El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, decretó este 16 de septiembre el estado de excepción en siete de las 24 provincias del país donde hay focos de protestas contra la eliminación del subsidio al diésel.
Los expresidentes Lenín Moreno (2017-2021) y Guillermo Lasso (2021-2023) enfrentaron violentas protestas lideradas por la mayor organización indígena del país (Conaie), tras su intento de elevar el precio de los combustibles durante sus gobiernos.
Con el fin del subsidio, el costo del diésel pasó de 1,80 a 2,80 dólares por galón. Los colectivos de trabajadores y estudiantes protestan porque estas medidas afectan el costo de vida en el país.
Conductores de camiones cerraron el lunes algunas vías, que fueron despejadas horas después tras la intervención de la policía, sin que se hayan reportado heridos o fallecidos.
Además, este martes, la carretera Panamericana Norte, en el ingreso a Quito, capital del país, amaneció bloqueada con piedras y montículos de tierra.
Frente a las protestas, el presidente Noboa resolvió “declarar el estado de excepción en las provincias de Carchi, Imbabura, Pichincha, Azuay, Bolívar, Cotopaxi, y Santo Domingo, por la causal de grave conmoción interna”, según el decreto firmado este 16 de septiembre para contener el orden público.
La medida se extenderá por 60 días. El gobierno argumentó que los bloqueos “han provocado complicaciones en la cadena de abastecimiento de alimentos” y afectan el “libre tránsito de las personas, ocasionando la paralización de varios sectores que afectan a la economía”.
Daniel Noboa además resolvió suspender la libertad de reunión en las siete provincias y autorizó a las fuerzas policiales y militares a “impedir y desarticular reuniones en espacios públicos donde se identifiquen amenazas a la seguridad ciudadana”, argumentando que de esta manera se evitarán nuevos bloqueos.
Este martes en la ciudad de Cuenca, capital de Azuay, está prevista también una marcha contra un proyecto minero a cargo de una empresa canadiense.
Marlon Vargas, presidente de la Conaie, exigió desde Cuenca la derogación del decreto que elimina el subsidio al diésel debido a que “perjudica al sector empobrecido, al pueblo ecuatoriano”.
Por su parte, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) tiene previsto marchar el 23 de septiembre contra la eliminación del subsidio al diésel, en tanto que estudiantes universitarios convocaron para este martes en la tarde una protesta en Quito por este mismo motivo.
De otro lado, la Presidencia de Ecuador señaló que el Bloque de Seguridad continúa combatiendo el tráfico ilegal de combustibles. “En operativos realizados en Santa Elena y Shushufindi se incautaron 7.000 galones de combustible en poder de las mafias. Trabajamos sin tregua por un Ecuador más seguro, justo y soberano”.