En medio del desarrollo de la operación Draga Trece, y en el marco del lineamiento institucional de protección del capital natural del país, la Policía Nacional en coordinación con el Ejército Nacional y Corponariño, logró un contundente resultado contra las finanzas criminales de la estructura Autodefensas Unidas de Nariño.
De acuerdo con las autoridades, la intervención se adelantó en zona rural del municipio de Consacá, donde fue desmantelada una mina de oro ilegal que servía como fuente principal de recursos para esta organización delictiva, la cual ejerce una presión violenta a las comunidades campesinas de esta parte del sur del país.
“En el lugar se realizó la incautación de maquinaria pesada, explosivos y diversos elementos utilizados para la explotación ilícita, lo que permitió afectar de manera significativa la infraestructura logística del grupo criminal, ese era el objetivo, golpear esas economías ilegales que terminan de financiar las acciones violentas contra la población civil”, expresó el comandante encargado de la Policía en Nariño, teniente coronel Jorge Andrés Mendoza Sierra.
Según las investigaciones, esta mina ilegal no solo representaba un flujo constante de dinero para la estructura, sino que además estaba generando una grave afectación ambiental al contaminar un importante afluente hídrico del departamento de Nariño, poniendo en riesgo la biodiversidad de la región y a las comunidades rurales que dependen directamente de este recurso vital para su consumo y actividades agrícolas.
“La explotación ilegal de minerales es una de las principales economías ilícitas que alimenta a organizaciones criminales en el suroccidente del país, generando daños irreparables al medio ambiente, incrementando la deforestación y contaminando los ecosistemas”, indicaron los policías que participaron en este operativo de control, el cual surgió tras las denuncias de las mismas comunidades de Consacá.
Asimismo, los uniformados resaltaron que “este resultado representa un golpe estratégico que no solo afecta el músculo financiero de estas estructuras, sino que también contribuye a la defensa del capital natural y la sostenibilidad ambiental.
En infraestructura ilegal, se inhabilitaron alrededor de 3.354 galones de hidrocarburos y se destruyeron dragas utilizadas en esta actividad ilegal. También se dio el desmantelamiento de una piscina de procesamiento y la neutralización de excavadoras. Una refinería clandestina y cinco motores industriales fueron intervenidos.
Según cifras oficiales, el impacto económico a las redes ilegales superó los 124 mil millones de pesos, dinero que no parará a las arcas de este grupo armado al margen de la ley.
“Con este operativo, la Policía Nacional reafirma su compromiso de debilitar las economías ilícitas, proteger los recursos naturales y garantizar la tranquilidad y seguridad de las comunidades en Nariño”, acotó el teniente coronel Jorge Andrés Mendoza Sierra.