En el primer día en que la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá revisaría la apelación de la condena de primera instancia, a través de una carta, el expresidente Álvaro Uribe Vélez anunció que renuncia a la prescripción de su caso por manipulación de testigos.

“En ejercicio de mi defensa material, he solicitado a la sala, a través del recurso de apelación, que se revoque el agravio a mis derechos y se reconozca mi inocencia, probada en juicio”, expresó el exmandatario en su carta enviada al despacho del magistrado Manuel Antonio Merchán.

Con esta decisión, el tribunal capitalino ya no tendrá la presión de emitir la decisión de segunda instancia hasta mediados de octubre, como se tenía previsto, ya que en esa fecha era cuando se vencían los términos del proceso judicial.

“A pesar de que la ley me otorga un camino corto y sencillo para salir de ese tortuoso proceso, no puedo aceptarlo, pues aun con el peso de la injusta condena y estando mi libertad en juego, no puedo declinar el camino de la verdad”, aseguró el líder político del Centro Democrático.

Expresidente Álvaro Uribe Vélez manifiesta que quiere que se sepa la verdad sobre su caso judicial de manipulación de testigos. | Foto: SEMANA

Además, aunque dijo que la renuncia a la prescripción sería más compleja para liberarse de su proceso judicial, lo hace para que se conozca la verdad.

“La confianza depositada en mí, por la patria y mis compatriotas, me impone, en esta encrucijada, dar ejemplo y optar por el camino que, por más difícil o riesgoso, es correcto y coherente con lo que he defendido a lo largo de mi vida: la verdad”, explicó.

A renglón seguido, el exjefe de Estado resaltó que, durante su juicio, se abstuvo de guardar silencio, ya que fue uno de los testigos de su propia defensa y estuvo presentado varias pruebas testimoniales y documentales.

Álvaro Uribe resaltó que durante su juicio se abstuvo de guardar silencio, ya que fue uno de los testigos de su propia defensa. | Foto: #SemanaNoticias

“Estimo, con respeto, que ese derecho a ser oído no fue respetado materialmente por la primera instancia. Eso se aprecia en el fallo que, a pesar de ser extenso, echó de menos la valoración de gran parte de los hechos probados en juicio”, destacó.

Asimismo, reflexionó que “sería hipócrita de mi parte reclamar mi derecho a ser escuchado, en procura de la verdad, y pretender que ello se realice por la Sala de forma real y adecuada, en un término bastante inferior a aquel que se requiere solo para tener la oportunidad de escuchar todas las audiencias, revisar los alegatos de conclusión, estudiar el fallo de primera instancia y cotejar, uno a uno, los errores atribuidos al fallo en tres impugnaciones, contrastándolos con los alegatos de los no recurrentes”.

Como manera de conclusión, Uribe Vélez reafirmó que nunca ha buscado beneficiarse de la prescripción de su caso judicial que inició hace siete años en la Corte Suprema de Justicia.

“La prescripción de la acción penal, que nunca he buscado y de la que no quiero beneficiarme, no puede privarle la oportunidad a la Sala de tener las condiciones materiales mínimas para proferir un fallo que, independientemente de su sentido, sea el resultado de un análisis sereno, ponderado e integral de la prueba”, concluyó el también exgobernador de Antioquia.

Hace una semana, el expresidente Uribe quedó formalmente en libertad, luego de que el Tribunal Superior de Bogotá fallara a su favor la tutela que presentó para dejar sin efecto la prisión domiciliaria que había ordenado la jueza Sandra Heredia en su contra.