por una intermediación innecesaria y 1.500 millones de pesos nunca se ejecutaron.

Asimismo, la Fiscalía y la Procuraduría tienen abiertas varias investigaciones contra el alcalde. En total, son más de 30 los procesos que se adelantan en su contra, sin que hasta la fecha se haya producido un fallo absolutorio o condenatorio.

Lo que temen los caleños es que todas estas investigaciones terminen en lo que acabaron las más de 70 que se le abrieron en su primera administración: en nada. En el 90% de los casos no hubo fallo, simplemente los procesos prescribieron pues una investigación disciplinaria solo tiene una vigencia de cinco años.

“Los órganos de control ladran pero no muerden”

El concejal y candidato a la Alcadía de Cali, Roberto Ortiz, no ocultó su preocupación por los pocos avances que muestran las investigaciones en contra de Ospina: “Veo mucho anuncios, tanto de los órganos de control como de Fiscalía, Procuraduría y Contraloría a nivel nacional, pero no se ve que tomen ninguna medida que nos indique que el alcalde va a tener que responder por muchas actuaciones que hemos denunciado desde el Consejo, denuncias muy graves sobre temas de corrupción y sistemas de la contratación”.

Ortiz agregó que “eso es como cuando uno pasa por un antejardín y hay un perro bravo, que no hace sino ladrar y ladrar a través de la de la malla, pero la gente sigue pasando y no pasa nada. De la misma forma, estos órganos de control muestran los dientes, pero al final no pasa absolutamente nada”.

“Lo que tiene aterrada a la gente en Cali es que el alcalde va a terminar su mandato y no pasa absolutamente nada. Tenemos el caso de la Fiscalía que lo investiga por una contratación indebida, ocurrida durante su primera administración y que desde 2019 se hizo imputación de cargos y el proceso no se mueve”, indicó.

“No ha habido poder humano que nos diga si el alcalde es inocente o es culpable de los hechos que se le imputan. Parece que Ospina tuviera un manto de protección espacial satánica o de brujería porque no le sucede absolutamente nada. Vaya un ser humano de cualquier parte de la ciudad y cometa algún delito o una contravención y ahí mismo es sancionado o es detenido”, concluyó el concejal.

Los bienes que Ospina niega tener, pero figuran a su nombre

Un día después de conocido el embargo que la Contraloría General ordenó sobre siete predios y dos cuentas bancarias de Jorge Iván Ospina, el alcalde manifestó que no tenía el número de propiedades que señalaba la Contraloría en su informe: “Yo no tengo propiedades. Entonces, no existe la posibilidad de embargar siete propiedades. Más allá de un lote y de una finca, yo no tengo más propiedades”.

Sin embargo, la Contraloría sostiene que sí son siete las propiedades y en su informe detalló el número de matrícula de cada uno de los bienes.

Con base en esa información, Semana y El País consultaron el certificado de tradición y libertad y encontró que la finca a la que hace alusión el alcalde, y que hoy se encuentra embargada, está a nombre de terceros. A nombre del alcalde, según los documentos públicos, hay cuatro garajes en el lujoso edificio Mirador del Oeste, ubicado en el barrio Normandía. En los certificados de tradición se especifica que se trata de los garajes 32, 33, 7 y 6, adquiridos el 15 de febrero de 2011 junto con Nelly Marcela Patiño, su expareja sentimental y la misma que el alcalde dice que se quedó con el apartamento.

En el certificado de tradición y libertad también se expone que estos mismos predios fueron objeto de un embargo por jurisdicción coactiva contra Jorge Iván Ospina Gómez entre 2012 y 2015 de parte de la Contraloría de Santiago de Cali. Los otros predios embargados por la Contraloría General son el apartamento 302 del edificio Vista Hermosa en el barrio Miraflores, adquirido por Ospina el 6 de junio de 1995.

En 2016, 21 años después de la compra, también fue embargado por la Contraloría de Cali en un proceso de responsabilidad fiscal. El embargo a este apartamento finalizó en 2019. No obstante, el Juzgado Sexto Penal Municipal prohibió su venta por seis meses ese mismo año. El séptimo predio embargado es el lote número 13 de la urbanización Los Almendros, ubicada en la carrera 24B n.º 2-91, barrio Miraflores. Fue adquirido por el alcalde Ospina en 2008 durante su primera administración al frente de la capital del Valle. En 2012 también fue embargado por la Contraloría local y siguió el mismo proceso disciplinario de los bienes mencionados anteriormente.