Examina tus creencias, y verás que la cultura y los credos te hacen sentir culpable de lo bueno.

Es así como ves como malo el poder, el dinero, la fama, el éxito y el sexo.

Sé consciente de que nada de eso es malo si lo vives con amor a ti mismo y a Dios.

Lo que no es conveniente es que te vuelvas adicto, y que elijas el sexo en lugar del amor.

Tampoco elijas el poder para subyugar, o la fama o el éxito para actuar con soberbia.

Es más, ojalá afirmaras muchas veces: ¡Me amo y amo el poder, amo el dinero, amo el sexo!

Es inaudito que te hayan hecho sentir culpable de las cosas que más te gustan.

Ámate, ama a Dios, y disfruta todo sin feriar tu libertad, y sin hacer daño a otros.

@gonzalogallog